Un magnate zanja un pleito de 300.000 euros jugando a los chinos

Mike Ashley ya ten¨ªa fama de estrafalario, sobre todo tras comprar hace dos semanas el club de f¨²tbol Newcastle. Pese a atesorar una de las mayores fortunas del Reino Unido gracias a sus cadenas de tiendas de art¨ªculos deportivos, nunca concede entrevistas, ni aparece en eventos p¨²blicos ni siquiera en actos corporativos. Pero su ¨²ltima actuaci¨®n va a acrecentar sin duda su perfil estramb¨®tico.

El empresario acaba de zanjar un pleito con el banco de negocios Merrill Lynch mediante un procedimiento poco usual: jug¨¢ndoselo a los chinos, el popular juego (llamado spoof en Reino Unido) en el que cada participante esconde entre cero y tres monedas en su mano y debe acertar cu¨¢ntas monedas hay en total.

La propuesta parti¨® del propio Ashley tras largas horas de infructuosas negociaciones. Pero no tuvo suerte. Perdi¨® la apuesta y tendr¨¢ que pagar las 200.000 libras (295.000 euros) que se disputaba con la entidad financiera.

El asunto lo ha destapado The Daily Telegraph. El diario informa que el conflicto se origin¨® porque nadie se quer¨ªa hacer cargo de las comisiones legales que deb¨ªa cobrar Merrill Lynch por los servicios prestados en la colocaci¨®n en Bolsa de la empresa Sports Direct, de la que Ashley es due?o.

La imagen de Ashley no sale bien parada en este asunto porque adem¨¢s de raro puede ser tachado de taca?o. Y es que se da la circunstancia de que el empresario logr¨® 929 millones de libras (1.370 millones de euros) al vender el 43% de Sports Direct en marzo pasado. A la salida del capital de Ashley se uni¨® el pasado jueves la renuncia del presidente de la compa?¨ªa, David Richardson. Ambos hechos han desatado la alarma entre los inversores y han provocado el desplome de la acci¨®n de la firma de art¨ªculos deportivos. Los t¨ªtulos que val¨ªan 300 peniques a finales de febrero ahora valen 196.

El diario londinense se?ala en su informaci¨®n que el juego de los chinos es muy com¨²n entre los gestores de la City, el centro financiero de Londres donde se cruzan todos los d¨ªas operaciones por millones de libras.

Ashley y Simon Mackenzey-Smith, el representante de Merrill Lynch, hab¨ªan discutido durante varias horas sobre qui¨¦n deb¨ªa hacerse cargo de unas comisiones del banco por 200.000 libras. Una cifra bastante peque?a si se tiene en cuenta que el conjunto de entidades que asesor¨® legalmente la operaci¨®n de salida a Bolsa cobr¨® casi 40 millones de libras (59 millones de euros). Pero las negociaciones se prolongaban durante horas y Ashley segu¨ªa empecinado en su postura de no hacerse cargo de la minuta.

As¨ª que finalmente, Mackenzey-Smith accedi¨® a jugar a los chinos para intentar desbloquear el asunto. "Se hab¨ªa hecho de noche y era muy tarde; las cosas se estaban retrasando. Puede que sea inusual pero es el modo en el que ellos decidieron zanjar el asunto", relat¨® a The Daily Telegraph un ejecutivo de Sports Direct, la empresa propietaria de la cadena de tiendas Lillywhites y de marcas deportivas como Lonsdale y Slazenger.

Tras un sonoro divorcio que le cost¨® m¨¢s de 50 millones de libras, Ashley vive recluido en su mansi¨®n de Hertfordshire, un condado al norte de Londres, protegido por todo tipo de medidas de seguridad para salvaguardar su intimidad, hasta el punto de que sus vecinos afirman no haberle visto nunca. Ahora ya saben al menos que siempre lleva tres monedas en el bolsillo.