Egipto estrecha el cerco sobre los Hermanos Musulmanes

El Gobierno egipcio estrecha el cerco sobre los Hermanos Musulmanes, principal fuerza de la oposici¨®n parlamentaria, pese a que sigue siendo una organizaci¨®n ilegal. Embarcado en una amplia reforma constitucional con el objetivo declarado de democratizar el pa¨ªs, el Gobierno de Hosni Mubarak contesta con detenciones masivas a las cr¨ªticas de los Hermanos Musulmanes de que s¨®lo busca un lavado de cara para "perpetuar la dictadura".

Seg¨²n Hamdy Hasan, portavoz parlamentario de esa organizaci¨®n isl¨¢mica, las detenciones son una "prueba de las mentiras del r¨¦gimen". Hasan, de 48 a?os, afirma que han sido detenidos desde diciembre unos 260 militantes, 79 de ellos en las dos ¨²ltimas semanas.

Los Hermanos Musulmanes tienen 88 diputados en la C¨¢mara baja, que cuenta con 454 esca?os, incluidos los 10 no electos que son nombrados por el presidente.

El dirigente islamista sostiene que las detenciones son puramente pol¨ªticas. "Pretenden", dice, "acallar nuestras cr¨ªticas y la creciente popularidad que gozamos entre el pueblo". La mayor¨ªa de los detenidos son ex candidatos a las elecciones parlamentarias de 2005, jefes de despacho de varios diputados, profesionales liberales, profesores universitarios, comerciantes y l¨ªderes sindicales y estudiantiles.

Hasan comenta que, hace dos semanas, los jueces que deb¨ªan procesar a 40 comerciantes y hombres de negocios no encontraron motivos para que estuvieran detenidos y les pusieron en libertad. En ese mismo momento, el Gobierno, bas¨¢ndose en la ley de emergencia reinante desde hace 25 a?os, les coloc¨® bajo jurisdicci¨®n militar, acusados de "lavado de dinero" y asociaci¨®n con una organizaci¨®n ilegal que "planea un golpe de Estado".

El sometimiento a un tribunal militar revela el agravamiento de las relaciones entre el Gobierno y los Hermanos Musulmanes, especialmente despu¨¦s de que Mubarak les calificara hace unos d¨ªas de "amenaza para la seguridad del Estado".

Con m¨¢s de un cuarto de siglo en el poder, Mubarak impulsa una transici¨®n controlada, que la oposici¨®n sostiene que s¨®lo pretende la entronizaci¨®n de su hijo. El rais lo niega, pero Gamal Mubarak, de 41 a?os, encabeza desde 2002 el comit¨¦ pol¨ªtico del gobernante Partido Nacional Democr¨¢tico (PND) y se ha colocado en la cima del poder. "Vamos a volver al tiempo de los faraones", ironiza el dirigente islamista, pero "hemos resistido y seguiremos resistiendo".

Si triunfa la reforma constitucional, que afecta a 34 art¨ªculos, los Hermanos Musulmanes podr¨ªan verse fuera del Parlamento definitivamente. La reforma parece destinada a modificar tambi¨¦n la Ley Electoral para incluir la prohibici¨®n de partidos de base religiosa. De ah¨ª, la tensi¨®n que se palpa en Egipto. Los Hermanos Musulmanes, que cuentan entre sus simpatizantes a m¨¢s del 20% de la poblaci¨®n, se presentan como independientes bajo la consigna de El Islam es la soluci¨®n.

Uno de los primeros 17 diputados de esta organizaci¨®n islamista, tras las elecciones de 2000, Hamdy Hasan, otorrinolaring¨®logo de profesi¨®n, insiste en que los egipcios "est¨¢n cansados de la dictadura y quieren una aut¨¦ntica reforma pol¨ªtica", como la que propugnan los Hermanos Musulmanes: "Elecciones limpias, libertad de prensa y respeto a la Ley y a la Constituci¨®n".

Seg¨²n Hasan, "esta nueva campa?a de detenciones forma parte de las medidas preventivas que habitualmente toma el r¨¦gimen al acercarse un periodo electoral, en este caso las elecciones al Senado, previstas para abril". Pese a ello, se declara optimista sobre el futuro y se dice convencido de que triunfar¨¢ el mensaje de "democracia y tolerancia" de los Hermanos Musulmanes.

La presi¨®n contra este movimiento aument¨® el pasado diciembre, despu¨¦s de que un grupo de universitarios realizara una marcha en el campus de la Universidad cairota de Al Azhar. Algunos de ellos se vistieron como los milicianos del grupo islamista palestino Ham¨¢s.

Relajado, Hasan bebe t¨¦ y no puede resistir la tentaci¨®n de fotografiar el espl¨¦ndido atardecer mediterr¨¢neo que se observa desde la terraza donde se celebra la entrevista, mientras desgrana el malestar existente entre la poblaci¨®n egipcia por la falta de libertades y el deterioro del nivel de vida. Su cr¨ªtica m¨¢s acerba es contra Occidente, "que se empe?a en apoyar a los gobiernos dictatoriales ¨¢rabes".

Hasan lamenta tanto "la ceguera, como el doble rasero de Occidente, que supuestamente apoya la democratizaci¨®n del mundo ¨¢rabe y luego boicotea un resultado limpio, como la victoria de Ham¨¢s en Palestina, cuando no le gusta". El diputado se pregunta: "?Es as¨ª como Occidente defiende sus intereses?". "As¨ª", se contesta, "s¨®lo consigue ganarse la desconfianza del pueblo".

Fundados en 1925, los Hermanos Musulmanes fueron ilegalizados en 1954 y durante todo el mandato de Gamal Abdel Nasser (1952-1970) sufrieron una terrible persecuci¨®n. Su objetivo final es el establecimiento de un Estado musulm¨¢n confesional, pero su dedicaci¨®n a tareas sociales -con un marcado apoyo a la educaci¨®n y la salud- con las que cubrir las carencias del Estado, les granje¨®, en la d¨¦cada de los setenta, una enorme popularidad entre las clases m¨¢s deprimidas. En la ¨²ltima d¨¦cada los Hermanos Musulmanes, con un discurso m¨¢s liberal, han extendido su militancia por profesionales, comerciantes, empleados p¨²blicos y en una buena parte de la clase media egipcia.

Aunque desean funcionar como un partido pol¨ªtico, no se plantean su legalizaci¨®n en las actuales circunstancias, ya que la decisi¨®n la toma un comit¨¦ cercano al Gobierno. "Es un comit¨¦ anticonstitucional, porque no cumple los preceptos de igualdad que recoge la Carta Magna. Por eso, nosotros no reconocemos su autoridad", a?ade.