Los errores de Washington

Washington puede ser etiquetado por haber jugado un papel decisivo en el golpe de Estado que despoj¨® de La Moneda a Salvador Allende en 1973. Ya en 1970, el presidente Richard Nixon foment¨® un golpe para prevenir que Allende llegara a la presidencia. Pero fracas¨®, aunque los conspiradores mataron al jefe del Ej¨¦rcito. Cuando el Gobierno de Unidad Popular de Allende fue elegido a principios de los setenta, Henry Kissinger, entonces asesor de seguridad de Nixon, hizo el siguiente comentario: "No s¨¦ por qu¨¦ tenemos que quedarnos con los brazos cruzados mientras un pa¨ªs se vuelve comunista debido a la irresponsabilidad de su propio pueblo". En los tres a?os siguientes, la Administraci¨®n de Nixon encubri¨® distintas acciones encaminadas a inyectar dinero en peri¨®dicos, partidos pol¨ªticos o grupos privados cuya definici¨®n fuera "anti Allende". El espionaje estadounidense fue advertido con tiempo del golpe que se avecinaba.

Los horrores del r¨¦gimen de Pinochet, recogidos en la pel¨ªcula Desaparecido, que afectaban directamente a un ciudadano de EE UU, el r¨¦cord de anteriores operaciones contra el Gobierno socialista chileno y la "felicidad de Nixon" con la desaparici¨®n de Allende no hicieron en los a?os setenta m¨¢s que fomentar la idea de que Washington hab¨ªa hecho con Chile lo que ya hab¨ªa experimentado con Mohamed Mossadeg en Ir¨¢n (1953) o Jacobo Arbenz en Guatemala (1954). Aun as¨ª, tales evidencias no han salido a la luz, a pesar de los 17.000 documentos desclasificados bajo la Administraci¨®n de Clinton. En ellos, tanto Nixon como Henry Kissinger exponen que EE UU no tuvo nada que ver con el golpe de 1973 en Chile.

El asesinato m¨¢s famoso ocurri¨® en Washington. Orlando Letelier, ex ministro de Exteriores de Allende, se hab¨ªa convertido en la figura m¨¢s destacada entre los que trataban de influir a EE UU para que ¨¦ste, bas¨¢ndose en los derechos humanos, rompiera sus relaciones con la dictadura. Letelier mor¨ªa al explotar una bomba bajo su coche en la avenida Massachusetts.

Las relaciones entre Washington y Santiago son mod¨¦licas. Al menos as¨ª se desprende del primer acuerdo comercial amplio entre EE UU y un pa¨ªs suramericano, Chile, rubricado en 2003. Pero cuando en octubre de 1998 Pinochet era detenido en Londres, Washington tuvo que manifestarse. La entonces secretaria de Estado Madeleine Albright reconoci¨® que su pa¨ªs hab¨ªa cometido "terribles errores" en Am¨¦rica Latina durante la guerra fr¨ªa.