"Oye, que muchas gracias... Y que no lo olvidaremos nunca"

El gui¨®n no escrito de la boda dec¨ªa que los novios llegar¨ªan separados, apenas con dos minutos de diferencia, y se encontrar¨ªan en la Casa de la Panader¨ªa, uno de los edificios m¨¢s nobles de la capital, en plena plaza Mayor. Pero llegaron juntos, cogidos de la mano -ambos de impecable chaqu¨¦-, y juntos subieron las escaleras hasta la primera planta. All¨ª los esperaban el oficiante, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, y un centenar de invitados: familiares, compa?eros de trabajo -Javier G¨®mez es responsable del grupo de Lesbianas y Gays del PP, y Manuel R¨®denas coordina el programa de asesoramiento para gays de la Comunidad de Madrid- y amigos de fuera y de dentro del partido.

Entre los ¨²ltimos, la diputada popular y ex ministra Celia Villalobos; el consejero de Sanidad, Manuel Lamela, y los concejales de Urbanismo, Pilar Mart¨ªnez; de Las Artes, Alicia Moreno, y del distrito Centro, Luis As¨²a. Entre los de fuera del PP, el presidente del Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra; la presidenta de la Federaci¨®n de Gays y Lesbianas, Beatriz Gimeno, y su esposa, Boti Rodrigo, y la coordinadora del ¨¢rea transexual del PSOE, Carla Antonelli.

A los novios los recibi¨® un aplauso entusiasta -otro m¨¢s t¨ªmido hab¨ªa acompa?ado al alcalde cuando entr¨® en el Sal¨®n Real- y un coro que cantaba Oh happy day! Luego todo dur¨® menos de un cuarto de hora: el alcalde dio la bienvenida a un "aut¨¦ntico d¨ªa feliz" y ley¨® el art¨ªculo 14 de la Constituci¨®n, ¨¦se que dice que todos los espa?oles son iguales ante la ley, "sin que pueda prevalecer discriminaci¨®n alguna por raz¨®n de nacimiento, raza, sexo, religi¨®n". Les pidi¨® consentimiento y los declar¨® "unidos en matrimonio". Los dos maridos se dieron un beso fugaz.

"Una lecci¨®n de respeto"

"Os dir¨ªa muchas cosas, pero a veces es mejor dejar hablar a los poetas", afirm¨® Ruiz-Gallard¨®n. As¨ª que un poema del liban¨¦s Gibr¨¢n Jalil Gibr¨¢n habl¨® por ¨¦l: "Ofreced vuestro coraz¨®n, pero no para que se adue?en de ¨¦l. S¨®lo la mano de la vida puede contener vuestros corazones...".

Tom¨® la palabra la escritora Ruth Toledano, que pidi¨® perd¨®n a los novios porque durante mucho tiempo no entendi¨® "su lugar", el de gays militantes dentro del PP. Les dio las gracias por ofrecer una "lecci¨®n del respeto a la diferencia", y habl¨® del "amor, la principal doctrina". "Este acto es un compromiso con la vida. Y la vida no puede recurrise", subray¨® Toledano.

Pasaban las tres de la tarde cuando Ruiz-Gallard¨®n abandon¨® la Casa de la Panader¨ªa, sin hacer declaraciones. G¨®mez y R¨®denas hab¨ªan bajado poco antes a la plaza Mayor, a hablar con los periodistas, a decirles que el de ayer era el d¨ªa m¨¢s feliz de sus vidas y que ning¨²n conflicto interno en el seno del PP, su partido, iba a arruin¨¢rselo. Cuando Ruiz-Gallard¨®n sal¨ªa por la puerta, R¨®denas se le acerc¨® para abrazarlo: "Oye... que muchas gracias. Y que no lo olvidaremos nunca".