Rice aboga en Israel por "aliviar las humillaciones cotidianas que sufren los palestinos"
La fugaz visita de la jefa de la diplomacia de EE UU a Jeric¨® y Jerusal¨¦n dej¨® claro ayer el inter¨¦s de Washington por apagar los brotes de violencia entre israel¨ªes y palestinos en Gaza y Cisjordania. "Ha sido una semana de progresos. Ahora hay que consolidar el alto el fuego mediante acciones", afirm¨® Condoleezza Rice tras entrevistarse con el presidente palestino, Mahmud Abbas, en Jeric¨®. "Hay que aliviar las humillaciones cotidianas que sufren los palestinos", a?adi¨® la secretaria de Estado, en alusi¨®n a los m¨¢s de 500 controles militares y cortes de carreteras con bloques de cemento que padecen los 2,5 millones de habitantes en Cisjordania, y al cierre casi permanente de los pasos fronterizos y las aduanas en Gaza.
Poco despu¨¦s, en Jerusal¨¦n, Rice se reuni¨® con el primer ministro israel¨ª, Ehud Olmert, y con su hom¨®loga, Tzipi Livni. La jefa de la diplomacia de EE UU agradeci¨® la "contenci¨®n" de los israel¨ªes y alab¨® el discurso de Olmert en el que el dirigente israel¨ª volvi¨® a hablar, el lunes, de evacuaci¨®n de asentamientos y de negociaciones con los palestinos para formar un Estado viable. "Puede contribuir a la calma y a hacer avanzar el proceso de paz en la regi¨®n", afirm¨® Rice.
No obstante, el jefe del Ejecutivo israel¨ª advirti¨® del riesgo que acecha: el tr¨¢fico de armas a trav¨¦s de la frontera entre Gaza y Egipto. Ambos conversaron tambi¨¦n sobre el plan nuclear iran¨ª, que ha pasado a encabezar -al margen de la guerra civil en Irak- la lista de prioridades para Israel y EE UU. Nunca ha sido el conflicto israelo-palestino uno de los objetivos centrales para la Administraci¨®n de George W. Bush. Sin embargo, no conviene ahora a?adir gasolina al fuego que aqueja a todo Oriente Pr¨®ximo. De ah¨ª los esfuerzos de Rice para que el Gobierno israel¨ª suavice sus represalias ante eventuales ataques desde Gaza.
La calma que viven la franja mediterr¨¢nea y los pueblos y ciudades israel¨ªes adyacentes no es fruto de ning¨²n cambio sustancial en las circunstancias sobre el terreno. Aunque el lanzamiento de cohetes artesanales Kassam ha ca¨ªdo en picado -no llega a media docena los disparados desde el domingo-, el soldado Gilad Shalit contin¨²a cautivo del brazo armado de Ham¨¢s y el contrabando de armas a trav¨¦s de los t¨²neles entre Gaza y Egipto prosigue.
Los mandos militares abogaban por montar una amplia operaci¨®n para impedir dicho trasiego y el rearme de las milicias palestinas. Ahora, esa pretensi¨®n ha pasado a segundo plano, pese a que el estamento castrense y los servicios de seguridad han mostrado su desacuerdo con el alto el fuego labrado por el mandatario palestino y el primer ministro israel¨ª.
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