Azkoitia funde arte y deporte

El escultor oriotarra Jorge Oteiza (1908-2003) traslad¨® su constante b¨²squeda de la expresividad del vac¨ªo al mundo de la pelota, deporte al que era muy aficionado. Para ¨¦l, un front¨®n son "seis espacios diferenciados dentro de una caja", como escribi¨® en el pr¨®logo al libro Pelota, pelotari, front¨®n, de Miguel Pelay Orozco. Esas palabras han revivido a?os despu¨¦s en Azkoitia, que luce ahora seis frontones de est¨¦tica oteiciana con los que quiere rendir homenaje al artista.

El proyecto empez¨® a gestarse hace m¨¢s de una d¨¦cada. El arquitecto Carlos L¨®pez de Ceballos trabajaba entonces con Oteiza organizando los espacios p¨²blicos donde luego quedaban expuestas las obras del escultor. "Le sol¨ªa preguntar sobre el tema de la pelota y los frontones. Me recomend¨® que leyera el pr¨®logo de Pelota, pelotari, front¨®n. Me qued¨¦ maravillado", recuerda el arquitecto. L¨®pez de Ceballos propuso construir las esculturas-front¨®n al Ayuntamiento de Azkoitia. El pueblo, del que Oteiza es hijo adoptivo, recogi¨® el guante.

Cada cancha representa un territorio de Euskal Herria y una modalidad del juego

El arquitecto busc¨® entonces la ayuda del escultor Anton Mendizabal y juntos se pusieron a trabajar con un objetivo claro que respond¨ªa al esp¨ªritu del artista oriotarra: las canchas deb¨ªan ser utilizables.

El resultado son los Frontones Jorge Oteiza, seis canchas de hormig¨®n "redimensionadas" -no alcanzan las medidas profesionales reglamentarias- reci¨¦n inauguradas y pensadas para que jueguen, sobre todo, los ni?os y se familiaricen con la pelota, explica el alcalde de Azkoitia, el peneuvista Asier Aranbarri. Quienes se adentren en los blancos espacios podr¨¢n "experimentar el juego en su verdadera dimensi¨®n", resalta L¨®pez de Ceballos.

Cada cancha representa "un territorio de Euskal Herria" y una modalidad de juego. El front¨®n de Guip¨²zcoa emula as¨ª el arkupe de los bajos de ayuntamientos o iglesias; el de Vizcaya est¨¢ dise?ado para jugar con cesta; el alav¨¦s simboliza el front¨®n que se creaba en los contrafuertes de las iglesias; el de Navarra se reserva para pala corta; el de Zuberoa es una instalaci¨®n de rebote de una sola pared y el de Lapurdi, un trinquete.

El conjunto ha costado 3,4 millones de euros, financiados por la Diputaci¨®n de Guip¨²zcoa, la Kutxa y el Ayuntamiento de Azkoitia. Y es s¨®lo la primera fase de un proyecto mayor que incluye construir un front¨®n de rebote de medidas reglamentarias y una Casa Vasca de la Pelota. Este ¨²ltimo edificio albergar¨¢ "una especie de museo" de este deporte, un trinquete con paredes de cristal y un centro de alto rendimiento para pelotaris. Esta segunda y tercera fase requerir¨¢n un desembolso de 6,5 millones y podr¨ªan estar acabadas para 2010.