Mujeres cat¨®licas, la mayor¨ªa aplastada

UN DEBATE SOBRE LA SITUACI?N de la mujer en la Iglesia cat¨®lica tiene que ver, sobre todo, con su exclusi¨®n del sacerdocio. Pese a que el 75%, como m¨ªnimo, de sus fieles son mujeres, la religi¨®n fundada por el nazareno Jes¨²s hace algo m¨¢s de veinte siglos no admite mujeres en sus puestos de mando (obispos, arzobispos, cardenales, papa) ni en el ministerio sacerdotal. La fundamentaci¨®n teol¨®gica de esa situaci¨®n la buscan sus defensores en el G¨¦nesis: Ad¨¢n fue creado directamente a imagen de Dios, y la mujer indirectamente a trav¨¦s del var¨®n. Para colmo, el libro presenta a la mujer como tentadora y culpable de la p¨¦rdida del para¨ªso.

"El desprecio hacia la mujer y el miedo hacia el sexo vienen de la noche de los tiempos y llegan hasta nuestra violencia de g¨¦nero, escandalosamente asim¨¦trica hacia la mujer", afirma Maria ?ngels Filella i Castells. Sus estudios sobre el Nuevo Testamento se plasman en La manzana del Para¨ªso, ?y si Eva no se la hubiera comido?, un alegato contra la actitud de la jerarqu¨ªa hacia la mujer. "La Iglesia tendr¨¢ que pedir perd¨®n por tanta arbitrariedad e injusticia", advierte.

La Iglesia romana es patriarcal, pero crece en su seno la voz de la mujer. Es el signo de las sociedades avanzadas, y la jerarqu¨ªa cat¨®lica no puede hacerle frente. Casi el 80% de los profesores de religi¨®n cat¨®lica en la escuela p¨²blica espa?ola son mujeres. Se trata de te¨®logas, en su mayor¨ªa, que no est¨¢n dispuestas a comulgar m¨¢s con ruedas de molino. "En los ¨²ltimos treinta a?os han aparecido numerosos documentos y declaraciones de te¨®logos y te¨®logas, grupos de sacerdotes y religiosos, movimientos cristianos y organizaciones c¨ªvico-sociales, e, incluso, de obispos y cardenales, pidiendo el acceso de las mujeres al sacerdocio", dice Juan Jos¨¦ Tamayo, profesor de Teolog¨ªa en la Universidad Carlos III, en Madrid. Esa exclusi¨®n de la mujer -su "invisibilidad y silencio" dentro de una organizaci¨®n en que son inmensa mayor¨ªa- le parece un problema de derechos humanos, imposible de justificar con argumentos teol¨®gicos.

La torre de la "patriarqu¨ªa" romana es especialmente visible en Espa?a. De la decena de nombramientos realizados el pasado 20 de junio por la Comisi¨®n Permanente de la Conferencia Episcopal, s¨®lo dos fueron a parar a mujeres, en concreto Bego?a de Burgos L¨®pez, laica de la di¨®cesis de Salamanca, como presidenta de la ONG Manos Unidas, e Isabel Ruiz Ruiz, laica de Madrid, como presidenta de la Comisi¨®n Cat¨®lica Espa?ola de la Infancia.

El problema no est¨¢ s¨®lo en la exclusi¨®n del sacerdocio y la jerarqu¨ªa. "La demanda del ministerio ordenado para las mujeres no debe entenderse -al menos desde la ¨®ptica de la teolog¨ªa feminista- como una asimilaci¨®n a la mentalidad clerical. La pregunta a plantear no es por qu¨¦ las mujeres deben recibir las ¨®rdenes sagradas, sino por qu¨¦ los varones o cualquier otra persona deben ser ordenados para un estatus clerical especial". Lo se?ala la te¨®loga y profesora de religi¨®n Margarita Pintos de Cea-Naharro, autora de La presencia de las mujeres en la Iglesia cat¨®lica espa?ola.

Se trata de un informe exhaustivo, que documenta, con datos de la propia jerarqu¨ªa, el enorme foso y la apabullante ausencia de mujeres en esta Iglesia espa?ola. Antes ofrece una argumentaci¨®n sobre causas y efectos, y sobre el marco jur¨ªdico que regula y sit¨²a a las mujeres en el interior de la organizaci¨®n cat¨®lica, incluso comparando con otras Iglesias cristianas europeas. Adem¨¢s, esta conclusi¨®n: "La reivindicaci¨®n feminista del ministerio ordenado no es un fin en s¨ª misma, ni siquiera nuestra meta ¨²ltima. Constituye una etapa m¨¢s del viaje hacia la libertad y la liberaci¨®n, al servicio de una sociedad liberada de las vigentes discriminaciones sexistas, racistas, ¨¦tnicas, clasistas y religiosas".

En Espa?a hay 399 congregaciones de religiosos: 295 son femeninas y 104 masculinas. Residen aqu¨ª unos 63.700 religiosos (frailes y monjas): 50.300 son mujeres y 13.400 hombres. Hay 10.000 sacerdotes para 22.186 parroquias. Todos son hombres, obvio es decirlo. Hay 1.500 delegaciones diocesanas, una especie de direcci¨®n territorial eclesi¨¢stica: 1.432 est¨¢n ocupadas por varones, s¨®lo 42 por mujeres, apenas el 2,8%. Y los 120 prelados, entre cardenales, arzobispos y obispos, em¨¦ritos o en activo, que est¨¢n o han estado al mando de este imponente ej¨¦rcito religioso son tambi¨¦n hombres.