El presidente iraqu¨ª rechaza el informe de la comisi¨®n Baker

El presidente de Irak, Yalal Talabani, rechaz¨® ayer el informe Baker, que calific¨® de "insulto a los iraqu¨ªes" y "atentado contra su soberan¨ªa". No es la ¨²nica cr¨ªtica. El l¨ªder radical chi¨ª M¨²qtada el S¨¢der ha descalificado ese texto, elaborado por una comisi¨®n bipartidista de EE UU. Incluso los sun¨ªes, que comparten el diagn¨®stico, discrepan de los remedios propuestos. S¨®lo la recomendaci¨®n de dialogar con Ir¨¢n y Siria merece aprobaci¨®n general.

La divisi¨®n de opiniones sobre el informe, dirigido por el ex secretario de Estado republicano James Baker y el ex congresista dem¨®crata Lee Hamilton, pone de relieve, una vez m¨¢s, la profunda fractura de la sociedad iraqu¨ª.

El informe Hamilton-Baker es injusto. Contiene art¨ªculos peligrosos que atentan contra la soberan¨ªa de Irak y su Constituci¨®n. Lo rechazo en su conjunto", declar¨® ayer el kurdo Talabani. En realidad sus objeciones, como las vertidas el pasado viernes por el otro l¨ªder hist¨®rico kurdo, Masud Barzani, se centran en tres puntos: la inclusi¨®n de antiguos baazistas, las condiciones para la transferencia de responsabilidades en materia de seguridad y el reparto de los beneficios del petr¨®leo.

Los kurdos, que constituyen una quinta parte de la poblaci¨®n, se oponen a cualquier decisi¨®n que merme la semiindependencia de la que disfrutan desde 1991. Barzani, presidente la regi¨®n aut¨®noma de Kurdist¨¢n y aliado de Estados Unidos, tach¨® el informe de "irreal e inapropiado". Como a Talabani, le preocupa la sugerencia de retrasar la puesta en pr¨¢ctica del art¨ªculo 140 de la Constituci¨®n, que prev¨¦ un controvertido refer¨¦ndum sobre el futuro de la regi¨®n petrolera de Kirkuk, reivindicada por los kurdos, pero habitada tambi¨¦n por ¨¢rabes y turcomanos.

Talabani tambi¨¦n se mostr¨® muy sensible con la amenaza de retirada de la ayuda estadounidense en caso de falta de progreso en materia de seguridad. "Eso supone tratar a Irak como a una colonia a la que se pueden imponer condiciones y poner en entredicho que somos un pa¨ªs soberano y respetado", se quej¨®. Por la misma raz¨®n, se mostr¨® contrario a la recomendaci¨®n de aumentar el n¨²mero de consejeros en las unidades militares iraqu¨ªes de los 4.000 actuales hasta 20.000. "Eso es una violaci¨®n de nuestra soberan¨ªa", denunci¨® el presidente. "Los iraqu¨ªes son capaces de gobernar su pa¨ªs... mucha gente pregunta por qu¨¦ no hay seguridad y es porque tenemos nuestras manos atadas. El primer ministro no puede mover a diez soldados de un sitio a otro [sin autorizaci¨®n de EE UU]", a?adi¨®, repitiendo una idea que ya hab¨ªa pronunciado hace dos semanas durante una visita a Teher¨¢n.

El primer ministro, el chi¨ª Nuri al Maliki a¨²n no ha hecho p¨²blica una reacci¨®n oficial, pero otros destacados l¨ªderes pol¨ªticos de su comunidad y socios de Gobierno tambi¨¦n han tomado distancias con el informe. "Incluye informaci¨®n inadecuada que se basa en fuentes fraudulentas", ha declarado Abdulaziz al Hakim, l¨ªder de la Asamblea Suprema para la Revoluci¨®n Isl¨¢mica en Irak (ASRII), el principal grupo en el Parlamento y en buenas relaciones con Ir¨¢n.

Algunos analistas han querido ver la influencia iran¨ª detr¨¢s del rechazo de Talabani, pero la realidad es que el informe Baker ha sido recibido con general satisfacci¨®n en Ir¨¢n y en Siria, tal como subraya el ex embajador paquistan¨ª Tariq Fatemi. "Despu¨¦s de haber sido incluidos en el eje del mal y objeto de los esfuerzos estadounidenses para desestabilizar sus reg¨ªmenes, debe ser un gran alivio ver que el plan Baker amonesta a Bush por haberles dejado de lado", afirma este comentarista.

De hecho, los portavoces iran¨ªes han empezado a suavizar su ret¨®rica. El ministro de Exteriores, Manuchehr Mottaqi, dijo el s¨¢bado durante una conferencia sobre seguridad regional en Manama (Bahrein) que su pa¨ªs "est¨¢ dispuesto a ayudar a estabilizar Irak si Estados Unidos se compromete a retirar sus tropas".