Las afectadas: "Lamentable, me deja de piedra"

"?Tiene usted tatuajes? ?Lleva pendientes? ?Est¨¢ dispuesta a donar la sangre del cord¨®n de su beb¨¦?". Rosa Gil (31 a?os) estaba a punto de dar a luz a su primer hijo en el Hospital de M¨®stoles, cuando le pidieron permiso guardar en un banco p¨²blico el cord¨®n umbilical de su peque?a. "Firm¨¦, claro. Lo haces con la ilusi¨®n de que vas a ayudar a alguien", cuenta dos a?os despu¨¦s. Pero su donaci¨®n acab¨® en la basura por falta de medios. "Me parece muy mal, lamentable", dice Gil al enterarse.

En alg¨²n momento del embarazo, los m¨¦dicos ped¨ªan el permiso. Les explicaban que no hab¨ªa peligro para el beb¨¦ ni para la madre y que las donaciones son an¨®nimas. "Yo lo hice con toda mi buena fe y porque me dijeron que mi hijo tambi¨¦n se beneficiar¨ªa si ten¨ªa problemas y si otras mujeres, como yo, lo guardaban. Me explicaron que esto salvaba vidas y yo lo hice por eso", explica Yolanda Ciencia Pardo, de 39 a?os, que dio a luz en 2005 en el Hospital de M¨®stoles. Ahora no da cr¨¦dito: "Me deja de piedra. No entiendo que luego lo hayan tirado. Para m¨ª no supuso ninguna molestia, pero entonces, ?para qu¨¦ tanto decir que esto era bueno?".

"Encima que lo donas lo tiran. Lo que me parece fatal es que no lo guardasen por falta de personal. Con toda la gente que hay en el paro y que podr¨ªa hacer ese trabajo. Me dijeron que guardar el cord¨®n ten¨ªa mucha utilidad para ni?os con enfermedades de la sangre. Por eso lo hice. Es una pena que haya acabado en la basura", se queja tambi¨¦n Ana Bel¨¦n Arroba, de 30 a?os.

"De piedra" y molestos tambi¨¦n se quedaron otros donantes en la misma situaci¨®n, como Montserrat Socas -"?Para qu¨¦ tanta historia?"-, o David Iglesias y su mujer, Raquel Garc¨ªa. "No, definitivamente eso no est¨¢ bien", concluye Iglesias.