El ejemplo de Hu¨¦rcal-Overa

Medio centenar de mujeres ya han parido sentadas este a?o. Ha sido en un peque?o hospital comarcal, La Inmaculada de Hu¨¦rcal-Overa (Almer¨ªa), que en materia obst¨¦trica y ginecol¨®gica va por delante de los centros de referencia andaluces. Y de fuera de Andaluc¨ªa. De hecho, un 3% de los partos asistidos en este hospital son de mujeres de otras provincias. Programado para atender 900 alumbramientos al a?o, despide 2006 con 1.350 partos, entre los que se incluyen los 50 en la silla obst¨¦trica.

La oferta de los partos en vertical contin¨²a con la l¨ªnea de trabajo que se desarrolla desde hace a?os en La Inmaculada. El hospital es, probablemente, el que m¨¢s se acerca a las recomendaciones de la OMS. Su tasa de ces¨¢reas es la m¨¢s baja de Andaluc¨ªa: 14 por cada 100 alumbramientos. La media andaluza y espa?ola se sit¨²an alrededor del 22% sin contar con los centros privados, donde el porcentaje de ces¨¢reas casi se duplica.

Y hay m¨¢s pr¨¢cticas asistenciales que contrastan con las rutinas habituales de muchos paritorios. No se aplican enemas, por ejemplo. "No los ponemos desde hace 20 a?os", se?ala el jefe de servicio de Obstetricia, Longinos Aceituno. Apenas se recurre a las episiotom¨ªas, otra medida frecuente en los hospitales espa?oles que deber¨ªa limitarse a los casos estrictamente necesarios, seg¨²n la OMS. La tasa de episiotom¨ªas en Hu¨¦rcal-Overa es del 30% frente al 70% que se da en el conjunto espa?ol.

Su actuaci¨®n es puesta como modelo por la asociaci¨®n El Parto es Nuestro, que tambi¨¦n cita el hospital de ?beda (Ja¨¦n) y, "a falta de un hervor", el de Fuenlabrada (Madrid). "No estamos enfermas y el cuerpo, sin intervenci¨®n, es como mejor trabaja", defiende Patricia Sanz, de la asociaci¨®n, que cree que la intervenci¨®n m¨¦dica debe ce?irse a las complicaciones. "Hay que cambiar los protocolos, no se debe intervenir hasta que no hay patolog¨ªa", sostiene.

"Lo principal es incentivar a la mujer para que tome la decisi¨®n una vez que el profesional le ha informado", plantea Aceituno. "Se hacen muchas rutinas que no se consultan con la mujer y no valen para nada como los enemas o el rasurado", censura. Longinos Aceituno es tambi¨¦n elcoordinador auton¨®mico del proceso asistencial del embarazo, parto y puerperio en Andaluc¨ªa. Tras examinar el informe de la Agencia de Evaluaci¨®n de Tecnolog¨ªas Sanitarias, se decidi¨® a ensayar el parto en vertical en su unidad. En sus seis meses de utilizaci¨®n, Aceituno est¨¢ satisfecho. Y, lo que es m¨¢s importante, todas las mujeres que la han utilizado, a pesar de que no han recibido anestesia epidural porque disminuye la fuerza en las extremidades. "La principal idea es incentivar a la mujer a que se movilice y no est¨¦ en la cama siempre que sea posible", expone el ginec¨®logo. La introducci¨®n de nuevas pr¨¢cticas tambi¨¦n obliga al reciclaje de los profesionales. "Suele haber resistencias en los sanitarios a los cambios", admite Aceituno. M¨¢s del 60% de las matronas de La Inmaculada asisten ya los partos en vertical, aunque la pretensi¨®n del jefe de la unidad es que lo asuman todas.