M¨¢s del 80% de los 2.000 millones de ni?os del mundo sufre castigos f¨ªsicos

Para la mayor¨ªa de los reci¨¦n nacidos, el azote con el que la comadrona les obliga a respirar por primera vez es s¨®lo el primero de una serie que recibir¨¢ a lo largo de su vida. Con m¨¢s o menos fuerza, habitual o espor¨¢dicamente, m¨¢s de un 80% de los 2.000 millones de menores de 18 a?os que viven en el planeta es castigado f¨ªsicamente. Un tercio de ellos, de manera muy grave con "la ayuda de utensilios". La ONU recoge estos datos en un informe que presentaron ayer el secretario general, Kofi Annan, y el autor del trabajo, el brasile?o Paulo S¨¦rgio Pinheiro.

En unas 53.000 situaciones anualmente, la agresi¨®n acaba con la muerte del menor. En este c¨¢lculo no entran las v¨ªctimas de guerras o cat¨¢strofes naturales. Otras veces el ataque consiste en violaciones u otras formas de abusos sexuales: son v¨ªctimas de estas pr¨¢cticas casi 225 millones de menores de edad (uno de cada 10). De ellos, 150 millones son chicas, y el resto, chicos.

El informe -apenas 37 demoledores folios- ha sido elaborado mediante cuestionarios enviados a todos los pa¨ªses de la ONU (de los que han contestado 130), a las agencias de cooperaci¨®n internacional, Unicef, Organizaci¨®n Mundial de la Salud, Organizaci¨®n Internacional del Trabajo y otras y visitas a varios pa¨ªses durante 2004, entre los que no estaba Espa?a. El resultado es un "desasosegante" panorama que muestra que para muchos peque?os no hay lugar seguro: ni la familia, ni la escuela, ni las instituciones alternativas para su cuidado [orfanatos o albergues], ni las comisar¨ªas, ni los lugares de trabajo ni sus comunidades, subraya Annan en el pr¨®logo del trabajo. Tampoco la riqueza es un seguro.

Aparte de los castigos f¨ªsicos y los abusos sexuales, el estudio recoge otras formas de malos tratos. Alguno es para toda la vida: es el caso de las alrededor de 140 millones de ni?as que han sufrido mutilaci¨®n genital. La pr¨¢ctica no s¨®lo no se frena, sino que se extiende con las migraciones. Adem¨¢s, la persecuci¨®n legal y la conciencia cada vez mayor de algunos grupos de mujeres lleva a adelantar la edad a la que las ni?as son mutiladas, advierte la ONU. El trabajo incluye tambi¨¦n como una forma de agresi¨®n los 82 millones de chicas menores de 18 a?os que contraen matrimonio forzado cada a?o.

Los primeros agresores son, seg¨²n el trabajo, los miembros de la familia. Aunque no la sufran en su propia carne, se calcula que entre 133 millones y 275 millones [los datos var¨ªan porque se trabaja con muestreos] son testigos de comportamientos violentos en su casa. Una forma de agresi¨®n psicol¨®gica, dice el estudio.

El segundo entorno de agresi¨®n es la escuela. Dependiendo del lugar donde se hiciera la encuesta, entre un 20% y un 65% de los menores declararon que hab¨ªan sufrido acoso por sus compa?eros o profesores en los ¨²ltimos 30 d¨ªas antes del trabajo. Los ni?os que pertenecen a minor¨ªas ¨¦tnicas o tienen alguna discapacidad son los m¨¢s afectados por este tipo de comportamiento, dice la ONU.

Las casas y los centros educativos son dos de los lugares donde el maltrato f¨ªsico est¨¢ m¨¢s extendido. Pero estos comportamientos tambi¨¦n se dan en establecimientos, como hogares de acogida, cuya finalidad debe ser, precisamente, proteger a los peque?os. En este tipo de residencias viven unos ocho millones de ni?os, la mayor¨ªa porque sus padres no pueden hacerse cargo de ellos o porque existe un antecedente de maltrato (los ni?os en orfanatos son una minor¨ªa ya que muchos pa¨ªses no tienen dinero para financiar estas instituciones y su labor queda asumida por las familias).

La conclusi¨®n es que no hay un lugar seguro. "Al menos 106 pa¨ªses no proh¨ªben el uso del castigo corporal en la escuela, 147 pa¨ªses no lo proh¨ªben en los establecimientos alternativos de acogida y hasta ahora s¨®lo 16 pa¨ªses lo han prohibido en el hogar", indica el trabajo citando datos de la Iniciativa Global para Acabar con Todo Castigo Corporal Hacia Ni?os y Ni?as. En 31 pa¨ªses est¨¢ permitido condenar a un castigo f¨ªsico a un menor (incluida la pena de muerte). Hay un mill¨®n de ni?os en c¨¢rceles para adultos.

El trabajo no s¨®lo no les libera, sino que es una fuente a?adida de dolor. Unos 218 millones de ni?os trabajaban en 2004 en el mundo, seg¨²n la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo. De ellos, 126 millones realiza labores consideradas peligrosas. Casi 6 millones trabajan forzados o "en condiciones de servidumbre"; unos 2 millones, en la prostituci¨®n y la pornograf¨ªa, y 1,2 millones son directamente una mercanc¨ªa con la que se trafica. Sin embargo, estos datos son casi los ¨²nicos en que hay una mejor¨ªa frente a 2002. Trabaja un 11% menos.