"Soy de Esperanza"; "soy de Gallard¨®n"

Diez y media de la ma?ana en la parada de Metro de Alameda de Osuna. En el exterior se agolpa un centenar de personas. La nueva parada es lo de menos. Lo que importa es ver a Esperanza Aguirre, Espe, que parece que all¨ª juega en casa. Cualquiera dir¨ªa que Alberto Ruiz-Gallard¨®n tiene menos seguidores por la zona.

"Esperanza es la mejor, ha tenido que venir ella para que el metro llegara hasta aqu¨ª. Treinta a?os llev¨¢bamos esperando", dijo una vecina llamada Mar¨ªa Jos¨¦. Un grupo de mujeres aseguraba que la vida les cambiar¨¢ radicalmente. "Ahora llegaremos al centro en 25 minutos, antes tard¨¢bamos eso en llegar a la avenida de Am¨¦rica", a?adi¨® Isabel.

"Yo ahora saldr¨¦ m¨¢s e ir¨¦ de fiesta, antes estaba en casa aburrida y deprimida", dijo riendo Rosario. "S¨ª, claro, ahora esto es Beirut", murmuraba una voz masculina por detr¨¢s.

?Y de la pol¨¦mica entre el alcalde y la presidenta regional? "Nada, nada, son amigos y ya est¨¢", coincid¨ªa la mayor¨ªa. "Es injusto que le pongan tantas zancadillas a Ruiz-Gallard¨®n. Es el ¨²nico progre del partido", mantuvo Petri Hernando.

Lleg¨® Esperanza Aguirre. El acabose. Saludo, o suced¨¢neo, a Ruiz-Gallard¨®n, y empiezan los gritos: "?Esperanza, a la derecha, a la derecha...!" y "?Bravo, bravo!". Como lo de la derecha se le presupone, fue el apellido del concejal de Hacienda [Juan Bravo] el que le llam¨® la atenci¨®n. Aunque no parec¨ªa ir por ah¨ª la cosa.

Aguirre se acerc¨® a sus seguidoras y se fundi¨® en un abrazo. "Pres¨¦ntate a las regionales, a las generales... a todo. Pres¨¦ntate a todo", le dec¨ªan. Ella se re¨ªa. "?Hab¨¦is sufrido mucho?", pregunt¨® segura de la respuesta. Los besos y abrazos aumentaron.

Lleg¨® el momento de entrar al metro, y Aguirre pidi¨® agua. El ex alcalde Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano era el ¨²nico que sonre¨ªa. Una vez dentro del vag¨®n, la presidenta se tuvo que agarrar para no perder el equilibrio en el arranque. "?Hace cu¨¢nto que no viaja en metro?", le pregunt¨® un periodista. "Uy, pues hace muy poco, unos d¨ªas", respondi¨® ella.

"?Ya se han amigado?"

A la llegada a la parada de El Capricho, m¨¢s carreras de la prensa y de algunos vecinos entusiastas. Alguno andaba un poco desorientado. Bajo un cielo plomizo, salieron Aguirre y Ruiz-Gallard¨®n al parque del Capricho. "?Pero estos dos ya se han amigado?", pregunt¨® un hombre que paseaba en ch¨¢ndal.

Los amigos se marcharon y comenz¨® en el vest¨ªbulo de la estaci¨®n de Alameda de Osuna la fiesta organizada por la Consejer¨ªa de Transportes para celebrar con los vecinos la llegada del metro. Canap¨¦s, refrescos, serviciales azafatas y hasta un organillero contratado por la Comunidad. "Estamos muy contentos. Ejerzo de cura en la parroquia de Santa Catalina de Alejandr¨ªa y llevo 28 a?os oyendo a los vecinos pedir el metro", contaba el padre Felipe Redondo. Natividad contemplaba las b¨®vedas de la estaci¨®n. "Ay, hijo, yo tengo 69 a?os. Y cre¨ª que ya no lo ve¨ªa".