Por una simple cuesti¨®n de igualdad

Ser mujer sigue siendo un gran obst¨¢culo para prosperar profesionalmente. En Espa?a, la proporci¨®n de directivas sobre el total de trabajadoras es del 6,3%, seg¨²n la Encuesta de Poblaci¨®n Activa de 2004. En el caso de los hombres esta cifra alcanza el 9,1%. Y no s¨®lo eso: la diferencia salarial entre sexos supera el 30% a favor de ellos, seg¨²n el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE). "En orden a acabar de una vez por todas con estas desigualdades, fundamentadas en falsas creencias y tradiciones ancestrales", el Gobierno de Catalu?a ha financiado los primeros cursos en toda Espa?a para mujeres interesadas en puestos directivos. La gesti¨®n y el profesorado ha corrido a cargo de la escuela de negocios Esade.

Solamente el 20% de los convenios -que afectan al 53,6% de los trabajadores- recoge cl¨¢usulas de igualdad entre sexos, seg¨²n datos de CC OO

En opini¨®n de una de las alumnas, "hay muchos hombres a los que les cuesta much¨ªsimo aceptar que su jefe tenga nombre de mujer"

La situaci¨®n laboral de la mujer ya no es la que era anta?o. En opini¨®n de los expertos, "sigue siendo injusta, pero poco a poco va abri¨¦ndose camino hacia la igualdad con el hombre". As¨ª, su tasa de actividad (mujeres con edad y capacidad para trabajar) es del 48,56%, seg¨²n el INE; en 1998 rondaba el 39,50%. En el caso de los hombres parece haber tocado techo en el 69%. La tasa de ocupaci¨®n femenina, por otra parte, es del 43,05%; en 1998 se situaba en el 29,21%. En el caso masculino esta estad¨ªstica se encuentra estancada en el 64,81%.

Ya lo dicen los fil¨®sofos: "El cambio es lo ¨²nico que permanece en el tiempo". Sin embargo, las reglas de juego del modelo de desarrollo econ¨®mico espa?ol apenas han variado. Solamente el 20% de los convenios -que afectan al 53,6% de los trabajadores- recoge cl¨¢usulas de igualdad entre sexos, seg¨²n el sindicato CC OO. Y por lo que respecta a las empresas del Ibex-35, tan s¨®lo el 3% de sus altos directivos son mujeres, seg¨²n el Instituto de la Mujer.

Para combatir estas "evidentes discriminaciones", el Gobierno de Catalu?a impuls¨® a finales de 2006 los dos primeros cursos en toda Espa?a de formaci¨®n directiva para mujeres, que han concluido recientemente. Su principal objetivo era "ayudar a las trabajadoras a romper el techo de cristal que limita injustamente su crecimiento profesional, sobre todo cuando se trata de ocupar cargos directivos", afirma Mar Serna, consejera de Trabajo de la Generalitat.

'Yo, directiva'

Bajo el t¨ªtulo de Yo, directiva, estos cursos de nueve sesiones de ocho horas cada uno "profundizan sobre aspectos relacionados con la estrategia y el liderazgo, la direcci¨®n financiera, de operaciones, as¨ª como el marketing y los recursos humanos", explica una de sus profesoras, Eugenia Bieto, subdirectora general corporativa de Esade. El 90% de los 2.000 euros que cuesta cada plaza ha corrido a cargo del Gobierno catal¨¢n, mientras que el 10% restante ha tenido que ser sufragado por las 30 alumnas que han participado en cada edici¨®n, cuyas edades iban entre los 26 y los 50 a?os.

El sentir general de las alumnas es que el curso les ha servido para dotarse de herramientas de gesti¨®n que antes no ten¨ªan, para mejorar su autoestima y confianza en s¨ª mismas, as¨ª como para establecer un productivo networking femenino, con el que crear un lobby de presi¨®n para conseguir la igualdad perseguida.

Para la directora comercial de la empresa Agbar Instalaciones, Laura Alabart, casada y con dos hijos, el curso le ha servido para "tomar conciencia" de que no es la "¨²nica mujer" que siente que tiene que "demostrar que vale continuamente para ocupar puestos directivos". En su opini¨®n, uno de los principales handicaps externos es que "hay muchos hombres a los que les cuesta much¨ªsimo aceptar que su jefe tenga nombre de mujer".

En cuanto a los obst¨¢culos internos, por otra parte, la responsable de control de negocio del grupo Bacardi, Helena Ca¨ªs, casada y sin hijos, asegura que "las mujeres suelen autolimitarse, creando un sentimiento de culpa por no ocuparse de las tareas familiares, que en ning¨²n caso se asocian con la responsabilidad del hombre".

La gerente de la empresa de asesor¨ªa jur¨ªdica y financiera Solvent, Concha Fuentes, con pareja y sin hijos, anima a las mujeres a desarrollar su propio negocio, de manera que "los ¨¦xitos profesionales dependan absolutamente del esfuerzo personal y no de circunstancias externas dif¨ªciles de cambiar".

Yo, directiva ha calado tan hondo en las alumnas, que incluso una de ellas, Arantxa Sebasti¨¢n, ha decidido abandonar su actual puesto de trabajo por limitar su "crecimiento profesional"; en el caso contrario, otra de las participantes, Eva L¨®pez, gracias a los conocimientos aprehendidos ha sido ascendida a jefa de departamento de la consultora T-systems. El ¨¦xito de estos cursos ha sido tal, que tanto la Generalitat como Esade quieren "mantener este acuerdo de colaboraci¨®n todo el tiempo que haga falta hasta que la desigualdad existente entre hombres y mujeres encuentre el equilibrio que unos y otros se merecen".