Garz¨®n rechaza suspender ANV al no hallar "el m¨¢s m¨ªnimo indicio" de vinculaci¨®n a ETA
El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garz¨®n rechaz¨® ayer la pretensi¨®n de la asociaci¨®n Dignidad y Justicia de suspender judicialmente al partido Acci¨®n Nacionalista Vasca (ANV) al no existir "el m¨¢s m¨ªnimo indicio de pertenencia, integraci¨®n, vinculaci¨®n org¨¢nica, ni siquiera temporal o transitoria, de ANV con ETA-Batasuna". Garz¨®n lleg¨® a esta conclusi¨®n tras analizar el informe conjunto de la Polic¨ªa y la Guardia Civil sobre ANV y constatar que sus dirigentes no han desarrollado actividades relacionadas con ETA.
ANV es hoy un partido legal, sin que conste que sus estructuras hayan sido 'fagocitadas' por organizaciones ilegales
"No se puede producir una cadena inacabable de ilegalizaciones si no hay indicios incontestables", afirma el juez
El magistrado afirma que su decisi¨®n es "provisional", y puede variar si se hallan pruebas que ahora no se conocen
El magistrado se?ala, sin embargo, que su decisi¨®n es "provisional", con base en los indicios de los que se dispone en este momento. Con ello quiere decir que "pueden aparecer otros indicios, que ahora no existen o no se conocen y que, debidamente aportados, pudieran hacer variar la posici¨®n" adoptada ayer.
El juez explica la doctrina reunida en algunos de sus autos y asegura que en ellos "no se criminaliza ni una ideolog¨ªa ni una opci¨®n pol¨ªtica concreta", sino a unas personas por su participaci¨®n en hechos presuntamente delictivos. "Cuando han existido indicios, se ha suspendido o declarado il¨ªcitas a Batasuna, Jarrai, Segi", etc¨¦tera. Pero "no se puede producir una cadena inacabable de suspensiones ni ilegalizaciones si no hay indicios probatorios incontestables", a?ade.
El auto judicial desmenuza la historia de ANV desde su fundaci¨®n, el 30 de noviembre de 1930, hasta ahora y recuerda que particip¨® en Herri Batasuna desde 1978 hasta 2001, en que se configura Batasuna y decide permanecer fuera de ella. Con Batasuna ya suspendida por Garz¨®n en 2003, miembros de esa formaci¨®n y ANV pactaron un protocolo de colaboraci¨®n "para intentar, en la medida de lo posible, frenar parte de los efectos de una ilegalizaci¨®n". Pero tras la efectiva ilegalizaci¨®n de Batasuna, ANV, aunque participa en diversos actos, "mantiene una estructura diferente, ajena al propio entorno de Batasuna".
Para Garz¨®n queda as¨ª demostrado que ANV se ubica, como Batasuna, en el mismo ¨¢mbito ideol¨®gico que la izquierda abertzale, pero a partir de 2001 la vinculaci¨®n es espor¨¢dica y coyuntural. El informe conjunto de la Polic¨ªa y Guardia Civil reclamado por Garz¨®n detalla cuatro aspectos destacados:
- ANV no ha sido creada ni dirigida por ETA, aunque al formar parte de HB podr¨ªa haber estado instrumentalizada indirectamente por la banda.
- ANV no ha estado ni est¨¢ bajo la disciplina de ETA despu¨¦s de 2001, aparte de algunas puntuales coincidencias en objetivos comunes.
- ANV, hoy por hoy, no es un instrumento de ETA-Batasuna y se trata de un partido pol¨ªtico legal, sin que conste que sus estructuras hayan sido fagocitadas por otras organizaciones ilegales.
- Es una formaci¨®n pol¨ªtica que se inserta en la izquierda abertzale, aunque no en la que definen ETA y Batasuna.
En suma, el juez constata "la plena legalidad de la formaci¨®n cuestionada y que es ajena al proceso penal por presunta integraci¨®n en organizaci¨®n terrorista, en el que se solicita su suspensi¨®n.
Respecto de las tres estrategias del proyecto electoral de Batasuna, o planes A (legalizaci¨®n del partido Abertzale Sozialisten Batasuna, presentado y pendiente de resoluci¨®n del Tribunal Supremo), B (agrupaciones electorales) y C (utilizaci¨®n de alguna candidatura de ANV), Garz¨®n incide en que los documentos intervenidos por la polic¨ªa se refieren al proyecto pol¨ªtico de Batasuna, pero ninguno contiene referencia alguna a ANV.
Siguiendo el mismo informe conjunto, el magistrado cita elementos que avalan "la separaci¨®n" entre los responsables de Batasuna y ANV: que los dirigentes de ¨¦sta carezcan de antecedentes por delitos de terrorismo; que no haya constancia de que la sede de ANV haya sido utilizada por Batasuna, ni que sirva para financiar a estructuras ilegales (el hecho de tener una hucha con la pintura de Segi no es suficiente indicio); que no se haya averiguado si los contactos entre un miembro de Batasuna y una integrante de ANV obedecen a una relaci¨®n particular o a una hipot¨¦tica vinculaci¨®n entre ambas organizaciones.
En definitiva, el juez considera "inviable" la criminalizaci¨®n de ANV y de sus militantes y responsables org¨¢nicos, "sin perjuicio de lo que resulte en la jurisdicci¨®n de la Sala Especial del Tribunal Supremo" si la cuesti¨®n se plantea all¨ª.
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