La reuni¨®n entre Rice, Olmert y Abbas sobre Oriente Pr¨®ximo acaba en fracaso
La llamada 'cumbre de los desesperados' s¨®lo a?ade m¨¢s presi¨®n al Gobierno de Ham¨¢s
Fracaso sin paliativos. La primera cumbre israelo-palestina que se celebra con presencia de la secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice, no fue siquiera el arranque de un proceso de paz, que se atisba inviable dadas las circunstancias pol¨ªticas: la debilidad del primer ministro israel¨ª, Ehud Olmert, y el rechazo frontal de Ham¨¢s y de su futuro Gobierno a reconocer la legitimidad del Estado sionista. La cita de ayer, la llamada cumbre de los desesperados, fue un episodio m¨¢s del asedio a todo Ejecutivo palestino que incluya a ministros islamistas.
La escenograf¨ªa -abundancia de banderas de EE UU e Israel, y alg¨²n pend¨®n palestino- ya reflejaba que Washington y Tel Aviv jugaban como locales en un c¨®nclave que se sald¨® con nulos resultados: la jefa de la diplomacia norteamericana se limit¨® a leer una breve declaraci¨®n en la que anunci¨® que Olmert y Abbas "se han comprometido a reunirse de nuevo pronto".
Despu¨¦s de un a?o de humillaci¨®n, y s¨®lo tras el triunfo de Ham¨¢s en las elecciones de enero de 2006, Washington y Tel Aviv comenzaron a colmar de alabanzas a Abbas y a facilitar dinero para que la Guardia Presidencial pueda enfrentarse a la milicia de Ham¨¢s. Pero a la hora de la verdad, Olmert no da al enemigo ni agua. Tras la reuni¨®n de ayer, la tesitura en que queda Abbas es un callej¨®n sin salida.
Deber¨¢ explicar a los palestinos que nada ha cosechado, y que s¨®lo si el nuevo Ejecutivo, que previsiblemente encabezar¨¢ el islamista Ismail Haniya, reconoce a Israel y renuncia a la violencia, podr¨¢ aliviarse el bloqueo econ¨®mico a Cisjordania y Gaza. As¨ª lo demandaron Rice y Olmert por en¨¦sima vez. De la pretensi¨®n de Abbas de abordar, aunque fuera superficialmente, asuntos de calado -fronteras del Estado palestino, Jerusal¨¦n Este y los refugiados-, ni menci¨®n. Y en cuanto a las probabilidades de que Abbas persuada a los islamistas para que el futuro Ejecutivo reconozca a Israel son nulas. "No tenemos margen de maniobra", admiti¨® Saeb Erekat, asesor del mandatario ¨¢rabe.
Rice afirm¨® que se debe regresar a la "fase primera de la Hoja de Ruta", un plan obsoleto que establece el desmantelamiento de las milicias palestinas y la prohibici¨®n de ampliar asentamientos. Sobre Ham¨¢s y Abbas, la presi¨®n de Estados Unidos, Israel y la UE es asfixiante. Por el contrario, Olmert no siente que nadie le moleste. Sobre el terreno, Israel sigue a lo suyo ante el silencio de la comunidad internacional.
Raro es el mes en que no se anuncia la ampliaci¨®n de una colonia. Al este y sur de Jerusal¨¦n, en territorio ocupado desde 1967, prosigue la construcci¨®n del muro y de autopistas que no conducen a ninguna parte. Es el m¨¦todo habitual. Primero se asfaltan carreteras y despu¨¦s se alzan asentamientos.
En Erez ya se ha edificado una flamante terminal fronteriza con Gaza, y entre Jerusal¨¦n y Hebr¨®n se construye otra. Aunque Rice, Abbas y Olmert reiteraron su compromiso con la soluci¨®n negociada de un Estado palestino viable, el Gobierno hebreo sigue dibujando con hechos consumados las fronteras de Israel.
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