El desquite brit¨¢nico

En el Reino Unido ha empezado ¨²ltimamente a brotar cierto nacionalismo econ¨®mico como reacci¨®n al hecho de que importantes empresas nacionales estaban siendo vendidas a compradores extranjeros. En esa oleada vendedora las empresas espa?olas han jugado un papel muy relevante, aprovechando la apertura de la econom¨ªa brit¨¢nica.

A finales de este mes las juntas de Iberdrola y Scottish Power aprobar¨¢n su fusi¨®n, que es en realidad una compra de la el¨¦ctrica escocesa por parte de la espa?ola. El a?o pasado Telef¨®nica cerr¨® la compra de la operadora de m¨®viles O2, heredera celular de la propia British Telecommunications, y Ferrovial se hizo con British Airport Authority (BAA), la compa?¨ªa que gestiona los principales aeropuertos ingleses y escoceses. La primera gran adquisici¨®n la protagoniz¨® el Santander con la compra de Abbey National.

La hipot¨¦tica compra de Altadis por Imperial Tobacco ser¨ªa un peque?o desquite en ese toma y daca empresarial. Ambas tabacaleras son a su vez el fruto de fusiones en un mercado, el del tabaco, en el que la competencia es a escala mundial salvo en algunos mercados a¨²n cerrados, como el chino.

Altadis es el fruto de la fusi¨®n de Tabacalera y Seita, una operaci¨®n comandada en su d¨ªa desde Espa?a por C¨¦sar Alierta. Fue una de las primeras grandes fusiones internacionales protagonizada por una empresa espa?ola, una uni¨®n entre iguales que ha funcionado sin interferencias nacionalistas.

Burs¨¢tilmente, Altadis se ha convertido en una empresa netamente espa?ola. El jueves, sin embargo, los inversores pudieron durante alg¨²n tiempo comprar sus acciones en Par¨ªs mientras la cotizaci¨®n estaba suspendida en Espa?a por una falta de coordinaci¨®n entre la Comisi¨®n Nacional del Mercado de Valores espa?ola y su hom¨®loga francesa. Fue una ocasi¨®n muy rentable para quienes la aprovecharon.