"Fue l¨®gico el duro castigo a la Juve"

Lilian Thuram (Guadalupe, 1972) parece, con sus gafas de intelectual, todo menos un futbolista. Campe¨®n y subcampe¨®n del Mundo con Francia, el jugador m¨¢s veces internacional por su pa¨ªs acaba de fichar por el Bar?a. Afable y un punto socarr¨®n, Thuram considera normal que la justicia condenara al Juventus, su ex club, por ama?ar arbitrajes. Jugador comprometido y considerado una especie de voz de la conciencia en su pa¨ªs, Thuram se enfrent¨® al ministro del Interior durante la revuelta de la periferia parisina. Tras la final del Mundial, pas¨® una semana de vacaciones en ?frica combatiendo la drepanocitosis, una enfermedad que, por falta de gl¨®bulos rojos, puede producir neumon¨ªa, meningitis, anemia y dolores intensos en extremidades y abdomen. Dice que fue la semana m¨¢s intensa de su vida.

"Me sorprendi¨® que el Bar?a me llamara. Tengo 34 a?os, pero creo que el esp¨ªritu de un jugador lo marca su forma f¨ªsica"

"Fue bello el gesto de Eto'o de querer dejar un campo por gritos racistas, pero lo ser¨¢ m¨¢s cuando los no negros se planten"

Pregunta. ?Por qu¨¦ lo dijo?

Respuesta. La vida de una persona es importante cuando tienes la impresi¨®n de que est¨¢s ayudando. Y yo la tuve. Fui a ?frica para hablar de esa enfermedad gen¨¦tica, poco conocida pese a ser la m¨¢s importante que existe y que afecta especialmente a los negros (el 85% de quienes la sufren). Habl¨¦ con las autoridades para que informen de que dos padres con un mismo gen pueden tener un hijo afectado y para que sepan que con un an¨¢lisis de sangre se puede saber si un reci¨¦n nacido la padece. Hay medicamentos que, como pasa en Francia, les ayudan a hacer una vida mejor. Se trataba de educar y prevenir pero en ?frica es muy dif¨ªcil.

P. Se fue al Mundial como jugador del Juventus y acaba de debutar en Estados Unidos con el Bar?a tras el fraude del calcio. ?C¨®mo vivi¨® ese fren¨¦tico proceso?

R. Con bastante tranquilidad. Prob¨¦ a no ponerme nervioso: no serv¨ªa de nada. Y esper¨¦ a la justicia: el Juventus baj¨® a la seria B y ped¨ª que me dejaran marchar.

P. ?Le doli¨® ese desenga?o?

R. No, no es que me doliera porque durante cinco a?os en Tur¨ªn hice lo que pude: unas veces gan¨¦ y otras perd¨ª. Y despu¨¦s resulta que hay otras personas que para ganar siempre hicieron otras cosas. Te disgusta por t¨ª y sobretodo por los tiffosi. El f¨²tbol debe enviar un mensaje positivo y esto ha sido muy negativo, convirtiendo a este deporte en algo muy sucio. Por eso, es normal que la justicia tomara una decisi¨®n dura con el Juventus. Es un disgusto para los jugadores y los tiffosi pero es normal si se ama el f¨²tbol.

P. ?Qu¨¦ ofertas ten¨ªa adem¨¢s de la del Bar?a?

R. De Inglaterra. Tipo Grecia, Turqu¨ªa...fue bastante f¨¢cil (je, je) elegir al Bar?a, ahora el equipo m¨¢s fuerte del mundo. Con mi edad, deb¨ªa aprovechar.

P. ?Conoc¨ªa a Rijkaard?

R. No, pero lo segu¨ª cuando estaba en el Ajax y el Milan.

P. Debi¨® ser una sorpresa que el Bar?a le llamara...

R. S¨ª, durante el Mundial un periodista espa?ol me dijo: 'Han escrito que el Bar?a te quiere fichar'. Y yo le dije: '?Qu¨¦ est¨¢s diciendo? ?Es que no sabes los a?os que tengo?' (Junta las palmas de las manos movi¨¦ndolas de arriba abajo en el t¨ªpico gesto italiano). Pero s¨ª, fue una gran cosa.

P. ?Qu¨¦ le suger¨ªa el Bar?a antes de fichar?

R. Siempre ha estado ligado a una gran sociedad, que juega muy bien y que gana. Yo estuve con mis hijos en la final de Par¨ªs. Uno es un fan de Ronaldinho y est¨¢ muy contento con mi fichaje. El estilo es distinto pero no espero problemas de adaptaci¨®n. El placer de jugar no se pierde si separas el campo de todo lo que envuelve a este deporte.

P. ?Qu¨¦ impresi¨®n ha extra¨ªdo hasta ahora del equipo?

R. Que el grupo se divierte y se lleva muy bien. Es normal porque hace tres a?os que est¨¢n haciendo grandes cosas. Es un ambiente muy positivo y muy tranquilo.

P. Giuly dec¨ªa que usted es un jugador muy fuerte, muy bueno en el uno contra uno y que se quedar¨¢ cuatro a?os...

R. (Se r¨ªe) Yo he firmado por dos. El f¨ªsico decidir¨¢ cu¨¢nto tiempo aguanto. Yo pruebo a dar el m¨¢ximo y ya se ver¨¢. Pero si fichan a alguien con 34 a?os supongo que creen que puedo jugar. Para m¨ª, la edad no es importante. El esp¨ªritu de un jugador lo marca sobretodo su forma f¨ªsica.

P. Pero los a?os se notan...

R. S¨ª, pero hay jugadores de 22 que est¨¢n cansados. Pero yo nac¨ª viejo y cansado (r¨ªe). No veo el problema.

P. Pues sus compa?eros dicen que se han agotado en esta gira ?Le sorprende que la gente haya llenado los campo en Estados Unidos?

R. ?Nooo! Hay que ver quienes est¨¢n en los estadios: son personas de origen sudamericano.

P. ?Y que Francia fuera finalista del Mundial?

R. No fue una sorpresa. Si analizas a los bleus ves que sus jugadores son muy importantes en Europa. Tuvimos alguna dificultad en la primera fase por miedo a caer como en Corea y Jap¨®n o en la Eurocopa de Portugal. Pero cuando la superamos, Francia fue un equipo fuerte, unido y con calidad. Mereci¨® el Mundial: jug¨® mejor y se vio que Italia s¨®lo quer¨ªa llegar a los penaltis. Pero se puso cuesta arriba cuando perdimos a Vieira y a Zidane.

P. ?C¨®mo se explica lo del cabezazo de su compa?ero?

R. Son cosas que suceden. No es la primera vez que Zidane hace algo as¨ª. Materazzi se mete a menudo en l¨ªos y creo que le provoc¨®. Pero Zizou se equivoc¨®.

P. ?Qu¨¦ le parece que Eto'o amenazara con abandonar La Romareda tras o¨ªr gritos racistas?

R. Bien, pero hubiera sido m¨¢s bello que no ¨¦l sino otros jugadores no negros dijeran: 'Aqu¨ª no jugamos'. El gesto habr¨ªa sido a¨²n m¨¢s fuerte. Es f¨¢cil que alguien que haya sido atacado reaccione, pero es a¨²n m¨¢s bello si los otros lo hacen por ¨¦l. Es importante decir a la gente cuando se est¨¢ equivocando.

P. ?Ha sufrido usted insultos parecidos?

R. Siiii. En Italia. Y en Francia a menudo. Est¨¢ relacionado con una historia de siglos. Los negros han estado ligados a la esclavitud, a la colonizaci¨®n, a una historia donde no eran vistos como personas. Y esto se lleva dentro porque no se ha educado a la gente para cambiar eso.

P. El ministro del Interior de su pa¨ªs, Nicolas Sarkozy, muy cr¨ªtico con los j¨®venes de la revuelta de Par¨ªs, le llam¨® despu¨¦s de que se identificara con ellos ["Si no fuera futbolista estar¨ªa all¨ª; sin trabajo uno se siente excluido", dijo] ?C¨®mo est¨¢n las cosas?

R. A menudo la gente no entiende porque no conoce. Y ese es el problema: no han nacido en la periferia y no viven esa problem¨¢tica. Pero como yo s¨ª y he o¨ªdo esas cr¨ªticas de peque?o, le dije: 'Antes de juzgar a la gente necesitas entenderla'. Era f¨¢cil decir cosas negativas de los j¨®venes. La mayor¨ªa vive en otro mundo y no entiende a la minor¨ªa: cree tener siempre la raz¨®n y no siempre es as¨ª.

P. La Francia multicolor gan¨® el Mundial en 1998 y se tom¨® como ejemplo de integraci¨®n, repetido con la final de Alemania ?Eso s¨®lo se ve en el f¨²tbol?

R. Abrir las puertas para el deporte es bastante f¨¢cil en todo el mundo pero eso no implica que lo est¨¦n para el resto de la sociedad. En mi pa¨ªs, por pol¨ªtica, se extendi¨® la idea de que la Francia del 98 era la imagen de Francia. Era verdad: es el reflejo de la poblaci¨®n pero las puertas no est¨¢n abiertas. S¨®lo para el calcio, con una selecci¨®n con muchos negros, y que desata euforia por llegar a una final. Pero hay otros problemas para los negros. Si uno s¨®lo mira a los bleus puede parecer que las cosas se hacen bien y no es cierto. Poco a poco debemos trabajar para cambiar la mirada.

P. Usted es un defensor de los derechos humanos ?Qu¨¦ le parece la pol¨ªtica belicista de Bush?

R. Alguien con poder y responsabilidad sobre los otros debe aportar un mensaje de paz. Por ejemplo: Am¨¦rica hace una guerra contra el terrorismo pero para lograr la paz en el mundo es mejor una guerra contra el hambre. En general, cuando se aplica el ojo por ojo la gente se vuelve ciega.