Una explosi¨®n de gas causa dos muertos en Lleida

Dos hombres de 29 y 56 a?os fallecieron ayer en Lleida como consecuencia de una explosi¨®n de gas natural ocurrida en un restaurante del barrio de Cappont. La polic¨ªa y los t¨¦cnicos municipales han abierto una investigaci¨®n para aclarar si el siniestro fue ocasionado por una fuga de gas fortuita o por la manipulaci¨®n de alguna tuber¨ªa. El restaurante llevaba cerrado un a?o y hace unos meses el Ayuntamiento paraliz¨® las obras de reforma que el propietario realizaba sin permiso. El siniestro oblig¨® a desalojar a 56 vecinos del inmueble.

Los fallecidos son Roger Bonastre, de 29 a?os e hijo del propietario del local que sol¨ªa pasar las noches en un altillo situado encima del restaurante, y Tom¨¢s G., un vecino que viv¨ªa en el segundo primera, aunque en el momento de producirse la explosi¨®n no se encontraba en casa porque trabajaba de noche de recepcionista en el hospital de Santa Mar¨ªa. Cuando el hombre regres¨® a su domicilio y vio las consecuencias de la explosi¨®n sufri¨® un infarto de miocardio. Los servicios m¨¦dicos intentaron reanimarle en la misma calle pero falleci¨® en el hospital Arnau de Vilanova.

La explosi¨®n se produjo sobre las 7.20 horas en el restaurante Exquisit, situado en los bajos del n¨²mero 1 de la calle de Manuel de Pedrolo. El estruendo ocasionado por la onda expansiva fue tan grande que muchos vecinos del barrio y todos los del edificio siniestrado se despertaron sobresaltados y salieron corriendo hacia la calle en pijama creyendo que la casa se derrumbaba.

"Lo primero que pensamos fue que se era un atentado", dijeron algunos vecinos. Otros, como Mar¨ªa Vendrell, de 75 a?os, que vive en el tercer piso, llegaron a creer que se trataba de un terremoto: "Est¨¢bamos durmiendo, primero se movi¨® todo el edificio y acto seguido se produjo una gran deflagraci¨®n. Mi marido y yo nos hemos llevado un gran susto. Mi hijo, que vive en el mismo edificio vino a buscarnos y estaba tan nerviosa que no s¨¦ como he llegado a la calle. Esta vez hemos tenido suerte".

Hasta la llegada de los bomberos, en el lugar de los hechos se vivieron momentos de mucho p¨¢nico porque los bajos estaban en llamas y la intensa humareda dificultaba el desalojo de los vecinos, entre los que hab¨ªa muchos ni?os y personas mayores.

El edificio siniestrado, de 13 a?os de antig¨¹edad, consta de planta baja, altillos y cinco plantas. La explosi¨®n y el posterior incendio que se origin¨® destruyeron completamente el restaurante y el altillo en el que fue encontrado el cad¨¢ver de Bonastre. Tambi¨¦n sufrieron destrozos importantes los pisos y locales vecinos, entre ellos una peluquer¨ªa y una academia de m¨²sica. La mayor¨ªa de las viviendas sufrieron desperfectos, como la ca¨ªda de tabiques y rotura de cristales.

Seg¨²n los t¨¦cnicos municipales, el edificio no ha sufrido da?os estructurales, por lo que los 56 vecinos desalojados podr¨¢n regresar a sus casas en un plazo de dos o tres d¨ªas, el tiempo que se tarde en restablecer los servicios como agua, luz, gas y desag¨¹es. Estas personas durmieron anoche en un hotel de la ciudad o en casa de familiares.

El alcalde de Lleida, el socialista ?ngel Ros, explic¨® que a partir de las doce del mediod¨ªa de hoy se volver¨¢ a revisar la situaci¨®n y si no hay nuevos informes que lo desaconsejen la mayor¨ªa de los vecinos del n¨²mero 3 podr¨¢n volver a sus casas.

El concejal de Seguridad Ciudadana, Llu¨ªs Pere Alonso, confirm¨® que la Polic¨ªa Local hab¨ªa recibido ¨²ltimamente muchas quejas y denuncias de los vecinos contra el propietario del restaurante por exceso de ruido durante las noches. La ¨²ltima queja se produjo la madrugada del domingo, 24 horas antes de la explosi¨®n. El edil dijo que local dispon¨ªa de los permisos de actividad en regla, pero que su propietario inici¨® hace unos meses obras menores sin licencia municipal, por lo que el consistorio orden¨® la paralizaci¨®n de los trabajos.