Catalanes somos todos
Las comunidades aut¨®nomas son partes de un todo, del mismo Estado. ?ste es el n¨²cleo esencial de la decisi¨®n que adopt¨® el constituyente de 1978 respecto de la estructura del Estado. El principio de unidad pol¨ªtica del Estado es el presupuesto del reconocimiento del derecho a la autonom¨ªa de las nacionalidades y regiones que lo integran. Pero adem¨¢s de presupuesto, el principio de unidad es tambi¨¦n resultado del ejercicio de dicho derecho. El derecho a la autonom¨ªa se ejerce individualmente por cada nacionalidad o regi¨®n, pero el resultado de dicho ejercicio tiene que ser la reafirmaci¨®n del principio de unidad pol¨ªtica del Estado. En esto consiste la decisi¨®n constitucional pol¨ªticamente conformadora de la estructura del Estado, en la que ha descansado la construcci¨®n del Estado auton¨®mico.
No es indiferente, pues, lo que ocurre con el ejercicio del derecho a la autonom¨ªa en una comunidad aut¨®noma para las dem¨¢s. Cuando se trata de Catalu?a o de Andaluc¨ªa mucho menos. Lo que ocurri¨® en Andaluc¨ªa el 28-F de 1980 no s¨®lo determin¨® la v¨ªa de acceso a la autonom¨ªa por el art¨ªculo 151 de la Constituci¨®n, sino que impuso una revisi¨®n de la interpretaci¨®n de la Constituci¨®n, de la que result¨® el actual Estado auton¨®mico. La decisi¨®n fue formalmente andaluza, pero materialmente fue espa?ola, o al menos, los efectos de la misma fueron espa?oles. Algo parecido puede suceder con el resultado del recurso de inconstitucionalidad interpuesto por el PP contra el Estatuto de Autonom¨ªa para Catalu?a. Lo que ocurra con el Estatuto de Catalu?a en el Tribunal Constitucional no va a afectar exclusivamente al ejercicio del derecho a la autonom¨ªa en aquella comunidad aut¨®noma, sino que nos va a afectar a todos.
El refer¨¦ndum del 28-F provoc¨® una crisis de Estado. La ratificaci¨®n de la iniciativa auton¨®mica por la v¨ªa del art¨ªculo 151 de la Constituci¨®n quebr¨® el dise?o de estructura del Estado que se estaba intentando poner en pr¨¢ctica tras la entrada en vigor de la Constituci¨®n. Una crisis que acab¨® conduciendo a la desaparici¨®n del partido de Gobierno que hab¨ªa pilotado la transici¨®n y el proceso constituyente, UCD. La crisis afortunadamente se resolvi¨® en positivo y condujo, en consecuencia, a un fortalecimiento de nuestro sistema pol¨ªtico y nuestro ordenamiento constitucional.
Me temo que la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto de Autonom¨ªa de Catalu?a, si es estimatoria del recurso interpuesto y conduce a la declaraci¨®n de inconstitucionalidad del mismo, pueda provocar otra crisis de Estado. La desautorizaci¨®n por el Tribunal Constitucional del Parlamento de Catalu?a, de las Cortes Generales y del cuerpo electoral catal¨¢n no puede no provocarla. No se ver¨ªa afectado solamente el ejercicio del derecho a la autonom¨ªa en Catalu?a, sino que se ver¨ªa afectado el equilibrio territorial en el que descansa la estructura del Estado en su conjunto.
He o¨ªdo decir en un corte en la radio a la portavoz de IU que si el Tribunal Constitucional anulaba unas cuantas decenas de art¨ªculos (70 creo que ha dicho) del Estatuto de Catalu?a, el Estatuto de Andaluc¨ªa quedar¨ªa como el Estatuto con mayor techo competencial y se convertir¨ªa de esta manera en el punto de referencia para todas las dem¨¢s comunidades aut¨®nomas. Deber¨ªa rectificar de manera inmediata. IU ha tenido una trayectoria ejemplar y no deber¨ªa enturbiarla al final. Si se hace realidad el pron¨®stico de la portavoz de IU, la crisis en la que entrar¨ªamos ser¨ªa de tal magnitud que nada volver¨ªa a ser igual en lo que a la estructura del Estado se refiere.
Estamos en un momento muy dif¨ªcil y hay que tener cuidado con lo que se dice. Catalanes ahora mismo somos todos. Lo que vaya a ocurrir con el Estatuto catal¨¢n en el Tribunal Constitucional nos puede afectar a los ciudadanos de las dem¨¢s comunidades aut¨®nomas en la misma medida o casi en la misma medida en la que afecte a los ciudadanos de Catalu?a. Una descalificaci¨®n rotunda de la reforma catalana romper¨ªa las reglas de juego para todos.
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