EE UU utiliz¨® las bases de Rota, Mor¨®n y Torrej¨®n para sus vuelos a Guant¨¢namo

Estados Unidos emple¨® las bases espa?olas de utilizaci¨®n conjunta de Rota (C¨¢diz), Mor¨®n de la Frontera (Sevilla) y Torrej¨®n de Ardoz (Madrid) para escalas de sus vuelos a Guant¨¢namo, donde unos 400 sospechosos de terrorismo permanecen retenidos ilegalmente desde 2002. Hasta ahora, s¨®lo se conoc¨ªa un viaje directo entre Espa?a y Guant¨¢namo: el de un avi¨®n civil fletado por la CIA que lleg¨® a Tenerife en diciembre de 2004. Sin embargo, los registros de control de tr¨¢fico a¨¦reo de Portugal, a los que EL PA?S ha tenido acceso, revelan que hubo al menos siete vuelos directos de aviones militares de transporte entre Espa?a y Guant¨¢namo desde enero de 2002 a noviembre de 2005.

Estrasburgo recomienda que se investigue en los Parlamentos nacionales

Lo primero que hizo el ministro de Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos, cuando compareci¨® en el Congreso en noviembre de 2005 para informar sobre el esc¨¢ndalo de los vuelos de la CIA, fue disipar las sospechas sobre las bases de utilizaci¨®n conjunta. "El Gobierno tiene la convicci¨®n, fundamentada en el resultado de la investigaci¨®n, de que todas las escalas realizadas en el marco del Convenio de Cooperaci¨®n para la Defensa entre Espa?a y EE UU se han hecho de acuerdo con la ley", dijo.

La cuesti¨®n no era menor, ya que el uso de las bases para pr¨¢cticas contrarias al derecho internacional y a la propia legislaci¨®n espa?ola, como el traslado de personas detenidas sin autorizaci¨®n judicial, supone una grave quiebra de la confianza entre dos pa¨ªses aliados. Adem¨¢s de una violaci¨®n del convenio bilateral, que proh¨ªbe el tr¨¢nsito de aviones con "pasajeros o carga que pudieran ser controvertidos para Espa?a".

Sin embargo, s¨®lo 16 d¨ªas antes de que Moratinos compareciera ante el Congreso, el 8 de noviembre de 2005, un avi¨®n DC-10, del Mando de Movilidad A¨¦rea de EE UU, despeg¨® de la base de Mor¨®n de la Frontera con destino a Guant¨¢namo.

Lo cierto es que el ministro limit¨® su exposici¨®n a las escalas de aviones, supuestamente vinculados a la CIA, en los aeropuertos de Palma y Tenerife (Reina Sof¨ªa y Los Rodeos). En las semanas siguientes, afloraron escalas similares en Barcelona, M¨¢laga, Sevilla, Valencia, Alicante o Vigo, hasta completar los 68 casos incluidos en el informe de la Comisi¨®n Temporal de Investigaci¨®n del Parlamento Europeo, que ser¨¢ votado por el pleno de la Euroc¨¢mara el mi¨¦rcoles.

Pero ni el texto inicial del llamado informe Fava, ni por supuestos las notas del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) desclasificadas el pasado viernes por el Consejo de Ministros recogen alusi¨®n alguna al uso de las bases. El primero, porque se ha bas¨® en los registros de Eurocontrol, que s¨®lo se refieren a vuelos civiles; y los segundos porque, como Moratinos, se limitan a las escalas en Palma y Canarias.

Sin embargo, los registros de tr¨¢fico a¨¦reo de Portugal, que se refieren a los aviones en tr¨¢nsito por su zona de control, incluyen cuatro vuelos desde bases militares espa?olas a Guant¨¢namo y otros tres a la inversa. El m¨¢s antiguo data de enero de 2002, inmediatamente despu¨¦s de la ca¨ªda del r¨¦gimen talib¨¢n, y el m¨¢s reciente, el ya citado de noviembre de 2005. Tres vuelos afectan a la base de Mor¨®n, otros tres a Rota y s¨®lo uno a la de Torrej¨®n.

En estos siete casos, el indicativo comienza por las letras RCH, que corresponden al Air Mobility Command (AMC), el mando de transporte del Ej¨¦rcito del Aire de EE UU. Los aviones son de transporte de distintos tama?os: un DC-10; dos C-141 Starlifter y cuatro C-17 Globemaster, el segundo avi¨®n de mayor tama?o de la Fuerza A¨¦rea de EE UU.

El registro de vuelo portugu¨¦s tambi¨¦n recoge la escala que un Gulfstream IV, de la compa?¨ªa Richmor Aviation, realiz¨® el 12 de abril de 2004 en el aeropuerto de los Rodeos (Tenerife Sur), procedente de Guant¨¢namo. Esta escala, dado el car¨¢cter civil del avi¨®n, era la ¨²nica que se conoc¨ªa hasta ahora y el ministro Moratinos la consider¨® la m¨¢s preocupante cuando fue al Congreso.

Se sabe que este aparato -el mismo utilizado en el secuestro del im¨¢n de la mezquita de Mil¨¢n por el que la justicia italiana ha pedido la captura de 26 agentes de la CIA- vol¨® a Rumania desde Canarias. En cambio, se ignora de d¨®nde proced¨ªan o a d¨®nde iban los vuelos que enlazaron las bases espa?olas con Guant¨¢namo, ya que los registros portugueses de control s¨®lo incluyen los aeropuertos inmediatamente anteriores y posteriores al tr¨¢nsito por su espacio a¨¦reo.

No puede demostrarse que los aviones que viajaron entre las bases espa?olas y Guant¨¢namo transportaran detenidos ilegalmente. En primer lugar, porque Espa?a nunca los inspecciona ni controla la lista del pasaje ni pregunta qu¨¦ llevan a bordo. Precisamente fue en 2002, tras el 11-S y la guerra de Afganist¨¢n, cuando se flexibilizaron los controles hasta entonces existentes.

La reforma del convenio bilateral, pactada en abril de aquel a?o por el Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar con la Administraci¨®n de Bush, instaur¨® las autorizaciones gen¨¦ricas de car¨¢cter trimestral, en lugar de las individuales caso a caso, y suprimi¨® la necesidad de "notificaci¨®n previa del tipo y la finalidad de la misi¨®n" de las aeronaves en tr¨¢nsito.

No obstante, el sentido com¨²n indica que los centenares de personas que han pasado por el campo de prisioneros de Guant¨¢namo no llegaron all¨ª en barco y la investigaci¨®n del Parlamento Europeo evidencia el uso de aviones de transporte militar. En concreto, el informe Fava recoge el caso de los seis argelinos que fueron detenidos en octubre de 2001 en Bosnia-Herzegovina y entregados ilegalmente al Ej¨¦rcito estadounidense cuando la Corte Suprema de dicho pa¨ªs orden¨® su puesta en libertad.

Seg¨²n la investigaci¨®n, los seis fueron trasladados a la base de Incirlik (Turqu¨ªa) y, junto a 28 prisioneros procedentes de Kandahar (Afganist¨¢n), transportados a Guant¨¢namo el 20 de enero de 2002. Los registros de control a¨¦reo portugueses incluyen un vuelo de un C-141 entre Incirlik y Guant¨¢namo ese mismo d¨ªa. Nueve d¨ªas antes, otro avi¨®n C-141 hizo el mismo trayecto, pero partiendo desde la base de Mor¨®n. Si el primero llevaba prisioneros, nada permite descatar que el segundo tambi¨¦n lo hiciera.

Willy Meyer, eurodiputado de IU y miembro de la comisi¨®n que ha investigado este asunto en la Euroc¨¢mara, considera que los datos del control portugu¨¦s de tr¨¢fico a¨¦reo demuestran que las escalas de vuelos de la CIA en territorio espa?ol est¨¢n lejos de haberse aclarado. "El dictamen que se votar¨¢ el mi¨¦rcoles", recuerda, "recomienda a los Parlamentos nacionales que constituyan comisiones de investigaci¨®n para llegar al fondo del asunto. El Grupo Socialista, que ha apoyado esta investigaci¨®n en Estrasburgo, est¨¢ obligado a apoyarla tambi¨¦n en el Congreso".