M¨¢s de 600 centros disponen de teconolog¨ªas para que los padres controlen el rendimiento de sus hijos

Hacer novillos ser¨¢ cada vez m¨¢s dif¨ªcil en las escuelas andaluzas. En una era en la que todo se controla de manera sistem¨¢tica, la educaci¨®n no quedar¨¢ fuera de esta filosof¨ªa de la vigilancia. La Junta de Andaluc¨ªa, dentro de su apuesta por los centros Tecnol¨®gicos de Informaci¨®n y Comunicaci¨®n (TIC), ha incorporado en 600 de ellos un sistema para permitir ver a los padres de los alumnos c¨®mo se desarrolla el curso de sus hijos. "La idea es conectar a la familia con el centro educativo", explica Carmen Rodr¨ªguez, directora general de Innovaci¨®n Educativa de la Consejer¨ªa de Educaci¨®n.

A trav¨¦s de este sistema, llamado Pasen, los familiares pueden saber cu¨¢ndo y sobre qu¨¦ materias tienen ex¨¢menes sus hijos, cu¨¢ndo han faltado a clase, qu¨¦ tareas tienen que hacer, as¨ª como pedir una entrevista al profesor o comunicarle futuras ausencias del alumno.

Todo funciona de manera cotidiana a trav¨¦s de un portal web al que, de momento, tienen acceso m¨¢s de 600 centros TIC. Esta p¨¢gina presenta cuatro perfiles de usuarios a trav¨¦s de los cuales se puede acceder a distinto tipo de informaci¨®n. La web est¨¢ preparada para informar y atender a padres, profesores, coordinadores de AMPA (Asociaci¨®n de Madres y Padres de Alumnos) y estudiantes.

Los profesores pueden ver si un padre les ha comunicado una futura ausencia de su hijo o apuntar en el apartado de tareas aquello que deben hacer sus alumnos. ?stos, al mismo tiempo, pueden ver qu¨¦ ejercicios deben llevar hechos o cu¨¢ndo tendr¨¢n los ex¨¢menes; los padres y las asociaciones pueden anunciar sus citas en ella o ver c¨®mo van sus hijos en clase.

Hasta ahora, el sistema tradicional para informar a las familias sobre el curso de sus hijos se ha basado en las citas que se establecen a trav¨¦s de llamadas telef¨®nicas. Pero en los ¨²ltimos cursos se han desarrollado m¨¦todos m¨¢s sofisticados y ¨¢giles. De hecho, la iniciativa de la Consejer¨ªa de Educaci¨®n, aunque pionera en Espa?a, responde a una demanda a la que la sociedad ya se ha adelantado.

Iniciativas particulares

Muchos centros educativos, de manera independiente, han empezado a dar pasos para agilizar este sistema a trav¨¦s del uso de las nuevas tecnolog¨ªas. As¨ª, seg¨²n informa la Consejer¨ªa, en algunas escuelas los profesores avisan a los padres sobre futuras citas o acerca de las faltas de sus hijos utilizando mensajes de m¨®vil o correos electr¨®nicos.

"Tenemos previsto usar programas basados en la telefon¨ªa m¨®vil para alertar a las familias sobre estos asuntos, pero queremos hacerlo a trav¨¦s de un sistema inform¨¢tico conectado al programa Pasen que trabaje de manera autom¨¢tica si se producen faltas o incidencias. Sin embargo, para ello todav¨ªa tenemos que llegar a acuerdos con alguna compa?¨ªa de telefon¨ªa", explica la directora general de Innovaci¨®n Educativa, Carmen Rodr¨ªguez.

La directora general asegura que la intenci¨®n de la Consejer¨ªa es gestionar y compartir la informaci¨®n entre las distintas plataformas, como Pasen, S¨¦neca y Helvia. El objetivo es compartir datos y ampliar la cantidad de servicios orientados a facilitar la comunicaci¨®n entre los distintos colectivos de la comunidad educativa.

Pero esta pol¨ªtica comunicativa no s¨®lo afectar¨¢ a la capacidad de los familiares para acercarse a la comunidad educativa y al desarrollo de sus hijos en el aula, sino tambi¨¦n al sistema educativo, en general. La Direcci¨®n General incentiva el uso de las tecnolog¨ªas en las clases.

"Los estudios que se han realizado fuera de Espa?a, como por ejemplo, en Inglaterra, indican que los m¨®viles pueden servir como instrumentos educativos, en lugar de constituir un peligro. No creo que haya que prohibirlos", afirma Rodr¨ªguez, quien recuerda que hace unos a?os los profesores no permit¨ªan a los alumnos utilizar PDA o calculadoras. "Son nuevos tiempos y hay que adaptarse, pero es algo que cuesta", a?ade Rodr¨ªguez. "No hay que tener tanto miedo y vetar estos aparatos como si fueran algo malo. Los tel¨¦fonos pueden servir para que los padres est¨¦n siempre conectados con sus hijos y ayudan a los alumnos a desenvolverse en esta sociedad de la comunicaci¨®n", afirma.

Rodr¨ªguez considera que tanto los juegos de ordenador como otros recursos de las nuevas tecnolog¨ªas pueden tener "valores educativos". "No estoy en contra de que se introduzcan en las aulas", afirma la directora general, quien recuerda que en algunos casos los juegos inform¨¢ticos pueden ser muy positivos. "El programa de idiomas de Muzzy que ofrece EL PA?S es un buen ejemplo de esto", propone.