El caos urban¨ªstico impide que 11.000 extranjeros puedan votar en Orihuela

La formaci¨®n pol¨ªtica de Orihuela Costa, Claro, denuncia que un tercio de los extranjeros residentes en el municipio no podr¨¢ votar el 27 de mayo debido al caos urban¨ªstico. De los 16.000 formularios de inscripci¨®n en el censo electoral enviados en septiembre a trav¨¦s de Correos a la comunidad extranjera -am¨¦n de estar censados, los residentes tienen que manifestar su deseo de votar- 11.000 fueron devueltos al no hallar los domicilios por la an¨®nima trama urbana. El partido responsabiliza al Consistorio, gobernado por el PP, de la merma de sus derechos.

"Esta situaci¨®n afecta a miles de votantes, suficientes como para influir en los resultados de las elecciones", subraya Antonio Cerd¨¢n, miembro de la formaci¨®n Claro, creada en 2006 por residentes extranjeros de la UE. Cerd¨¢n critica que s¨®lo lleg¨® una de cada cuatro papeletas electorales enviadas a la costa de Orihuela, enclave que acoge al 30% de la poblaci¨®n total empadronada en este municipio, esencialmente brit¨¢nicos y noruegos. Seg¨²n la formaci¨®n, el censo electoral envi¨® los citados comunicados -estas misivas tienen que ser firmadas y devueltas al buz¨®n de correos para asegurar la inclusi¨®n en el censo electoral- en septiembre. Sin embargo, seg¨²n confirm¨® el ente p¨²blico del servicio postal a los dirigentes de Claro, 11.000 misivas fueron devueltas. Este peri¨®dico intent¨® sin ¨¦xito corroborar este extremo con Correos.

Ante esta avalancha de devoluciones, la oficina electoral, seg¨²n Claro, decidi¨® remitir una segunda remesa pero fue, de nuevo, devuelta. Este documento es un requisito imprescindible para los extranjeros. Mientras los ciudadanos espa?oles empadronados pasan autom¨¢ticamente a estar inscritos en el censo electoral no ocurre lo mismo con los residentes de la UE que quieran participar en los comicios locales. Este colectivo debe rellenar el formulario para asegurarse su inclusi¨®n en el censo electoral.

Para Claro, la privaci¨®n de la colonia extranjera de su derecho a voto "es un esc¨¢ndalo y una verg¨¹enza". Por ello, la formaci¨®n denunci¨®, el pasado 28 de febrero, ante la delegaci¨®n del Comit¨¦ de Peticiones del Parlamento Europeo la "violaci¨®n" de los derechos de los extranjeros residentes en la costa de Orihuela. La formaci¨®n recalca que una directiva de la Uni¨®n Europea advierte de que el derecho a voto de los extranjeros debe ejercitarse en igualdad de condiciones con los espa?oles.

El presidente de Claro, Bob Houliston, rechaza cualquier excusa, ya que estas anomal¨ªas ya se produjeron en las municipales de 2003 as¨ª como en las elecciones del Parlamento Europeo en 2004. De hecho, esta situaci¨®n ya fue denunciada en 2003 por el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE). En esa fecha, el organismo estatal comunic¨® al Ayuntamiento que un total de 8.600 viviendas no constaban en el padr¨®n municipal, por lo que sus residentes no podr¨ªan votar.

Ante la devoluci¨®n de las papeletas, Claro moviliz¨® a sus miembros para informar a la colonia extranjera de que pod¨ªan inscribirse en el censo electoral, en las dependencias municipales, antes del 31 de enero. Pero, seg¨²n la formaci¨®n, la escasez de funcionarios provoc¨® largas colas con, seg¨²n Antonio Cerd¨¢n, un tiempo de espera de dos horas. A ello, hay que sumar los problemas con el idioma.