Rajoy cree que Batasuna s¨®lo puede presentarse el 27-M si ETA se disuelve

El l¨ªder del PP, Mariano Rajoy, hizo bueno el dicho de a la tercera va la vencida. Tan embebido estaba en sus actividades en la calle de las ¨²ltimas semanas, que hasta en dos ocasiones se aplaz¨® la presentaci¨®n de los candidatos a las alcald¨ªas de m¨¢s de 20.000 habitantes. Pero ayer en Madrid cambi¨® las banderas de rojo y gualda por un manto de banderines anaranjados, los manifestantes por ardorosos simpatizantes y el himno nacional por la melod¨ªa popular en versi¨®n dance. Era el d¨ªa de sus 400 candidatos (el lema, Hay equipo) y de prometer pol¨ªticas "para resolver los problemas que de verdad importan a los ciudadanos". Aunque no olvid¨® las marchas de Madrid y Navarra, "en defensa de Espa?a, la libertad y de rechazo a las cesiones a ETA".

El l¨ªder del PP asegura que los socialistas "han perdido hasta el talante y deben rectificar"

Cambi¨® el contexto, pero no el discurso. Ante unas 2.500 personas arranc¨® gritos de "?No! ?No!", cuando acus¨® al Ejecutivo de "estar esperando un gesto de Batasuna para dejarles presentarse a las elecciones" del 27 de mayo. "S¨®lo un gesto podr¨ªa servir para que Batasuna se presentara, un comunicado unilateral de la banda terrorista en el que manifieste su decisi¨®n de disolverse", subray¨®.

Abri¨® el acto una enfervorizada Esperanza Aguirre, que cosech¨® grandes asentimientos y muchas palmas. La presidenta de Madrid situ¨® a su comunidad como "la capital y el coraz¨®n de la naci¨®n espa?ola", tras las marchas contra la pol¨ªtica antiterrorista del Gobierno, que Rajoy "tuvo el acierto de convocar". Y vaticin¨® que tras ¨¦stas se termin¨® el veto a la bandera y al himno, y "los espa?oles ya no sentir¨¢n verg¨¹enza" de mostrarlos "gracias al PP".

Con la euforia desatada por los teloneros -incluidos el candidato a la alcald¨ªa de Sevilla, Juan Ignacio Zoido; el de Barcelona, Alberto Fern¨¢ndez; el de Vitoria, Alfonso Alonso, y el de Madrid, Alberto Ruiz-Gallard¨®n-, el l¨ªder de los populares ya estaba bien afinado cuando lleg¨® su turno, y atac¨® en varios frentes: "Zapatero hace o¨ªdos sordos a lo que dice la calle"; "las personas que quieren seguridad, estabilidad, previsibilidad, moderaci¨®n y sensatez miran al PP"; "el Gobierno no respeta aquello que acordamos entre todos en 1978", etc. En su opini¨®n, a los socialistas no les queda ni el talante. "Si es que alguna vez lo tuvieron..."

Lleg¨® el turno de Gallard¨®n y vaticin¨® que el camino m¨¢s corto a La Moncloa pasa por las municipales, que ser¨¢n "un anticipo de la llegada de Rajoy al Gobierno". Fue un intercambio mutuo de elogios, en el que el l¨ªder puso como ejemplo la gesti¨®n del alcalde.

Tron¨® el himno del partido y mientras todos los candidatos quer¨ªan irse a casa con una foto junto al l¨ªder, en el exterior, alg¨²n asistente continuaba con la resaca de las recientes movilizaciones. En una gran pancarta se le¨ªa: Rajoy, Espa?a te necesita.