Compre una isla a precio de piso

?Qu¨¦ pensar¨ªa si un amigo le contara que se ha comprado una isla de 85.000 metros cuadrados en Nicaragua, con dos casas, embarcadero, helipuerto y una playa de arena blanca? Probablemente, pensar¨ªa que su amigo se ha vuelto loco o que le ha tocado la loter¨ªa y no lo ha dicho. Pero esa primera impresi¨®n podr¨ªa cambiar cuando se enterara de que la isla le ha costado 352.000 euros. Con un poco de suerte (o mucha, si vive en una de las capitales m¨¢s caras de Andaluc¨ªa) es casi lo mismo que usted est¨¢ a punto de pagar por un piso de 70 metros cuadrados en un segundo sin ascensor. ?Est¨¢ m¨¢s loco usted o su amigo?

Si de lo que se trata es de comprar una casa para vivir, habr¨¢ que seguir someti¨¦ndose al mercado tradicional; pero si tiene algunos ahorros y quiere invertir, por ejemplo, en una segunda vivienda para pasar las vacaciones, las posibilidades se ampl¨ªan. Inmonaranja, una agencia inmobiliaria de Motril (Granada), se est¨¢ especializando en vender islas paradis¨ªacas.

Ahora tiene a la venta dos: la de 352.000 euros, frente a la costa de la Granada nicarag¨¹ense, y otra de 10.000 metros por 233.000 euros en el Oc¨¦ano Atl¨¢ntico, tambi¨¦n en Nicaragua. ?sta, en vez de dos casas, tiene una y carece de playa y helipuerto, pero cuenta igualmente con embarcadero. Ambas tienen electricidad, agua potable y cobertura de tel¨¦fonos m¨®viles para momentos de debilidad...

Gabriel Medina, propietario de Inmonaranja, se reconoce sorprendido por el inter¨¦s que han despertado sus anuncios, distribuidos por Internet (www.inmonaranja.es). "Llama mucha gente interesada. M¨¢s de lo que yo pensaba. Sobre todo, de Madrid y Sevilla". Medina lleg¨® al negocio de las islas por casualidad: "Abr¨ª la agencia hace dos meses y buscando por Internet propiedades para vender, me encontr¨¦ una isla en el pac¨ªfico, Isla J¨²piter". Localiz¨® al due?o, que fij¨® el precio en 6,2 millones de euros. "Para mi sorpresa recib¨ª much¨ªsimas llamadas. Incluso una empresa de Murcia me quer¨ªa cambiar la isla por una casa en Marbella que val¨ªa ocho millones".

Pero la operaci¨®n de frustr¨® porque el due?o de Isla J¨²piter par¨® la venta. "De tener una isla y ning¨²n comprador, pas¨¦ a tener compradores y ninguna isla", recuerda Medina. Busc¨® nuevas islas en venta y encontr¨® las dos de Nicaragua. En los pr¨®ximos d¨ªas, espera incorporar a su cat¨¢logo otras ocho en Nicaragua (algunas de ellas por menos de 30.000 euros), una en Fiyi y otra en Ghana. "Hace dos meses no nos hab¨ªamos planteado el mercado de las islas. Pero hoy se est¨¢n convirtiendo en nuestro producto estrella", cuenta Medina, de 37 a?os.

Entre los interesados en adquirir una, hay desde familias que quieren montar un complejo tur¨ªstico a empresas que pretenden tener una isla para que sus mejores clientes la disfruten. "La mera posibilidad de imaginar ser propietario de una isla genera mucha adrenalina", advierte el empresario. "Que tu isla aparezca en los mapas, ser propietario de ese trocito. Es quiz¨¢ una expresi¨®n del ego humano".