"Sufrimos un atraco que se llevar¨¢ nuestra riqueza a bancos, promotores y corruptos"

Manuel Villoria (Madrid, 1957), catedr¨¢tico de Ciencia Pol¨ªtica de la Universidad Rey Juan Carlos, coordina la secci¨®n espa?ola del estudio sobre corrupci¨®n que cada a?o hace la ONG Transparencia Internacional. Villoria asegura que la corrupci¨®n es una consecuencia del sistema de urbanismo, en el que "una decisi¨®n administrativa genera millonarios beneficios privados".

Pregunta. Prolifera la corrupci¨®n urban¨ªstica.

Respuesta. S¨ª. Es una tragedia pero es bueno que se haga p¨²blico. No es un problema de Marbella, que no es un caso aislado, sino de todo el sistema.

P. ?Por qu¨¦?

R. Porque Espa?a es el ¨²nico pa¨ªs en el que la decisi¨®n administrativa de recalificar un suelo genera plusval¨ªas millonarias que van al due?o del suelo. Y es el ¨²nico pa¨ªs en que la urbanizaci¨®n la hacen promotores privados. En otros pa¨ªses se expropia un terreno r¨²stico por lo que vale y la Administraci¨®n encarga la urbanizaci¨®n.

"Una decisi¨®n p¨²blica, una recalificaci¨®n, no deber¨ªa generar enormes beneficios privados"

P. ?Cree que habr¨ªa que expropiar un terreno por poco dinero y encargar a la constructora que levante los pisos?

R. Exactamente. La clave del sistema espa?ol y lo que ha propiciado esta situaci¨®n es que los propietarios del terreno reciben la plusval¨ªa de una decisi¨®n administrativa, cuando los beneficios deber¨ªan ser compartidos. Una decisi¨®n p¨²blica no puede generar enormes beneficios privados.

P. ?Por qu¨¦ no se hace?

R. Por que el sistema est¨¢ mal dise?ado desde el principio. Las plusval¨ªas son del due?o del suelo porque en el siglo XIX el Gobierno pact¨® con los terratenientes que ellos ganar¨ªan dinero. Ahora, como una decisi¨®n administrativa genera millones de beneficios aparece la corrupci¨®n.

P. ?Qu¨¦ opina de los convenios urban¨ªsticos, en los que un ayuntamiento recalifica un suelo a cambio de dinero?

R. Son un nido de corrupci¨®n. No es s¨®lo que alteren un plan de ordenaci¨®n urbana dise?ado para toda la ciudad. Es que s¨®lo con decidir que la cantidad que cobra el ayuntamiento se recibir¨¢ un a?o m¨¢s tarde supone millones de euros. Son consecuencia de la nefasta jurisprudencia del Tribunal Supremo, que acept¨® los convenios en los 60.

P. ?Est¨¢ tan extendida la corrupci¨®n?

R. Ya hay redes estables de corrupci¨®n que saltan de un lugar a otro, con informadores, y gente que se mueve hasta que contactan con un concejal o alguien que conoce el sitio. Juan Antonio Roca [presunto cerebro de la trama de Marbella] ven¨ªa de Murcia y all¨ª sus socios controlan el suelo. La corrupci¨®n es sist¨¦mica.

P. ?Y la Justicia?

R. El sistema judicial no sirve contra la corrupci¨®n. Oigo a pol¨ªticos decir que se tiene que aplicar la ley. Si ya se aplica, pero con 15 a?os de retraso, como en Marbella. Convendr¨ªa modificar la Ley de Enjuiciamiento Criminal y el C¨®digo Penal para estos delitos. Aplicar la ley no es eficaz y hay que tomar medidas radicales.

P. ?Por ejemplo?

R. Los concejales entregan su declaraci¨®n de bienes e intereses al secretario municipal, un funcionario que no va a investigar y que lo guarda en una caja. As¨ª los ciudadanos no saben cu¨¢les son sus bienes y sus intereses. Pero tampoco Hacienda. Si Hacienda mirase los bienes de esos alcaldes y concejales saldr¨ªan 5.000 o 6.000 casos a investigar.

P. ?Y los bancos que financian las obras, los notarios que dan fe en las compraventas, el Gobierno, que construye las infraestructuras donde las necesitan los promotores?

R. Todo el sistema contribuye. Los espa?oles hemos sufrido un atraco brutal durante 15 a?os que se llevar¨¢ un tercio de nuestra riqueza durante los pr¨®ximos 15 hacia los bancos, los due?os del suelo, los especuladores, los promotores y los corruptos. Sin contar con el coste ambiental, de p¨¦rdida de calidad de vida, la p¨¦rdida del paisaje...

P. Dice que las recalificaciones masivas y la urbanizaci¨®n a destajo son malas, pero si un alcalde de la costa hiciera lo contrario, perder¨ªa las elecciones.

R. Es cierto. En Valencia, donde el naranjo ya no es rentable, hay una presi¨®n enorme por urbanizar. Los agricultores quieren que les recalifiquen. Eso supone enriquecimiento a corto plazo y empobrecimiento en unos a?os.

P. En su informe dice que hay partidos pol¨ªticos que son una pantalla de los promotores.

R. El ejemplo m¨¢s claro es el GIL pero hay m¨¢s. No es f¨¢cil demostrar la relaci¨®n, pero basta ver los partidos independientes que han proliferado en la costa y en zonas con presi¨®n urban¨ªstica y cuyo fin es gestionar el urbanismo.

P. Los casos de corrupci¨®n salen ahora, pero en la calle era evidente.

R. La gente sab¨ªa que su alcalde o ex alcalde hab¨ªa aumentado su patrimonio o que negociaba con un promotor Sin embargo creo que los pol¨ªticos de alto nivel no eran tan conscientes. El otro d¨ªa estuve con Jordi Sevilla y creo que desconoc¨ªa el nivel de corrupci¨®n que est¨¢ aflorando. Y eso que es ministro de Administraciones P¨²blicas y de Castell¨®n.