Todos somos pulpos

Joan Saura es el ¨²nico protagonista de los carteles de su coalici¨®n, pero en el anuncio televisivo s¨®lo sale al final. La izquierda inteligente ha optado por un mensaje unplugged, ac¨²stico, en el que una sucesi¨®n de rostros an¨®nimos aboga por un mundo m¨¢s justo, sostenible, solidario, moderno y progresista, envueltos en una est¨¦tica de publicidad de telefon¨ªa m¨®vil o de bonos del Tesoro. Luego, despu¨¦s de estos buenos prop¨®sitos, aparece el candidato y, con esa serenidad madura y risue?a que la teor¨ªa evolucionista le ha dado, afirma que su grupo aspira a modernizar el pa¨ªs de forma inteligente. Qu¨¦ guay. Saura ha sido, sin duda, el miembro m¨¢s tranquilo del tripartito y no se le conocen ni viajes intempestivos a Perpi?¨¢n, ni simb¨®licas estupideces en Jerusal¨¦n, as¨ª que en pr¨®ximos DVD sensacionalistas de Mad¨ª Productions s¨®lo se le podr¨¢ aplicar la demag¨®gica denominaci¨®n de "c¨®mplice".

Uno de los lemas de la coalici¨®n ICV-EUiA (?para cuando un congreso de simplificaci¨®n de siglas?) es "Tots som Catalunya", una f¨®rmula excesivamente sobada en las ¨²ltimas d¨¦cadas, en las que todos hemos sido indistintamente Miguel ?ngel Blanco, Pepe Rubianes o Salman Rushdie (sin contar las veces que, tarareando la canci¨®n de La Trinca, todos fuimos pulpos). Paralelamente a esta estrategia global, seguimos descubriendo algunos detalles de la vida privada de los candidatos. La esposa de Saura, Imma Mayol, ha dicho que el candidato se ocupa de limpiar los excrementos del gato, un dato que sus electores no saben si considerar dom¨¦stico o ecosocialista (la evoluci¨®n de la informaci¨®n electoral permite intuir que, en el futuro, entrevistar¨¢n al gato de Saura). Entre sus promesas destaca la que dice: "Garantim un Govern estable, perqu¨¨ treballem amb rigor i serietat, sense fer soroll". Es un cambio realmente revolucionario, ya que si de algo pueden presumir los ¨²ltimos tres a?os es de inestabilidad, de un rigor y una seriedad m¨¢s que opinables y de ruido a granel.