Un gal¨¢ctico alem¨¢n para ACS
El grupo que preside Florentino P¨¦rez entra en la tercera constructora mundial por ventas
La constructora alemana Hochtief ha asaltado los titulares econ¨®micos espa?oles de la mano de ACS. La sociedad de Florentino P¨¦rez se ha hecho con el 25,1% de la constructora westfaliana, tercera del mundo por facturaci¨®n, cuya venta puso en marcha el pasado febrero el banco de inversi¨®n parisiense Rothschild en nombre del grupo alem¨¢n Custodia, propiedad del magnate August von Fink.
La direcci¨®n de Hochtief ve¨ªa con recelo los planes de partici¨®n del grupo que se atribu¨ªan al hasta ahora mayor accionista de la empresa
Si bien 1.264 millones de euros no son una suma extraordinaria para Fink, cuya fortuna se estima en por lo menos 5.000 millones, la operaci¨®n ha sido un ¨¦xito econ¨®mico. El actual cabeza de la dinast¨ªa de banqueros alemana se hizo con la cuarta parte de Hochtief entre septiembre de 2005 y febrero de 2006. Pag¨® unos 40 euros por acci¨®n y vende a 72, con unas ganancias de 500 millones de euros.
Lo que a todas luces es un buen negocio se debi¨® seg¨²n los analistas a la escasa disposici¨®n de la directiva de Hochtief a acatar los planes de Fink para la sociedad. El antiguo banquero pretend¨ªa liquidar algunos sectores del imperio de Hochtief e invertir el capital en compras a gran escala.
El accionista encontr¨® en el consejo de vigilancia la resistencia del peso pesado Heinrich von Pierer, presidente del consejo de vigilancia de Siemens. Tampoco el consejo dio el visto bueno a las reformas de Fink, que adem¨¢s tuvo que aceptar el nombramiento de Herbert L¨¹tkestratk?tter como presidente ejecutivo del consorcio.
Ser¨¢ el ingeniero industrial L¨¹tkestratk?tter, de 56 a?os, quien desde abril se encargar¨¢ de tratar con los accionistas espa?oles. El pasado jueves resumi¨® sus intenciones para el grupo: "Ser m¨¢s rentables, abrir nuevas ¨¢reas de negocio y entrar en los mercados ¨¢rabe y ruso". No descart¨® el ejecutivo, seguidor del equipo de la liga regional Preu?en M¨¹nster, que la entrada de ACS despierte en ¨¦l una nueva afici¨®n por el f¨²tbol internacional. Pero seguro que no le bastar¨¢ con esto para satisfacer a los nuevos propietarios.
Aunque Hochtief super¨® las previsiones de los analistas y logr¨® aumentar la facturaci¨®n de 2006 en un 13,6% respecto al ejercicio anterior, los 15.500 millones de euros de volumen de negocio no son para echar cohetes, especialmente porque se acaban traduciendo en s¨®lo 89 millones de beneficio neto. El futuro presidente se apresur¨® a pronosticar un aumento de beneficio para este a?o. Hasta los 100 millones de euros.
ACS, con una facturaci¨®n algo inferior, logr¨® el a?o pasado unos beneficios de 1.250 millones, 14 veces m¨¢s que los de la firma alemana. El grupo espa?ol estudiar¨¢ la forma de aprovechar lo que diplom¨¢ticamente denomina "gran potencial de aumento de la rentabilidad" de Hochtief. ACS no consolidar¨¢ a Hochtief por integraci¨®n global, sino por puesta en equivalencia. Eso quiere decir que se apuntar¨¢ su parte de los beneficios, pero su cifra de negocio y su posici¨®n en el ranking mundial.
Expansi¨®n internacional
Con la compra, ACS acelera su expansi¨®n internacional, especialmente en concesiones de infraestructuras y en grandes obras p¨²blicas y edificaci¨®n institucional, ¨¢reas en las que se abordar¨¢n proyectos conjuntos. ACS logra ahora el 84% de sus ingresos en Espa?a, mientras que Hochtief es uno de los grupos m¨¢s internacionales.
L¨¹tkestratk?tter y su directiva han acogido la operaci¨®n de los espa?oles con una simpat¨ªa forjada por el miedo al desmembramiento del consorcio. Desde que se extendieron las primeras noticias de la puesta a la venta del paquete de Fink, planeaba sobre Hochtief la amenaza de la desintegraci¨®n. En enero, la prensa especializada titulaba con la posible llegada de nuevos accionistas con el prop¨®sito de vender divisiones enteras del consorcio. Tras el anuncio de ACS, el a¨²n presidente Hans-Peter Keitel apart¨® de s¨ª el c¨¢liz de la sospecha respecto a las intenciones de P¨¦rez. Seg¨²n Keitel, nada permite dudar del espa?ol sobre la independencia de Hochtief. Pese a que ACS subray¨® la "liquidez de los activos de Hochtief que, valorados individualmente, exceden con mucho el precio pagado".
La veterana empresa de la construcci¨®n con sede en Essen fue fundada por los hermanos Philipp y Balthasar Helfmann en 1873. Es uno de los primeros grupos mundiales de construcci¨®n y el mayor de Alemania, dedicado a proyectos de todo tipo. Ofrece la planificaci¨®n, desarrollo, construcci¨®n y los servicios para proyectos como edificios de oficinas, polideportivos, aeropuertos y v¨ªas de comunicaci¨®n. Su firma de gesti¨®n aeroportuaria Hochtief AirPort es una de las mayores empresas privadas del mundo en el sector. Hochtief emplea a 41.500 personas en los cinco continentes, de los que casi 10.000 est¨¢n en Alemania.
Vacaciones de Hitler
Durante la larga historia del consorcio, Hochtief ha pasado diversas crisis. Durante la dictadura nacionalsocialista particip¨® en la construcci¨®n del complejo de vacaciones preferido por Adolf Hitler en los Alpes. El dictador pas¨® los ¨²ltimos meses en otra edificaci¨®n de Hochtief, el famoso b¨²nker que le protegi¨® de las bombas aliadas hasta que se quit¨® la vida en 1945. La propia empresa reconoce que se sirvi¨® de trabajadores forzosos durante la guerra.
Tras la grave crisis que sigui¨® a la capitulaci¨®n alemana, Hochtief se recuper¨® especializ¨¢ndose en la construcci¨®n de centrales nucleares. En los setenta, los beneficios en el extranjero ya superaban a los beneficios en Alemania. En los ochenta, la compa?¨ªa diversific¨® su oferta y entr¨® en Leighton Holdings, l¨ªder del sector en Australia del que hoy controla el 52%. Con la entrada de Fink en 2005, Hochtief se promet¨ªa un periodo duradero de estabilidad. Su brusco final ha abierto las puertas a ACS y a nuevas especulaciones sobre el futuro del consorcio. Un periodista de la agencia alemana DPA, al respecto que "Hochtief ser¨¢ gal¨¢ctica". No parec¨ªa sarcasmo.
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