M¨ªnimo juego, m¨¢xima eficacia
El Barcelona alcanza el liderato despu¨¦s de golear al colista en un encuentro plomizo en el Camp Nou
El Bar?a recuper¨® el liderato el d¨ªa que quiz¨¢s ofreci¨® su peor juego en mucho tiempo, castigado por la grada con intermitentes silbidos. Desdibujado y casi irreconocible, el campe¨®n de invierno tuvo dos virtudes b¨¢sicas en ¨¦poca de vacas flacas: ser una roca en defensa y gozar de una eficacia total ante puerta. Tocado por los dioses, Saviola continu¨® con su estelar racha y sum¨® su s¨¦ptimo gol consecutivo que sirvi¨® para abrir el partido. Pero esta vez ya no fue el ¨²nico goleador. Rijkaard, en una decisi¨®n discutida por el p¨²blico, le retir¨® a la hora de partido por Gudjohnsen y respir¨® tranquilo porque un minuto despu¨¦s, tras una acci¨®n del n¨®rdico, Giuly meti¨® el segundo. Y el peque?o Iniesta, tras una jugada de amor propio de Ronaldinho, anot¨® el tercero. El N¨¤stic, colista, no mereci¨® una goleada as¨ª porque tute¨® al Bar?a. Pero cometi¨® un pecado capital que arrastra como una losa toda la temporada: ser negado de cara al gol.
BARCELONA 3 - N?STIC 0
Barcelona: V¨ªctor Vald¨¦s; Oleguer, Thuram (M¨¢rquez, m.81), Puyol, Zambrotta; Xavi, Edmilson, Deco (Iniesta, m. 57); Giuly, Saviola (Gudjohnsen, m. 64) y Ronaldinho. No utilizados: Jorquera, Belletti, Gio y Motta.
N¨¤stic: Bizzarri; Calvo, Navas, Matell¨¢n, Mingo; Cu¨¦llar (Campano, m. 64), Generelo (Merino, m. 57), Morales, Buades, Juan D¨ªaz (Pinilla, m. 64); y Portillo. No utilizados: ?lvaro, Llera, David Garc¨ªa y Ruben Castro
Goles: 1-0. M.17. Iv¨¢n Diaz rechaza de cabeza, Oleguer remata en semifallo, Saviola controla el bal¨®n con la derecha, de espaldas a la porter¨ªa, se da media vuelta y remata con la zurda. 2-0. M.67. Ronaldinho centra desde la derecha, Gudjohnsen cabecea en el segundo palo, Matell¨¢n rechaza al larguero, Giuly remata en semifallo y la pelota entra en la porter¨ªa despu¨¦s de dar en Navas. 3-0. M. 80. Iniesta aprovecha un rechace de Biurrun despu¨¦s de una jugada de Ronaldinho y Gudjohnsen.
?rbitro: Rubinos P¨¦rez. Mostr¨® la tarjeta amarilla a Mingo, Deco y Portillo.
Camp Nou: 74.343 espectadores.
El resultado maquillar¨¢ el partido, pero el equipo azulgrana atraviesa una profunda crisis
Una parte del p¨²blico pit¨® a Rijkaard por sustituir a Saviola, autor del primer gol
El resultado maquillar¨¢ el partido pero la realidad es que el Bar?a atraviesa una profunda crisis de juego. Le salv¨® la pegada, el aire de Iniesta en la segunda parte y el pundonor final, sobretodo de Ronaldinho, que particip¨® en los dos ¨²ltimos goles e intent¨® un chut desde el medio del campo al ver adelantado a Bizzarri. Pero durante largo rato fue un equipo irreconocible. El N¨¤stic le discuti¨® la pelota que quemaba a pies del Bar?a. No funcion¨® la l¨ªnea de medios porque el centro del campo de Flores se encarg¨® de ahogar a Xavi y Deco, lejos de su mejor forma, y la delantera fue un solar. A Ronaldinho le sobra talento para dar un pase magistral o marcar un gol de falta aunque est¨¦ en horas muy bajas. Pero ahora, lejos de ser el alma del equipo, es una sombra de s¨ª mismo. Giuly corrigi¨® su partido con un gol que eclips¨® su empe?o en driblar hacia el ¨¢rea en lugar de abrir el campo hacia el bander¨ªn de c¨®rner. Entre tanto desaguisado, la zaga, que hab¨ªa encajado cinco tantos en dos d¨ªas, estuvo impecable. Rijkaard la cambi¨® de arriba abajo al sentar a M¨¢rquez y recuperar a Thuram y Zambrotta, una vez superadas sus lesiones. Y Oleguer fue uno de los mejores.
Tan paup¨¦rrimo fue el juego azulgrana que tard¨® 16 minutos en chutar. Curiosamente, el mismo tiempo que invirti¨® Saviola en tocar el primer bal¨®n. En estado de gracia permanente, el pibito parece haberse disfrazado de Rey Midas para jactarse ante todos los que en el club no conf¨ªan en ¨¦l. Llevado en volandas por la grada, dio otra prueba de su extraordinaria confianza: el ga¨²cho centr¨®, Juan D¨ªaz despej¨® de pena, Oleguer chut¨® peor y all¨ª estaba ¨¦l para recoger el rechace, dar media vuelta con rapidez y dejar tieso a Bizarri. No s¨®lo eso. El Bar?a s¨®lo se volvi¨® a crear peligro dos veces m¨¢s y all¨ª estuvo Saviola: fue suyo un cabezazo al palo y una asistencia a Giuly, que reclam¨® penalti por derribo de Mingo.
El gol pudo hundir al N¨¤stic, pero no fue as¨ª. Bien colocado, concentrado, sin nada que perder tras tanta desilusi¨®n, el equipo grana no perdi¨® la compostura y siempre pareci¨® mejor puesto que el Bar?a. Le falt¨®, eso s¨ª, algo end¨¦mico: su relaci¨®n con el gol. No se vio a Portillo y sus ¨²nicas aproximaciones al ¨¢rea fueron un chut lejano de Abel Buades y otro de Mingo. Quiz¨¢ por eso qued¨® a¨²n m¨¢s retratada la raquitez del juego azulgrana. El partido segu¨ªa en la nada hasta el punto que Puyol se aburr¨ªa e intent¨® tirar al equipo hacia delante. Rijkaard ten¨ªa que dar un punto de inflexi¨®n al partido y recurri¨® a Iniesta para dar luz al centro de campo en lugar de un apagado Deco. Y su presencia se not¨®. Fue justo cuando Ronaldinho dio un pase y empez¨® dos jugadas de gol. La primera la intent¨® culminar Oleguer pero Bizarri despej¨® y Giuly envi¨® fuera. Y, la segunda, lleg¨® precedida de una jugada que demostr¨® que Rijkaard, como Cruyff, tambi¨¦n tiene una flor.
El t¨¦cnico retir¨® a Saviola por Gudjohnsen y parte de la grada le replic¨® con silbidos. Pero su rueda de cambios fue impecable. Perdida la titularidad, Gudy imit¨® a Saviola y la primera pelota que toc¨® fue medio gol. Tras recibir de Ronaldinho, chut¨®, la defensa grana despej¨® al travesa?o y el franc¨¦s, esta vez, no fall¨®. El gol mataba dos p¨¢jaros de un tiro: cerraba el partido y confirmaba el liderato del Bar?a. Pero ni as¨ª la grada evit¨® los abucheos. Picado en su orgullo, Ronaldinho barri¨® al final el frontal de ¨¢rea y la pelota qued¨® a pies de Iniesta, que meti¨® el tercero. Y as¨ª recuper¨® el Bar?a el liderato, con esfuerzo, sudor y poca alegr¨ªas y con un N¨¤stic convencido de que no mereci¨® tanto gol.
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