Espejismos electorales

El Presidente de Gobierno, durante el viaje que el pasado lunes ha realizado a Alc¨¢zar de San Juan, contestaba a las preguntas de algunos periodistas y dec¨ªa que "una de las virtudes de la democracia es que un d¨ªa despu¨¦s de las elecciones yo puedo estar satisfecho y el PP tambi¨¦n". Sal¨ªa al paso de las declaraciones de Mariano Rajoy, en las que se proclamaba vencedor en las elecciones municipales y auton¨®micas. Y es comprensible -iron¨ªas presidenciales aparte- que Mariano est¨¦ contento, aunque no se sepa si est¨¢ contento por haber obtenido m¨¢s votos que el PSOE o por haber superado los que logr¨® Aznar, y su autoafirmaci¨®n sea para que abandonen el protectorado al que le someten los pretorianos de su mentor. Claro que, protectorados aparte, si se observa que el mayor n¨²mero de votos es en Madrid y que el m¨¢ximo triunfador se llama Alberto Ruiz Gallard¨®n, tan respetado por el PSOE como denostado por el sector conspirativo del 11M del PP, la alegr¨ªa de unos puede ser tristeza para otros.

En cualquier caso, y alegr¨ªas aparte, en esto del ganar y el perder pasa como en el f¨²tbol. No son los goles totales a favor ni en contra los que dan la liga o el triunfo. El Real Madrid, que tiene menos goles a favor y m¨¢s en contra que el Barcelona, es el l¨ªder. Lo que cuenta en f¨²tbol son los partidos ganados; en pol¨ªtica, los gobiernos municipales alcanzados por una u otra formaci¨®n. Y, tras las elecciones, el poder municipal y auton¨®mico en el Estado se ha incrementado a favor del PSOE. No obstante, entiendo la alegr¨ªa de Mariano. Eso s¨ª, lo que ya se entiende menos -francamente, no lo entiendo- es la alegr¨ªa de Javier Arenas. No se puede, siempre que quede algo de sentido com¨²n y de verg¨¹enza, ir por esta tierra andaluza saltando y brincando de entusiasmo y afirmando "que el PP-A ha ganado las elecciones municipales en Andaluc¨ªa".

En Andaluc¨ªa, el resultado de las elecciones municipales se ha volcado a favor del PSOE. Seamos serios. Si en estas elecciones, y en el total de Andaluc¨ªa, el PSOE ha sumado 1.555.798 votos, que son 64.893 m¨¢s que en el 2003, y el PP ha sumado 1.228.018, que son 23.911 m¨¢s que en el 2003, y con estos resultados el PSOE bate su record de concejales (4.390) y de alcald¨ªas en las que gobierna con mayor¨ªa absoluta (383 del total de los 770 municipios de Andaluc¨ªa) no se comprende los saltos de Javier Arenas. Menos a¨²n, si estos resultados arrojan una diferencia entre ambas formaciones pol¨ªticas de 8,5 puntos. Un punto m¨¢s que en el 2003. Podr¨¢ brincar y saltar de alegr¨ªa, pero los brincos no se acompa?an con los resultados reales. Estos resultados dicen que sigue perdiendo all¨¢ donde aterrice. Y puede que sea peor. De siempre los mejores resultados de la derecha han coincidido con la menor participaci¨®n de los ciudadanos. Pues, bien, si en Andaluc¨ªa resulta que en estas elecciones la participaci¨®n ha sido entre un 6% y un 8% inferior a la que tuvo lugar en el 2003 y a pesar de esta minoraci¨®n el PSOE ha logrado sus mejores resultados, podr¨ªa pensarse que parte del electorado de centro derecha ha votado al PSOE. Tambi¨¦n que, con una mayor participaci¨®n, los resultados ser¨ªan a¨²n m¨¢s favorables a la izquierda. En este y con este panorama, no estar¨ªa nada mal que la izquierda en general intentara volver a ilusionar; que desplegara toda su energ¨ªa en unas pol¨ªticas municipales y auton¨®micas sociales. Que la juventud, que los mayores y no tanto, sientan y sintamos la delicia de contemplar c¨®mo nuestro entorno cambia y se ha hecho posible. Hay que dejar atr¨¢s inmovilismos.

En fin, que hay ganadores como Alberto Ruiz Gallard¨®n que en su campa?a municipal ha hablado de Madrid y no ha crispado ni ha ofendido, m¨¢s bien ha soportado la ofensa de Miguel Sebasti¨¢n. Otros, como Javier Arenas, que solo ganan con una imaginaci¨®n que les hacer ver que el oasis del PP en Madrid, est¨¢ tambi¨¦n en Andaluc¨ªa. Tal vez Mariano, una vez supere su protectorado, termine andando con cuidado, no vaya a ser que a las pr¨®ximas elecciones no le salgan las cuentas de la lechera. En Andaluc¨ªa, y con los mimbres que tiene, seguro.