El rey y el periodista

?rase una vez el rey de un peque?o pa¨ªs que so?aba con hacerse el due?o de otro mucho m¨¢s grande y m¨¢s rico que el suyo. El rey recurri¨® a un explorador para que le comprara parcelas y parcelas de terreno hasta disponer de una finca tan grande como media Europa. Y en 1885 el cuento se hizo realidad y se convirti¨® en tragedia. El rey se llamaba Leopoldo II de B¨¦lgica. El explorador no era otro que el periodista brit¨¢nico Henry Morton Stanley, aqu¨¦l que logr¨® encontrar al famoso doctor, misionero y explorador David Livingstone, quien llevaba cinco a?os desaparecido en ?frica, y pronunci¨® la famosa frase: "El doctor Livingstone, supongo".

El rey Leopoldo II no pis¨® en su vida Congo. Pero sab¨ªa de su inmensa riqueza. Y disfraz¨® su codicia con campa?as ante la prensa y los l¨ªderes mundiales en las que declaraba que su objetivo era acabar con la esclavitud en este territorio y llevar los avances del libre mercado. La realidad era, seg¨²n diversos historiadores, que someti¨® a millones de congoleses a una explotaci¨®n inhumana y que muchos de ellos murieron a causa de esto.

En 1906 la colonia de Leopoldo II pas¨® a ser propiedad del Estado belga. Varias d¨¦cadas despu¨¦s, cuando el pa¨ªs consigui¨® su independencia, en 1960, s¨®lo hab¨ªa 30 licenciados universitarios negros en todo su territorio. Uno de ellos era Patrice Lumumba, elegido primer ministro en las primeras y hasta ayer ¨²nicas elecciones democr¨¢ticas del pa¨ªs. S¨®lo dur¨® un a?o. Lumumba fue fusilado en secreto.