Palate y Estacio, recuerdos de familia

La imagen lo dec¨ªa todo: al lado de una mujer con el rostro y las manos surcados de arrugas, con unas u?as en las que se ve¨ªan los duros a?os de trabajo, un descolorido poncho azul y una pluma sobre un desgastado sombrero negro, estaban algunos -y sobre todo algunas- bien vestidos mandamases de Espa?a y Ecuador: el ministro de Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos; su hom¨®loga ecuatoriana, Mar¨ªa Fernanda Espinosa; la secretaria de Estado para Iberoam¨¦rica, Trinidad Jim¨¦nez; la concejal Ana Botella... La mujer del poncho era Mar¨ªa Bernarda, la madre de Carlos Antonio Palate, uno de los dos ecuatorianos asesinados por ETA en Barajas el pen¨²ltimo d¨ªa de 2006.

"?Ha dormido algo en el avi¨®n?". Botella se interesaba dentro de la Casa de Am¨¦rica por el viaje que acaba de realizar Mar¨ªa Bernarda. Aunque hab¨ªan anunciado su asistencia, el alcalde, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, y la presidenta regional, Esperanza Aguirre, finalmente no aparecieron por el palacio de Linares.

La ceremonia fue r¨¢pida, sencilla y emotiva. Salen los pol¨ªticos y familiares de Estacio y Palate. En el jard¨ªn todos guardan un minuto de silencio en recuerdo de los dos fallecidos, s¨®lo roto por la sirena de una ambulancia. Tras el izado de la bandera ecuatoriana, se declara que, un mes despu¨¦s del atentado, la Casa de Am¨¦rica se convertir¨¢ durante las pr¨®ximas 24 horas en la Casa de Ecuador.

Sobre la fachada del edificio se proyectan el amarillo, azul y rojo de la bandera del pa¨ªs de Diego Armando y Carlos Alonso. Durante el d¨ªa de hoy, la vida diaria de Ecuador, su cine, su literatura y su m¨²sica ser¨¢n los protagonistas de la instituci¨®n en una jornada de puertas abiertas.

Trinidad Jim¨¦nez mostraba su preocupaci¨®n por "do?a Mar¨ªa", la madre de Carlos Alonso, reci¨¦n llegada a Espa?a y que acaba de pasar por una operaci¨®n de cataratas. "Treinta a?os pensando que estaba ciega, y eran unas simples cataratas...", comentaba Jim¨¦nez, que acompa?¨® al cuerpo de Palate en su ¨²ltimo viaje a Ecuador. A la espera de que el Gobierno les conceda las ayudas que le corresponden como v¨ªctimas del terrorismo, su madre y tres hermanos todav¨ªa no saben si se quedar¨¢n en Espa?a.

Ver¨®nica Arequipa, la novia de la otra v¨ªctima de la furia etarra, agradec¨ªa a las autoridades el trato que ella y los familiares de su novio han recibido durante el ¨²ltimo mes. "Los que seguimos aqu¨ª intentamos ser fuertes. A m¨ª no me queda otra opci¨®n. Tengo que continuar...", dec¨ªa con los ojos llenos de l¨¢grimas.