La Catalu?a emergente: una nueva visi¨®n

En los ¨²ltimos a?os en Catalu?a ha habido m¨¢s diagn¨®stico que visi¨®n. Hay m¨¢s preocupaci¨®n para explicar d¨®nde estamos que para intentar definir ad¨®nde vamos. Somos campeones del mundo en diagn¨®stico, tenemos todo tipo de observatorios, pero nos falta una visi¨®n compartida potente, planteada con rigor, sobre el futuro de Catalu?a.

En la reciente serie publicada en este peri¨®dico sobre la Catalu?a emergente, se evidencia con ejemplos que hay gente emprendedora que trabaja con una nueva visi¨®n, tanto para sus iniciativas personales como para Catalu?a. Uno tiene la convicci¨®n de que hay una nueva visi¨®n emergente del pa¨ªs que todav¨ªa no recogen los argumentarios pol¨ªticos. De hecho, no es imprescindible que el futuro del pa¨ªs se defina desde la pol¨ªtica, y ser¨ªa deseable que el ejemplo de algunos proyectos, de algunas trayectorias, sirviera para concretar y compartir una visi¨®n del papel de Catalu?a en el mundo.

En el Barcelona Breakfast, entidad de empresarios, profesionales y universitarios, reunidos en torno a la econom¨ªa del conocimiento, hemos trabajado para definir nuestra visi¨®n de pa¨ªs, nuestro escenario de futuro deseado, con la ambici¨®n y el realismo que requieren las visiones. Para ello hemos intentado no instalarnos en errores de anta?o y observar aquellos modelos de pa¨ªs que pod¨ªan estimular nuestra reflexi¨®n. Nos inspira m¨¢s California que Florida, nos gustar¨ªa tener un gran motor empresarial como Finlandia, la capacidad de captar proyectos e inversiones de Irlanda o aspectos del modelo r¨¢pido de Corea. Pero somos conscientes de la necesidad de tener un modelo propio, construido m¨¢s all¨¢ del diagn¨®stico que se regodea en s¨ª mismo. Tampoco nos motivan los discursos catastrofistas; m¨¢s bien creemos que estamos bastante bien, pero que no vamos nada bien. Nos preocupa la sensaci¨®n de pa¨ªs que mira m¨¢s por el retrovisor que por el parabrisas.

Tener visi¨®n es tan necesario como disponer de un sistema de liderazgos que sepan plasmarla, gente con capacidad de tener prioridades y de ilusionar incluso cuando dicen que no, con capacidad de establecer l¨®gicas m¨¢s eficientes en la relaci¨®n p¨²blico-privada y de mejorar la situaci¨®n de Catalu?a en el mundo actual. Nos falta dibujar el papel futuro de Catalu?a en Espa?a (que ya no es el pa¨ªs atrasado que algunos denostan) y en Europa en este mundo global, donde no s¨®lo Estados Unidos desempe?a un papel clave, sino en el que los pa¨ªses emergentes de Asia ejercen un papel tan determinante como el de la pobreza de ?frica, que todos los d¨ªas llama a nuestras puertas.

A juicio del Barcelona Breakfast, la visi¨®n de Catalu?a consiste en construir un pa¨ªs con una econom¨ªa del conocimiento s¨®lida. No se trata de tener un pa¨ªs basado solamente en el sector de las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n, sino un pa¨ªs de clusters densos en un conocimiento que los haga competitivos tanto si pertenecen a sectores nuevos como a sectores consolidados. Es una visi¨®n de un pa¨ªs que deber¨ªa conseguir resultados eficientes en su sistema de conocimiento basado en los ejes de empresa, Universidad y Administraci¨®n. Un pa¨ªs que es capaz de apostar por aquellos que demuestran potencialidad de liderazgo internacional. Sin miedo a escoger, a renunciar, a apostar fuerte. Querer ser buenos en todo s¨®lo nos har¨¢ aspirar a la mediocridad.

Esta Catalu?a fuerte en econom¨ªa del conocimiento requiere dos grandes iniciativas: primera, mejorar la captaci¨®n y el rendimiento del talento, y segunda, potenciar proyectos de una dimensi¨®n internacional m¨¢s significativa. Necesitamos atraer talento y retener talento, nuestras empresas necesitan una infusi¨®n de talento (local e internacional) equiparable al esfuerzo que las empresas catalanas han hecho en exportaci¨®n en las ¨²ltimas d¨¦cadas. Necesitamos mejorar la rentabilidad de nuestras inversiones en conocimiento con una verdadera revoluci¨®n cultural: no se trata de poner un parque tecnol¨®gico en cada esquina ni de tener una universidad en cada barrio; se trata de orientar el sistema de conocimiento al desarrollo de proyectos innovadores y tangibles, multiplicando los resultados actuales. Adem¨¢s, hay que crecer. No tenemos proyectos grandes con muy pocas excepciones. Debemos mejorar nuestra capacidad de riesgo empresarial para adquirir dimensi¨®n y nuestra ejecuci¨®n de proyectos colectiva; no sirve de nada inventar planes por doquier que no se ejecutan. Talento y dimensi¨®n, ¨¦sta es nuestra propuesta para avanzar.

Catalu?a es un pa¨ªs hecho de una red de ciudades muy interesantes y tiene que pujar para atraer grandes proyectos (tanto como grandes empresas), debe internacionalizar su talento atrayendo y exportando m¨²ltiples marcas personales que le den riqueza y muchas marcas corporativas que le otorguen m¨¢s peso y presencia en el mundo. La Catalu?a emergente existe, avanza, a pesar de que no ha terminado de formular su visi¨®n.

Xavier Marcet es presidente de la asociaci¨®n para la econom¨ªa del conocimiento Barcelona Breakfast.