Cort¨¢zar, publicista
Estamos madre e hijo en la cocina de nuestra casa charlando cuando de fondo, en la televisi¨®n, escuchamos una voz que nos llama la atenci¨®n por familiar. Levantamos la vista y nos encontramos con un anuncio de coches, concretamente de Seat. ?Es la inconfundible voz de Julio Cort¨¢zar leyendo su maravilloso Pre¨¢mbulo a las instrucciones para dar cuerda al reloj! Vale que nos hayamos acostumbrado al apropiacionismo publicitario de m¨ªticas canciones con fines comerciales, pero que ahora se apropien, no s¨®lo del texto, sino que tambi¨¦n de la voz de Julio Cort¨¢zar para intentar vender un coche, quiere decir que estamos inmersos en una enorme incongruencia cultural.
Este bonito cuento de Cort¨¢zar ya no ser¨¢ de Cort¨¢zar, sino de Seat tal como Bowie ahora es de un anuncio de seguros o de la radio televisi¨®n espa?ola. Y tantos otros...
Gracias Seat, por lo menos podr¨ªais tener el detalle de dejar aparecer el nombre de Cort¨¢zar en alguna esquinita de la pantalla.
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