La derecha contraataca
No s¨¦ si los que formamos la izquierda catalana hemos alcanzado a captar la importancia de la reedici¨®n del pacto de Gobierno en la Generalitat. La derecha pol¨ªtica y sobre todo, econ¨®mica, s¨ª. El Gobierno presidido por Maragall supuso un cambio radical despu¨¦s de 23 a?os de gobiernos de CiU apoyados frecuentemente por el PP. Marta Ferrusola lo expres¨® mejor que nadie al referirse a que era "como si les hubieran entrado en casa". Pero los propios errores del Gobierno tripartito, la presi¨®n generada por la negociaci¨®n del Estatuto, y la famosa foto Zapatero-Mas hicieron concebir en sectores conservadores la esperanza de que la experiencia de un Gobierno catalanista y de izquierdas ser¨ªa un par¨¦ntesis en la historia pol¨ªtica catalana y que las elecciones anticipadas del 1 de noviembre de 2006 volver¨ªan a colocar las cosas en su sitio. No fue as¨ª y ahora los analistas m¨¢s conscientes de la derecha intuyen que el Gobierno de izquierdas puede durar cuatro, ocho o m¨¢s a?os.
En el Gobierno de Montilla ICV-EUiA ha pasado a ocupar el centro del debate pol¨ªtico
El Gobierno de Maragall se caracteriz¨® por el hecho de que era ERC, a veces por propia responsabilidad, casi siempre por la intransigencia de sectores reaccionarios, el objeto de confrontaci¨®n pol¨ªtica. En cambio, ICV-EUiA, de la que esos sectores temen su apuesta por pol¨ªticas de izquierdas, apareci¨®, gracias sobre todo, al papel de Joan Saura como un elemento de estabilidad. Las ¨²ltimas elecciones han permitido un nuevo pacto de izquierdas, pero con una novedad respecto a 2003: mientras que PSC y ERC perd¨ªan fuerza electoral y representaci¨®n parlamentaria, Iniciativa las aumentaba. El mayor peso pol¨ªtico de ICV-EUiA no apareci¨®, al principio, con claridad en la estructura de Gobierno debido a la decisi¨®n de reducir el n¨²mero de consejer¨ªas. Pero el efecto empieza a notarse ahora: s¨®lo hace falta analizar los interlocutores del Gobierno de Madrid con relaci¨®n a todos los departamentos de la Generalitat, y en particular a los gestionados por Iniciativa: Interior y Relaciones Institucionales y Participaci¨®n se relaciona con dos ministerios, Interior y Administraciones P¨²blicas, y adem¨¢s para cuestiones de desarrollo estatutario y memoria hist¨®rica con la vicepresidenta del Gobierno; Medio Ambiente y Vivienda lo hace con las ministras responsables de esos dos departamentos. Desde otro punto de vista, los consejeros Saura y Baltasar gestionan la acci¨®n gubernamental sobre dos de las principales preocupaciones de la ciudadan¨ªa (vivienda y seguridad) y sobre dos materias que afectan directamente a determinadas concepciones del desarrollo (medio ambiente) y a la recuperaci¨®n de la memoria democr¨¢tica, que todav¨ªa levanta resentimientos ideol¨®gicos. Que los herederos del PSUC, hoy miembros del Partido Verde Europeo, tengan esas responsabilidades es demasiado para determinadas mentalidades.
De ah¨ª nacen algunos ataques. Grupos como CiU y el PP, sectores econ¨®micos y comentaristas pol¨ªticos que hace a?os hab¨ªan expedido el certificado de defunci¨®n de ICV, han pasado del menosprecio de la invisibilidad a la cr¨ªtica furibunda. Sin embargo las encuestas contin¨²an anunciando nuevas subidas electorales de ICV-EUiA y la mejora constante de la imagen p¨²blica de Joan Saura.
Un ejemplo de esas cr¨ªticas lo constituye la descalificaci¨®n de ICV-EUiA para dirigir la pol¨ªtica de Interior. Se pretende presentar a esa coalici¨®n como capaz de gestionar tan s¨®lo determinadas pol¨ªticas sectoriales, pero se la invalida para gobernar elementos troncales de la acci¨®n p¨²blica o para gestionar globalmente un pa¨ªs.
El caso de Interior es significativo. Porque, el PSUC, primero, y ICV-EUiA despu¨¦s, siempre han presentado propuestas sobre la seguridad p¨²blica, han ejercido esa responsabilidad en importantes ciudades y han mantenido siempre una actitud de di¨¢logo en los a?os de Gobierno de CiU que hizo posible la negociaci¨®n y el voto afirmativo a las principales leyes que han configurado el modelo de seguridad de Catalu?a. Adem¨¢s, los temores son infundados: Saura aplicar¨¢ el programa de Gobierno pactado por PSC, ERC e Iniciativa, y adem¨¢s acaba de ofrecer al resto de partidos, en especial a CiU, un gran acuerdo nacional sobre las cuestiones fundamentales en esta materia, que incluye la culminaci¨®n del despliegue de los Mossos d'Esquadra sobre la totalidad del territorio catal¨¢n.
Pero, como en todo departamento, existe un margen de actuaci¨®n para imprimir un sello propio a la materia que se gestiona. Saura se propone crear el Consejo de Seguridad de Catalu?a: ICV defiende que la participaci¨®n de la sociedad civil no debe ser excluida del campo de la seguridad ciudadana. Tambi¨¦n pretende priorizar la lucha contra la violencia de g¨¦nero o crear un comit¨¦ de ¨¦tica policial.
Un aspecto ha centrado las cr¨ªticas de la derecha: la puesta en marcha de un plan para facilitar la incorporaci¨®n de personas procedentes de la inmigraci¨®n al Cuerpo de Mossos d'Esquadra. No se trata de darles ventajas, sino de situarles en pie de igualdad con el resto de candidatos que superar las pruebas de acceso. El objeto no es reducir el d¨¦ficit de mossos que el proceso de despliegue ha generado y que se solucionar¨¢ el a?o 2009, sino conseguir que la polic¨ªa refleje la realidad social a la que debe servir. El tema est¨¢ m¨¢s que estudiado y aplicado en diversos pa¨ªses. El a?o 2000, en ¨¦poca del Gobierno de CiU, el Centro Unesco de Catalu?a public¨® el libro Polic¨ªa catalana i multiculturalitat, en el que diversos expertos, entre los que se encontraban destacados funcionarios de la Escuela de Polic¨ªa de Catalu?a analizaban la cuesti¨®n y propon¨ªan medidas como las que ha avanzado el consejero Saura. La diferencia estriba en que CiU decidi¨® pol¨ªticamente no aplicar la medida y que ahora la izquierda se ha comprometido a convertirla en realidad.
Los electores de ICV-EUiA han de acostumbrarse a esta nueva situaci¨®n: hemos pasado a ocupar el centro del debate pol¨ªtico pero acostumbrarse no implica aceptar la cr¨ªtica sin r¨¦plica.
Jaume Bosch es vicepresidente de ICV y portavoz del grupo parlamentario ICV-EUiA.
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