Dos sindicatos avisaron en 2005 al inspector detenido sobre la corrupci¨®n policial en Ronda
Dos agentes de escala b¨¢sica controlaban la trama delictiva desde hac¨ªa "varios a?os"
Representantes de los sindicatos policiales UFP y SUP advirtieron a mediados de 2005 al responsable de la comisar¨ªa de Ronda (M¨¢laga) detenido el pasado martes junto a otros seis agentes por "delitos comunes en el ¨¢rea de extranjer¨ªa y explotaci¨®n sexual de mujeres" de que se enfrentaba a una plantilla con casos de corrupci¨®n. Seg¨²n fuentes policiales, desde hac¨ªa "varios a?os" dos polic¨ªas de escala b¨¢sica, que se encuentran entre los detenidos, controlaban los bajos fondos de la ciudad en la que "hac¨ªan y deshac¨ªan a su antojo". Los detenidos pasar¨¢n hoy a disposici¨®n judicial.
Los sindicalistas se reunieron con el alto mando policial, Juan Antonio Rodr¨ªguez, de 50 a?os, en mayo de 2005, poco despu¨¦s de que el inspector jefe se incorporara a la comisar¨ªa de Ronda procedente de Sevilla. El oficial tra¨ªa el mandato y la intenci¨®n de "poner un poco de orden" en un distrito en el que se hab¨ªan producido numerosas denuncias internas por irregularidades.
Fuentes cercanas al caso indicaron que justo despu¨¦s de reunirse con los sindicatos, el jefe de la comisar¨ªa apart¨® de las tareas de Polic¨ªa Judicial a los dos agentes de escala b¨¢sica sospechosos de cometer irregularidades y los puso en el control de puerta. Al parecer, el cambio de destino les dur¨® poco. En cuesti¨®n de semanas hab¨ªan regresado a su plaza anterior, una ocupaci¨®n meramente investigadora que desempe?aban vestidos de paisano y les daba un "gran margen de libertad".
Agentes cercanos a la plantilla de Ronda se?alaron ayer que los dos agentes que supuestamente lideraban esta trama de corrupci¨®n y prevaricaci¨®n sol¨ªan estudiar los comportamientos y gustos de los reci¨¦n llegados a la comisar¨ªa y trataban de complacerlos para ganarlos para su causa supuestamente delictiva.
Los arrestados, entre los que se encuentra el subinspector encargado de los asuntos de extranjer¨ªa, son sospechosos de traficar con documentos y pasaportes. Fuentes cercanas al caso, mantienen que tambi¨¦n "hac¨ªan la vista gorda" con el menudeo de drogas en bares de la comarca "a cambio de favores".
Las investigaciones comenzaron tras conocerse que el jefe de la comisar¨ªa manten¨ªa una relaci¨®n con una mujer de origen ¨¢rabe que regentaba un club de alterne de la ciudad y entre las pruebas recabadas por los investigadores se encuentra el testimonio de una inmigrante a la que pidieron dinero por tramitar su residencia. En su particular puesta en escena, los agentes detenidos se repart¨ªan los roles. Seg¨²n fuentes cercanas al caso, uno de los imputados hac¨ªa de "poli malo" para asustar a las inmigrantes que se encontraban en situaci¨®n irregular, mientras que otro adoptaba el rol de "poli bueno", y se ofrec¨ªa a arreglar su situaci¨®n a cambio de dinero.
Sin embargo las tramitaciones que supuestamente realizaron resultaron ser fraudulentas, ya que una de las v¨ªctimas circulaba por el pa¨ªs creyendo que ten¨ªa permiso de residencia y cuando le pidieron la documentaci¨®n que lo acreditara comprob¨® que la hab¨ªan enga?ado.
La unidad de asuntos internos de la Polic¨ªa Nacional llevaba varios meses investigando las corruptelas supuestamente protagonizadas por los siete agentes detenidos el martes y en las que participaba otra persona ajena al cuerpo. Seg¨²n fuentes policiales, "era de dominio p¨²blico" que en la comisar¨ªa de esta ciudad, en la que hab¨ªa apenas una treintena de agentes, se produc¨ªan "demasiadas irregularidades".
Los servicios jur¨ªdicos del sindicato Confederaci¨®n Espa?ola de Polic¨ªa (CEP) asumir¨¢n la defensa de cuatro de los polic¨ªas imputados, mientras que los letrados del Sindicado Unificado de Polic¨ªa (SUP), atender¨¢n a los otros tres. Los representantes sindicales en la provincia de ambas formaciones, Juan Carlos Gil (CEP) y Manuel Bea¨ªn (SUP) pidieron ayer que se respete la presunci¨®n de inocencia de sus afiliados. El comisario provincial, Jos¨¦ Guti¨¦rrez Valenzuela, se?al¨® que "en un colectivo de 50.000 personas como la Polic¨ªa es posible que se den casos de corrupci¨®n, pero son excepcionales. Tanto en el caso del CIE como en ¨¦ste, la Polic¨ªa Nacional ha actuado con rapidez y transparencia", informa Fernando J. P¨¦rez.
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