Cinco planes urban¨ªsticos con m¨¢s larga elaboraci¨®n que vigencia

Vigo fue una de las primeras ciudades de Espa?a en contar con un plan general de urbanismo, en 1934, realizado por el prestigioso arquitecto Antonio Palacios. Les falt¨® tiempo para anularlo, en 1936, a las autoridades militares que se hicieron cargo del gobierno de la ciudad. Desde entonces, ning¨²n planeamiento general ha cuajado, convertida la ciudad en una de las m¨¢s dif¨ªciles y conflictivas en ese terreno. Como si fuera una maldici¨®n.

El Ministerio de la Vivienda urgi¨® en 1960 al Ayuntamiento de Vigo a redactar el que ser¨ªa primer plan general de urbanismo de la ciudad, si se hace abstracci¨®n de la prehistoria que representa el plan Palacios. Entonces empezaba a verse un crecimiento acelerado de la ciudad, gracias a la pujanza industrial que sobre todo capitalizaban Citro?n, de un lado, y la construcci¨®n naval en el puerto. Tambi¨¦n la actividad pesquera y sus derivados entraban en una fase boyante, con libertad extractiva en todos los mares. Comenzaba el desarrollismo y los flujos migratorios que este proceso alent¨® desde las zonas rurales del pa¨ªs a las urbanas: hab¨ªa que preparar las ciudades para la acogida.

Fuera por impericia o afanes cremat¨ªsticos, la redacci¨®n de este plan de urbanismo se fue demorando en el tiempo. Hasta que entrara en vigor, se fueron improvisando soluciones que, por una parte, diezmaron el patrimonio arquitect¨®nico de la ciudad, sustitu¨ªdo por los edificios de nuevo cu?o que ped¨ªa la modernidad, y por otra, atendiendo a sucesivas demandas de particulares, acumularon incoherencias en los planos y en las actuaciones que resolvieron impracticable la norma general que el plan trataba de ser. As¨ª se lo hizo saber el Ministerio de la Vivienda al Ayuntamiento cuando recibi¨® en 1970 el documento que hab¨ªa encargado diez a?os antes con urgencia.

Largas secuelas

La desfeita de este "plan desarrollista" ha sido intensamente documentada por autores como Xos¨¦ M. Souto Gonz¨¢lez en Vigo, Cen anos de historia urbana (1880-1980) o J. L. Pereiro Alonso, en Desarrollo y deterioro urbano de la ciudad de Vigo. Podr¨ªa decirse que, si no todos, s¨ª los principales males que aquejan al urbanismo vigu¨¦s tienen su origen en esa ¨¦poca, de cuyos desafueros la ciudad a¨²n no se ha recuperado, precisamente por la contundencia del desastre infligido entonces.

A la orograf¨ªa dif¨ªcil del territorio se le a?adieron, por falta de comunicaci¨®n y coordinaci¨®n, infraestructuras estranguladoras del desarrollo de la ciudad, como el trazado ferroviario, primero, y el de la autopista despu¨¦s, y actuaciones extraordinariamente agresivas y especuladoras que resultaban de la cesi¨®n municipal de las labores y control de las sucesivas urbanizaciones a promotores con otros intereses que el desarrollo urban¨ªstico arm¨®nico, funcional y previsor.

Tres nuevos intentos

Con la implantaci¨®n de la democracia se crey¨® llegado el momento de corregir los graves errores cometidos en la etapa franquista. La redacci¨®n de un nuevo Plan General empez¨® bien, en 1980, siendo alcalde de Vigo Manuel Soto, pero fue un parto casi tan largo como el anterior, ya que no fue aprobado hasta 1988 por la Xunta tripartita que presidi¨® Fernando Gonz¨¢lez Laxe.

Apenas dio tiempo a comprobar sus efectos porque en 1990, con la llegada de Manuel Fraga a la Xunta, se puso a revisi¨®n y modificaci¨®n, hasta que la COTOP de Xos¨¦ Cui?a lo anul¨® definitivamente.

Para cubrir el vac¨ªo normativo fue aprobado casi por v¨ªa de urgencia, en 1993, el plan actualmente en vigor, con Carlos Pr¨ªncipe de alcalde. Pronto empez¨® a dar problemas de inseguridad jur¨ªdica, tan ostensibles como los edificios que se construyeron a su amparo (Torres Ifer, Piricoto, Apartahoteles de Samil...) y que ahora, con el nuevo plan que los iba a legalizar en el alero, est¨¢n pendientes de demolici¨®n, en ejecuci¨®n de diversas sentencias judiciales que ya no admiten recurso. Por el camino, el mismo Xos¨¦ Cui?a impidi¨® desde la COTOP un nuevo plan que sustituyera al problem¨¢tico de 1993. Fue el de 1998, promovido durante la alcald¨ªa del popular Manuel P¨¦rez, que no lleg¨® a nacer.