Politiquer¨ªa
Por un lado me fastidia lo de criticar constantemente a los pol¨ªticos, porque es un discurso que tambi¨¦n sostienen los antidem¨®cratas, desde los fascistas a los izquierdistas totalitarios, tipejos terribles con los que no apetece compartir nada. Es evidente que la sociedad necesita a los pol¨ªticos, que en la base de muchas vocaciones p¨²blicas hay un claro esp¨ªritu de servicio y que muchos pol¨ªticos en activo en Espa?a son admirables e incluso heroicos, como los candidatos de los partidos nacionales para las pr¨®ximas elecciones en el Pa¨ªs Vasco. Pero por otra parte se dir¨ªa que, tal como est¨¢ la cosa planteada, el sistema se encarga de arrinconar, agotar o aburrir a los pol¨ªticos m¨¢s v¨¢lidos, fomentando en cambio el ¨¦xito de los marmolillos, los bur¨®cratas, los intolerantes, los aduladores, los aprovechados, los mentirosos, los eg¨®latras y los dispuestos a vender a su madre en un mercado de esclavas a cambio de seguir pegando sus posaderas al sill¨®n. En el griter¨ªo de las campa?as electorales estos defectos brillan como nunca, y por eso suceden cosas tan contradictorias como que un candidato aparentemente de izquierdas cometa la rancia zafiedad de recurrir a cotilleos privados: si Sebasti¨¢n quiere denunciar a Gallard¨®n por alg¨²n desm¨¢n profesional, que aporte datos, en vez de agitar la foto de una chica con los modos de un contertulio de Salsa Rosa. Los pol¨ªticos nos tienen tan hartos, en fin, que en el ¨²ltimo bar¨®metro del CIS la crispaci¨®n pol¨ªtica se hab¨ªa colocado por primera vez entre los cinco problemas m¨¢s importantes de los espa?oles, por encima de las dificultades econ¨®micas y de la inseguridad. El jueves pasado asist¨ª a la presentaci¨®n del ¨²ltimo disco de Luis Eduardo Aute, A d¨ªa de hoy. Fue un concierto formidable en el que Aute demostr¨® c¨®mo se puede envejecer siendo coherente, aut¨¦ntico y eternamente joven. Aquel teatro estaba lleno de vida y tambi¨¦n de gente entusiasmada, pero no vi pol¨ªticos. Puede que hubiera alguno entre el tumulto, pero la mayor¨ªa deb¨ªa de andar por ah¨ª soltando peroratas electoralistas. Eso es lo que les pierde, que cada vez est¨¢n m¨¢s lejos de la realidad. Deber¨ªan ir m¨¢s a ver a Aute, deber¨ªan leer m¨¢s libros, deber¨ªan salir y re¨ªr m¨¢s, deber¨ªan ser m¨¢s personas y no marionetas obsesionadas por los intereses del poder y del partido.
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