Colas de hasta cuatro horas para renovar la tarjeta de aparcamiento

Conseguir la tarjeta de residente para poder aparcar en las zonas reservadas para ello (plazas verdes) no es tarea f¨¢cil. En Madrid s¨®lo hay una oficina municipal donde poder cumplir ese tr¨¢mite. Cada ma?ana, decenas de personas forman una larga fila y esperan hasta cuatro horas para conseguir uno de los 350 n¨²meros que permiten ser atendido. El Ayuntamiento reconoce el problema y dice que ha reforzado el servicio.

"Desde las ocho de la ma?ana hay colas. Cuando voy a llevar a mis hijos al colegio la fila da la vuelta a toda la manzana", cuenta Francisco, uno de los 350 afortunados que pudo tramitar el pasado lunes la tarjeta de residente, distintivo que permite a los madrile?os -por 24 euros al a?o- estacionar el veh¨ªculo en las zonas pintadas de verde de sus barrios. A su lado, otro individuo protesta porque dice que ha gastado casi 10 euros en tiques de aparcamiento: "He tenido que bajar varias veces a poner un nuevo papelito en mi coche. Estoy cansado de esperar", se lamenta.

En Madrid s¨®lo hay una oficina para que los conductores soliciten la tarjeta del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER). Est¨¢ en el n¨²mero 20 de la calle de Alberto Aguilera (Centro) y cada d¨ªa varios centenares de personas hacen cola.

La fila tiene su origen en un letrero que hay en la tercera planta del edificio, donde se realizan los tr¨¢mites: "El horario de gesti¨®n administrativa s¨®lo permite atender en la tercera planta a un m¨¢ximo de 350 solicitudes (turnos) al d¨ªa", reza el cartel. Justo debajo del mismo hay una m¨¢quina expendedora de n¨²meros.

Hace menos de dos semanas los funcionarios s¨®lo atend¨ªan a 250 madrile?os diarios. Pero el Ayuntamiento ha reforzado el servicio ante las protestas de los vecinos. De momento, ha incrementado la plantilla con nueve funcionarios, que se suman a la treintena de personas que antes atend¨ªan las ventanillas. Fuentes municipales reconocen la saturaci¨®n. "Si es necesario lo ampliaremos m¨¢s", dice un portavoz.

Algunos de los que acuden a Alberto Aguilera lo hacen porque se les ha pasado el plazo para renovar la tarjeta a trav¨¦s del correo, la f¨®rmula m¨¢s c¨®moda. Pero otros muchos aguardan para obtener una tarjeta nueva, porque han comprado un nuevo veh¨ªculo, han cambiado de domicilio o tienen que actualizar sus datos.

Despu¨¦s de esperar la larga cola, el que por fin logra entrar en la oficina a tiempo recibe de los funcionarios los impresos para solicitar la tarjeta del SER. "Luego tienes que subir a la primera planta para coger el n¨²mero. ?Y s¨®lo hay 350 para todo el mundo!", se queja Mar¨ªa del Carmen Gonz¨¢lez.

Las 15 sillas dispuestas para el largo rato de espera est¨¢n ocupadas por madrile?os que sostienen el boleto en una mano y la carpeta con la documentaci¨®n -empadronamiento, permiso de circulaci¨®n y carn¨¦ de conducir- en la otra. Muchos est¨¢n sentados en los pelda?os de la escalera, aguardando su turno. Una pareja que espera junto a Gonz¨¢lez cuenta que el d¨ªa anterior llegaron a las 9.30 sin saber nada. "Cogimos los impresos y cuando nos enteramos de que hab¨ªa que subir a por un n¨²mero ya no quedaban".

Francisco asegura que ha llegado a las 10.10 de la ma?ana y ha conseguido el n¨²mero 278; un cuarto de hora m¨¢s tarde ya no quedaba ninguno. "Hasta el mediod¨ªa s¨®lo hay tres o cuatro ventanillas abiertas. Luego abren el resto y liquidan el trabajo en una hora", protesta airado Francisco. Las dependencias municipales cuentan con 15 ventanillas para atender al p¨²blico. En cada una de ellas hay dos funcionarios. Ayer a las 13.05 s¨®lo permanec¨ªan abiertas ocho.

"Una vez que te atienden, tienes que salir al banco a pagar", se?ala Gonz¨¢lez. "Cuando volvemos, las dependencias ya est¨¢n cerradas y ya no nos atienden", protesta. "Cuatro horas aqu¨ª... para volver ma?ana". Los m¨¢s avispados aprovechan para entrar por la puerta de salida, en la calle de Vallehermoso, e intentar convencer a alg¨²n funcionario de que le haga alg¨²n tr¨¢mite.