La campa?a de la prensa gratuita
Los partidos utilizan los diarios que se reparten gratis para atacar al adversario y atraerse a potenciales votantes
Ni mensajes subliminales, ni persuasi¨®n sucinta. Los partidos se valen del nuevo fil¨®n de la prensa gratuita para abrir sus alas sin ambages en la campa?a y llevarse a su nido ideol¨®gico a su presa: el potencial lector. Si fuera de la campa?a, cualquier trabajador de Valencia y su ¨¢rea metropolitana usuario del transporte p¨²blico (principal punto de reparto) pod¨ªa acudir a su trabajo con cinco ejemplares gratuitos, en tiempos de elecciones la n¨®mina crece si uno quiere y sus manos dan abasto. Minidiario ha lanzado, para relatar las bondades del PP, una edici¨®n especial Mislata-Xirivella, localidades de notorio inter¨¦s estrat¨¦gico en las urnas. Mislata, con casi 46.000 habitantes, formaba parte del "cintur¨®n rojo" hasta que en 2001 el PP accedi¨® al poder a trav¨¦s de una moci¨®n de censura. Xirivella (30.000 habitantes) resiste como basti¨®n progresista, gobernado por el PSPV, de ese cintur¨®n que ha ido menguando.
Minidiario dedica cada d¨ªa dos p¨¢ginas y portada a analizar la actualidad de ambos municipios. En las p¨¢ginas de Mislata las im¨¢genes del alcalde o alg¨²n miembro del equipo de gobierno aparecen a diario, como si fuera un ¨¢lbum familiar, igual que el candidato del PP a alcalde de Xirivella. El PSPV, de aparecer, sobre todo el de Xirivella, lo hace para ser vilipendiado: por inaugurar casi a destiempo una instalaci¨®n, por impedir el reparto de zumo de clementina de la campa?a de la Generalitat...
El PSPV, con menor presupuesto, contrarresta el ataque con artiller¨ªa del mismo cariz en D¨ªa a D¨ªa, que convive con publicaciones como Cr¨°nica de Mislata. La consigna es la misma: dar p¨¢bulo a sus proyectos para captar pros¨¦litos. Ambas cabeceras incluyen actualidad auton¨®mica e informaciones culturales y deportivas m¨¢s neutrales. Ante tal despliegue medi¨¢tico, cabr¨ªa preguntar a los especialistas en comunicaci¨®n si un cuarto poder escrito tan manifiestamente partidista surtir¨¢ efecto, o si el futuro votante "pasa" de ser persuadido por la histeria pol¨ªtica gratuita.
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