Una mujer con prestigio y una carrera fulgurante
El 15 de marzo, en un c¨®nclave de la direcci¨®n de Kadima, su l¨ªder, Ehud Olmert, afirm¨®: "S¨¦ que soy un primer ministro impopular". Era el comienzo de su lucha por la supervivencia pol¨ªtica. El resto de los dirigentes ofrecieron su respaldo al angustiado primer ministro. Con una excepci¨®n. Su ministra de Exteriores, Tzipi Liv-ni, guard¨® un calculado y a la par estruendoso silencio.
Procedente del Likud, como la gran mayor¨ªa de los parlamentarios de Kadima, Liv-ni, de 48 a?os, es de las escas¨ªsimas figuras del Ejecutivo a la que adornan dos cualidades ahora cruciales: no se le conocen pecados de corrupci¨®n y goza de prestigio entre la opini¨®n p¨²blica.
Hija de un inmigrante polaco, casada y con dos hijos, y licenciada en Derecho por la Universidad de Bar Ilan, Liv-ni alcanz¨® el grado de teniente en las Fuerzas Armadas y en la d¨¦cada de los ochenta sirvi¨® en el Mosad, el servicio de espionaje exterior. Y nada m¨¢s despuntar en la arena pol¨ªtica, al hacerse con un esca?o en las elecciones de 2001, comenz¨® a labrarse un curr¨ªculum a un ritmo fulgurante. Ha ejercido como ministra de Agricultura, de Inmigraci¨®n y de Justicia en los Gobiernos de Ariel Sharon, y fue nombrada jefa de la diplomacia por su ahora contrincante Olmert.
Prudente, y m¨¢s moderada que muchos de los radicales que le acompa?aban en el Likud y ahora en Kadima, el primer ministro ha puenteado a su ministra de Exteriores en el manejo de las incipientes conversaciones para reactivar el moribundo proceso de paz con los palestinos.
Livni siempre ha sabido guardar silencio. Hasta ayer. Ahora, con su exigencia de dimisi¨®n a Olmert y su intenci¨®n de sucederle al frente de Kadima, ha decidido ir a por todas. Si consigue su prop¨®sito, su carrera pol¨ªtica se asemejar¨¢ a la de la ¨²nica mujer que ha sido ministra de Exteriores y jefa del Gobierno: Golda Meir.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.