Cuando el verso hierve
Violadores, Redman, La Mala y SFDK agitan el III Festival Cultura Urbana de Madrid con una reivindicaci¨®n de la vitalidad del 'rap'
La Mala sali¨® ayer al escenario e hizo suyo el tercer Festival Cultura Urbana de Madrid. Lo ten¨ªa dif¨ªcil porque compet¨ªa, entre otros, con Violadores del verso, el mejor cuarteto de rap de Espa?a, con SFDK, un d¨²o de prestigio, y con Redman, un treinta?ero de Nueva Jersey con un curr¨ªculum incuestionable. Pero fue recitar los primeros versos de Tengo un trato y ya no hubo duda: la estrella de las dos jornadas de la cita era ella, la ¨²nica mujer del cartel, minifalda vaquera y tacones de v¨¦rtigo. La nariz respingona m¨¢s irreverente del rap espa?ol lanzaba: "lo m¨ªo pa'mi saco".
"La respuesta del p¨²blico ha sido incre¨ªble", dijo Redman al bajar del escenario
La de C¨¢diz sabe dejarse querer. "Creo que me voy a ir", amenazaba a la hora de actuaci¨®n. "Bueno, una m¨¢s. Pero s¨®lo una, no soy una chica f¨¢cil". Mientras rimaba "M¨ªrame a los ojos / si me quieres matar", de su ¨²ltimo ¨¢lbum, Malamarismos, nadie parec¨ªa acordarse de Nas, la gran baja de ¨²ltima hora, que hace poco sugiri¨® que el hip-hop se hab¨ªa estancado en el t¨®pico. Violadores discrepan. "A¨²n guardo la esencia del rap en este tarro / olor concentrado a dolor / a l¨¢grimas y a enfado". Hate, escoltado por Kase-O, L¨ªrico y R de Rumba, recitaba la letra de Vivir para contarlo, el tema insignia de su nuevo ¨¢lbum hom¨®nimo, ante la multitud (cerca de 17.000 asistentes, seg¨²n la organizaci¨®n) que se congreg¨® el viernes en el Parque Juan Carlos I. Junto al s¨¢bado, ayer, la cifra total subi¨® a unos 33.000, seg¨²n el Festival.
Violadores reivindican la vitalidad del hip-hop y no est¨¢n solos. Suscriben su afirmaci¨®n Mala Rodr¨ªguez, SFDK, que tambi¨¦n cantaron ayer, y Redman, un rimador que no necesita demostrar nada. Firm¨® el viernes la actuaci¨®n m¨¢s espectacular de la noche. Clav¨® sus cl¨¢sicos, como Da Rockweiler, Da Goodness y desliz¨® uno m¨¢s para la galer¨ªa: una relectura del fundacional Rapper's Delight, de Sugarhill Gang, considerada la pieza que dio origen al g¨¦nero, all¨¢ por 1979. "El hip-hop no est¨¢ muerto, ni mucho menos", zanj¨® el MC de Nueva Jersey.
Una opini¨®n con la que seguro que coinciden los miles de adolescentes y veintea?eros que cultivaron el viernes y ayer las tres ramas que integran el hip-hop: la m¨²sica (rap), el baile (breakdance) y la pintura (graffiti). En los duelos de gallos se retaban los rimadores aficionados, y en las batallas de breakdance, los bailarines. Los artistas del espray ten¨ªan varias paredes dispuestas para la ocasi¨®n.
El rap lo han protagonizado los MC (rimadores), ya fueran impulsivos, como el sevillano Tote King o el estadounidense Ja Rule, o m¨¢s bien mesurados, como el madrile?o El Choj¨ªn. Pero la cita tambi¨¦n ha constatado que los dj son quienes colocan la bandeja de ritmos sobre la que los MC sirven sus versos. Algunos nombres hace a?os que brillan en el circuito, como el franc¨¦s Cut Killer, que actu¨® el viernes. Es el dj de la violenta La Haine (El odio), la pel¨ªcula de Mathieu Kassovitz que pareci¨® advertir en 1995 de la revuelta de los suburbios de Par¨ªs en 2005.
De que el hip-hop hierve en Espa?a no le cupo ninguna duda a Redman, que baj¨® del escenario alucinado. "La respuesta de la gente ha sido incre¨ªble", coment¨®. La reacci¨®n del p¨²blico es fundamental para un rimador, como reconoci¨® Hate, de Violadores. "Claro. Es una cadena. T¨² ves que se lo pasan bien, entonces t¨² lo haces mejor, y entonces ellos disfrutan m¨¢s", se?al¨®, entre jadeos y empapado de sudor, al acabar el concierto. Un buen MC demuestra ante el respetable lo que La Mala cant¨® para cerrar su actuaci¨®n: "Tengo lo que t¨² quieres".
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