"Es una injusticia y una barbaridad"
Xabier Azkargorta (Azpeitia, 1953) dirigi¨® al Espanyol (1984-1986) y el Sevilla (1987-1988), antes de hacer historia al frente de la selecci¨®n boliviana, entre el 93 y el 94, a la que clasific¨® por vez primera en su historia para la fase final de un Mundial, el de 1994 en Estados Unidos. Azkargorta, como cualquier mortal, tambi¨¦n fue v¨ªctima del mal de altura al instalarse en La Paz, ciudad en la que vivi¨® durante el tiempo que comand¨® a la selecci¨®n y que est¨¢ situada a 3.600 metros sobre el nivel del mar. El Bigot¨®n, como le conoce la afici¨®n boliviana, atendi¨® a EL PA?S desde Caracas, en un receso de la conferencia que dio ayer, invitado por la federaci¨®n venezolana.
"La decisi¨®n de prohibir a Bolivia jugar en La Paz me parece absurda, injusta y un verdadero atropello", asegura Azkargorta, que insta a los dirigentes de la FIFA a que recapaciten. "Es evidente que hay una diferencia entre jugar en altura a hacerlo a nivel del mar", asume, pero la compara con las dificultades de jugar a 40 grados a la sombra, con una humedad relativa del 95% y a las 3 de la tarde o en Barcelona, un d¨ªa de junio cuando cae al sol: "A nosotros", recuerda en referencia a la selecci¨®n de Bolivia, "la FIFA nos oblig¨® a jugar el partido de inauguraci¨®n del Mundial de Estados Unidos en unas condiciones inhumanas s¨®lo por intereses televisivos. La humedad era tan alta que a los jugadores de los dos equipos les resultaba dif¨ªcil respirar durante el partido", recuerda.
Advierte Azkargorta: "Brasile?os y argentinos se han quejado siempre de subir a La Paz, como si Bolivia tuviera que disculparse por tener la orograf¨ªa que tiene. Y no es de ahora que Bolivia juegue en La Paz, lo ha hecho toda la vida", zanja el vasco. Y se pregunta en voz alta: "?No juega con ventaja Rusia cuando act¨²a como local y juega en Mosc¨², a 15 bajo cero? ?No usa Brasil a su favor el factor campo cuando juega en Recife, con un calor y una humedad asfixiante que exige, como lo hace la altura en La Paz, un proceso de adaptaci¨®n?". E insiste: "La Paz siempre ha estado a la misma altura y que yo sepa, Bolivia s¨®lo se ha clasificado una vez para un Mundial. Entonces, la ventaja es relativa. Al final se trata de jugar a f¨²tbol y da igual hacerlo con el fr¨ªo de la Europa del Este o con el asfixiante clima tropical. Si juegas, juegas", ahonda Azkargorta, al que se le reconoce orgulloso a trav¨¦s del tel¨¦fono cuando recuerda la gesta que consigui¨® al frente del combinado tricolor en la clasificaci¨®n para el Mundial. "Le ganamos 2-0 a Brasil y, claro, se justificaron hablando de la altura". Azkargorta, va m¨¢s all¨¢: "Evidentemente, se nota que juegas en altura, pero no hay ning¨²n estudio que demuestre que es nocivo para la salud. Nadie se ha muerto por jugar a f¨²tbol en La Paz. De hecho, muchas selecciones suramericanas se entrenan en el Lago Titicaca".
El t¨¦cnico vasco dirigi¨® tambi¨¦n a la selecci¨®n de Chile (1995-1996), al Yokohama Marinos de Jap¨®n (1997-1998) y al Chivas mexicano (2005), antes de aceptar el cargo de director t¨¦cnico internacional de las escuelas del Real Madrid, del que se ha desligado recientemente. Azkargorta es el ¨²nico entrenador que puede presumir de haber sido condecorado con el Condor de los Andes, la m¨¢xima distinci¨®n que puede otorgar el Gobierno boliviano a un civil.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.