Lorenzo no quiere l¨ªos

Al ritmo que rueda esta temporada, el que Jorge Lorenzo revalide el t¨ªtulo de campe¨®n mundial de los 250cc es cuesti¨®n de tiempo, pero de poco. En las cinco carreras disputadas hasta ahora, el motociclista espa?ol acumula cuatro victorias y un segundo puesto. A estas alturas de la pel¨ªcula, su bot¨ªn es excelente, pero tampoco podr¨ªa ser otro visto el estado de forma que se gasta.

El fin de semana se podr¨ªa haber torcido mucho para Lorenzo tras el accidente que sufri¨® en los ensayos del viernes, cuando sali¨® escupido de su Aprilia y se golpe¨® violentamente contra el suelo. Pero el campeonato entra ahora en una fase delicada, con seis carreras en ocho semanas, y el mallorqu¨ªn no quiere perderse ninguna. Quiere resolverlo cuanto antes y nadie en toda la parrilla del dos y medio parece capaz de imped¨ªrselo.

El italiano Andrea Dovizioso, con quien Giorgio deb¨ªa volver a enfrascarse encarnizadamente en la lucha por el t¨ªtulo, est¨¢ un pelda?o por debajo de ¨¦l. O dos. Algo parecido le ocurre a Alex de Angelis, quien, con el arrojo y la intrepidez que demuestra tener encaramado a su Aprilia, es un calco del Lorenzo del a?o pasado. Pero el espa?ol es otro. Sabe lo que quiere y el camino que debe transitar hasta conseguirlo.

"Tengo la cabeza m¨¢s centrada que el a?o pasado y estoy m¨¢s tranquilo", dice en tono reflexivo Lorenzo; "el equipo trabaja con mi moto m¨¢s que nunca. Todos sabemos que tengo una buena renta, pero que hay que afrontar las carreras restantes con humildad porque, si te conf¨ªas, pasa lo del viernes".

Lorenzo es consciente de que en cada carrera hay un momento reservado para que ¨¦l entre en la escena. Pero no al principio. M¨¢s bien, al final, cuando su moto ya se ha aligerado de litros de gasolina y sus rivales comienzan a ir justos de neum¨¢ticos. Ayer, tras salir como un disparo nada m¨¢s apagarse los sem¨¢foros, el vigente campe¨®n fue adelantado por Dovizioso y De Angelis (vuelta 10?). Pero, lejos de asumir riesgos innecesarios, Lorenzo, de 20 a?os, se mantuvo a una distancia prudencial, a menos de un segundo de ellos, y se protegi¨® para no salir trasquilado antes de hora.

A diferencia de lo que le ocurr¨ªa anteriormente, el balear interpreta a la perfecci¨®n cualquier situaci¨®n que se le plantea en el curso de la carrera. Piensa, analiza y ejecuta. Y esto ¨²ltimo lo hace ¨²nicamente cuando est¨¢ convencido de que su maniobra ser¨¢ tan mortal para sus rivales como definitiva para el desenlace. Ayer decidi¨® atacar en la vuelta 16?, a falta de 10 para la conclusi¨®n. Con De Angelis al mando, Lorenzo peg¨® su Aprilia a la Honda de Dovizioso y, al salir de un viraje, las motos fueron acerc¨¢ndose hasta que se tocaron. El susto zarande¨® al mallorqu¨ªn y le hizo saltar los pies de las estriberas. Luego, en el momento en el que restableci¨® el control de la situaci¨®n, Giorgio demostr¨® que no quiere problemas. Increment¨® su ritmo en medio segundo, dej¨® tirado a Dovi y salt¨® a por De Angelis.

Tras la precipitaci¨®n que le sobrevino en el tramo final del pasado campeonato, el piloto espa?ol est¨¢ convencido de que s¨®lo revalidar¨¢ el t¨ªtulo si consigue acabar en el podio m¨¢s a menudo que los dem¨¢s. Con una fisura en el dedo me?ique del pie izquierdo, no era cuesti¨®n de liarse en un berenjenal con nadie, y mucho menos con De Angelis. No obstante, un regalo siempre es bienvenido y, a falta de seis vueltas para el final, la Aprilia del sanmarinense le zarande¨®, momento que Lorenzo aprovech¨® para asomar la cabeza. Con el panorama despejado, el mallorqu¨ªn se mantuvo firme e incluso increment¨® su ritmo y no dio posibilidades a ninguno de sus perseguidores hasta cruzar la meta el primero. Y es que, este a?o, Lorenzo no quiere l¨ªos.