"Un programa de entrevistas es una necesidad en una televisi¨®n p¨²blica"
De la mano de Baltasar Magro (Domingo P¨¦rez, Toledo, 1949), La 2 rescataba en septiembre de 2004 De cerca, un formato de entrevistas en profundidad a personajes "con historias profesionales o personales de inter¨¦s para los espectadores", seg¨²n el director y presentador. Desde entonces han pasado m¨¢s de cien invitados, desde m¨¦dicos como Valent¨ªn Fuster (cardi¨®logo) o Santiago Dexeus (ginec¨®logo) a escritores de la talla de Francisco Ayala, Ryszard Kapuscinski o Eduardo Galeano, pasando por pol¨ªticos como Alfonso Guerra o Loyola de Palacio, artistas como Miguel Bos¨¦ o Pilar Bardem o sacerdotes como Jon Sobrino. Hace unas semanas, el espacio ha adelantado su hora de emisi¨®n a las 20.05.
Pregunta. Una entrevista "pura y dura, a palo seco", as¨ª defini¨® usted De cerca, y as¨ª contin¨²a.
Respuesta. S¨ª, yo quer¨ªa que fuera un programa muy sobrio, que nada perturbara la atenci¨®n sobre el invitado, que es a fin de cuentas la estrella. Para m¨ª era esencial dar a los personajes la oportunidad de ser escuchados.
P. A menudo se compara a De cerca con A fondo.
?Cree que su espacio recoge el esp¨ªritu del m¨ªtico formato que presentaba Joaqu¨ªn Soler Serrano?
R. S¨®lo un poco, A fondo se distingue mucho del nuestro en cuanto a la producci¨®n. El equipo era grande y se hac¨ªan pocas entrevistas, eso redundaba en su calidad.
Independientemente de las diferencias que puede haber entre Soler Serrano y yo, en
De cerca la preproducci¨®n est¨¢ menos cuidada porque se trabaja al ritmo de una entrevista a la semana.
P. En dos a?os y medio han pasado m¨¢s de cien invitados de toda ¨ªndole y condici¨®n. ?De qui¨¦n guarda un recuerdo especial?
R. Algunos me han sorprendido mucho, y reconozco que ninguno de los 114 entrevistados me ha decepcionado. Tengo un recuerdo especial para
Kapuscinski, Llu¨ªs Llach, Jos¨¦ Luis Sampedro y Jos¨¦ Manuel Caballero Bonald. Y tambi¨¦n para otros m¨¢s desconocidos, pero que ha sido un placer indagar en sus vidas, como Nuria Oliver, experta en inteligencia artificial; Juan Hidalgo de Cisneros, descendiente de uno de los almirantes de la batalla de Trafalgar; la cient¨ªfica Josefina Castellv¨ª, o Catalina Montes, hermana de un jesuita asesinado en El Salvador.
P. ?Y le han dado muchas calabazas?
R. No, s¨®lo Fernando Fern¨¢n-G¨®mez. He tenido suerte, todos los que he querido han venido.
P. ?Qu¨¦ invitados esperan en la parrilla de salida?
R. Clemente Serna, el abate de Silos; Carlos Jim¨¦nez, el hombre que m¨¢s sabe de seguridad inform¨¢tica en el mundo, o el violinista Ara Malikian. Intento que los invitados pertenezcan a las m¨¢s variadas esferas.
P. Usted pas¨® 16 a?os en Informe semanal. ?C¨®mo vivi¨® el paso a De cerca?
R. Como un choque, Informe semanal es como la mitad de mi vida. Dejarlo me doli¨® porque no fue voluntario, pero no va a estar uno siempre en el mismo sitio.
P. He le¨ªdo que el encargo de poner en marcha De cerca le cay¨® como un jarro de agua fr¨ªa
R. Al principio, quiz¨¢. Fue un cambio llamativo para m¨ª, acostumbrado al mundo del reportaje. Pero me adapt¨¦ enseguida. De cerca me ha permitido conocer a gente interesant¨ªsima.
P. Parafraseando la canci¨®n de Golpes Bajos Malos tiempos para la l¨ªrica, ?el g¨¦nero de la entrevista est¨¢ en v¨ªas de extinci¨®n?
R. Me parece que corren malos tiempos para todo lo cultural.
P. Entonces, ?piensa que mantener en antena un programa como De cerca es una heroicidad?
R. M¨¢s que una heroicidad creo que un programa de entrevistas es una necesidad en una televisi¨®n p¨²blica.
P. ?El cambio de horario perjudica o beneficia al espacio?
R. Ha sido muy da?ino. De cerca no es un formato para la tarde, no le pega nada la luz; est¨¢ concebido para una franja de noche, ¨ªntima. El objetivo, seg¨²n la direcci¨®n, es ganar audiencia. En su horario nocturno, el programa se iba consolidando y ten¨ªa ¨ªndices por encima de la media de La 2. Ahora, la audiencia ha bajado, as¨ª que no encuentro mucho sentido el cambio.
P. ?C¨®mo ve el futuro de Televisi¨®n Espa?ola?
R. Es un momento muy complicado y desconcertante. Est¨¢ claro que esta empresa necesitaba una reforma, pero no podr¨ªa decir si se ha hecho con el planteamiento m¨¢s adecuado.
P. ?Y a usted no le ha afectado el expediente de regulaci¨®n de empleo?
R. Por edad me afecta, pero hice una adhesi¨®n provisional y, si nadie me pide que me quede, me marchar¨¦ en enero de 2009.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.