Torres de 30 metros en lugar del parque prometido

Los vecinos de Islas Filipinas quieren un parque y no un campo de golf. Su petici¨®n no es un capricho: Chamber¨ª (150.000 habitantes) tiene muy pocas zonas verdes y los ni?os apenas disponen de espacios para jugar. Adem¨¢s, contaban con la palabra de un pol¨ªtico: Alberto Ruiz-Gallard¨®n, que en 2003 y cuando era presidente del Gobierno regional les prometi¨® un parque en el antiguo dep¨®sito de agua del Canal.

Cuatro a?os despu¨¦s, la promesa verde se ha transformado en un campo de golf (con una zona de pr¨¢cticas con 100 puestos de tiro y nueve hoyos de reducidas dimensiones), pistas de p¨¢del, un campo de f¨²tbol y varios edificios. Por usar las instalaciones -que miden en total 9,3 hect¨¢reas- hay que pagar. Para terminar de diluir el sue?o del parque, hay unas enormes torres met¨¢licas a 30 metros de altura para sujetar las redes del campo de golf. Las instalaciones fueron inauguradas el pasado 28 de marzo, pero la pol¨¦mica se remonta al pasado oto?o. El Ayuntamiento de Madrid orden¨® en noviembre la paralizaci¨®n de las obras al entender que el Gobierno regional, propietario de los terrenos, estaba haciendo unas obras que exced¨ªan la licencia urban¨ªstica que le hab¨ªa concedido en 2003.

Adem¨¢s, el Gobierno regional recibi¨® el pasado diciembre un informe desfavorable de la Comisi¨®n Institucional para la Protecci¨®n del Patrimonio Hist¨®rico-Art¨ªstico y Natural. Pero para poder continuar, el pasado enero el Gobierno regional us¨® una estratagema y declar¨® la zona de inter¨¦s general. As¨ª, la Comunidad de Madrid no necesita licencia de construcci¨®n. La Ley del Suelo establece que para que un proyecto sea de inter¨¦s general debe tener car¨¢cter de urgencia o ser de excepcional inter¨¦s p¨²blico y que eso se justifique.

El Ayuntamiento de Madrid se lav¨® las manos y el alcalde, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, renunci¨® a mantener la disputa en los tribunales. Desde el oto?o, los vecinos se han manifestado un par de veces al mes en defensa de su parque. La ¨²ltima, el pasado marzo. All¨ª se pudieron escuchar c¨¢nticos de protesta como "?parque, parque, parque, el golf a otra parte!".