Ceguera p¨²blica
Canal Sur apuesta por lo seguro, y lo seguro es "el lado oscuro de la actualidad", es decir, un programa inexplicablemente titulado Vista p¨²blica dedicado al g¨¦nero de sucesos. Los lunes, a las 22.20, tendremos lo nunca visto en televisi¨®n: una reportera que acompa?a a una patrulla de la polic¨ªa en una noche de marcha (el lunes pasado, la patrulla recorr¨ªa diversas zonas de Almer¨ªa, y como llov¨ªa la reportera le pregunt¨® a los guardias si es m¨¢s dif¨ªcil patrullar en noches con lluvia), secciones como 'Los m¨¢s buscados' (lo nunca visto: casos de desaparecidos hace a?os), 'En paradero desconocido' (m¨¢s de lo mismo), y lo que quieran imaginar.
Lo presenta Luis Mari?as, que se limita a anunciar lo que vendr¨¢ una hora m¨¢s tarde (el lunes pasado no dej¨® de advertirnos de la necesidad de ver un reportaje sobre "el estrangulador de C¨¢diz") y a dar paso a lo inmediato con frases nunca o¨ªdas hasta la fecha ("No pierdan detalle de este escalofriante testimonio"). El principio del programa pone los pelos de punta: Mari?as anuncia una retah¨ªla de horrores, cr¨ªmenes y desgracias de los que podremos quedar informados hasta la saturaci¨®n, y uno piensa que es como para huir a otro canal. De haberlo hecho, en Canal 2 Andaluc¨ªa se habr¨ªan encontrado, en el programa de Miguel R¨ªos, con el reportaje de Patricia Sim¨®n sobre los enfermos mentales que hay en Andaluc¨ªa, los problemas que plantea su cuidado, y hasta habr¨ªa o¨ªdo a m¨¢s de uno de estos enfermos decir que oye voces.
Yo salto a CSTV en ese instante y Mari?as est¨¢ diciendo: "Oigan atentamente esta voz", y es la voz del estrangulador de C¨¢diz contando con todo detalle c¨®mo descuartiz¨® a un amigo de la infancia. La patrulla policial de Almer¨ªa ha llegado ya, cuando Antonio Vega est¨¢ cantando en Buenas noches, bienvenidos, a un punto en el que se nos hab¨ªa prometido presenciar una pelea muy violenta entre dos mujeres (chasco: la patrulla lleg¨® tarde y lo que se vio fue nada y menos). Miguel R¨ªos presenta a Javier Ruibal, que canta Habana m¨ªa, mientras Mari?as da paso a la historia de un jugador de rugby acusado de abusar de una menor: el reportaje es eterno y se soporta (bueno: lo soporto yo) gracias a los rotulillos de por debajo (el mejor fue ¨¦ste: "Un sevillano acusado de abusar de una menor"). Los r¨®tulos que subrayan lo que estamos viendo (todo es una acumulaci¨®n de obviedades) dan mucho de s¨ª; por ejemplo, bajo las im¨¢genes de la patrulla policial de Almer¨ªa un titulillo desliza esta perla: "La polic¨ªa nunca debe subestimar a nadie por lo que pueda pasar".
Cuando Luis Garc¨ªa Montero y Ana Rossetti est¨¢n hablando, en la casa de Miguel, de erotismo y poes¨ªa, Mari?as conecta nada menos que con Tony King el caso del desaparecido de Marbella. Los reportajes a los que Mari?as da paso son truculentos y sensacionalistas; no llegu¨¦ a ver el del estrangulador de C¨¢diz (francamente, prefiero a Antonio Vega), pero todo responde a una llegada f¨¢cil al resultado m¨¢s barato. Y da verg¨¹enza que la cadena ceda el prime time a esta cosa y relegue a Canal 2 el lujo que Miguel R¨ªos nos regal¨®. Pero qu¨¦ les voy a contar.
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