El 'caso del aeropuerto' llega a juicio
L¨®pez-Santacruz, director de Bilbao entre 1997 y 2001, est¨¢ acusado de embolsarse 351.000 euros en comisiones por obras
Cinco a?os y medio despu¨¦s de que se destapase el esc¨¢ndalo, el que fue director del aeropuerto de Bilbao entre 1997 y 2001, Segismundo L¨®pez-Santacruz, se sienta hoy en el banquillo de los acusados de la Audiencia de Vizcaya. Tendr¨¢ que responder de cuatro delitos cometidos presuntamente durante su gesti¨®n: falsificaci¨®n de documento oficial, malversaci¨®n de caudales, fraude y cohecho.
Todos ellos est¨¢n relacionados con las obras de ampliaci¨®n del aeropuerto realizadas a finales de los a?os 90, que, seg¨²n la investigaci¨®n judicial, se adjudicaron por parte del ex director "con la intenci¨®n de lucrarse personalmente" y "obtener un beneficio econ¨®mico". Las irregularidades son variadas: se ha descubierto que en 17 expedientes de obras L¨®pez-Santacruz se autodesign¨® director t¨¦cnico para certificarlas y autorizar su pago, "sabiendo que no se iban a realizar". Estas actuaciones causaron un perjuicio econ¨®mico a AENA (el ente p¨²blico que gestiona los aeropuertos en Espa?a) de casi 522.000 euros.
Autoriz¨® pagar 17 obras no ejecutadas con un perjuicio a AENA de 522.000 euros
A esto se a?aden otras 15 irregularidades en adjudicaciones, como la contrataci¨®n a dedo "en casos que no proced¨ªa", la falta de datos sobre el tipo de obra a realizar, el pago de trabajos con graves defectos, la autorizaci¨®n de abonos por gastos que corr¨ªan a cargo del adjudicatario, o la fijaci¨®n de precios no competitivos. Todas ellas ocasionaron, se?alan tanto el juzgado de instrucci¨®n como la Audiencia, unos perjuicios "al erario p¨²blico" de m¨¢s de 234.000 euros.
La juez que ha instruido el caso revela que el entonces director del aeropuerto bilba¨ªno se embols¨® cuantiosas comisiones a cambio de realizar una "aut¨¦ntica designaci¨®n personal de las empresas y personas" que deb¨ªan realizar las obras. "Se traduc¨ªa en cantidades de dinero recibidas de personas cuya identidad no consta para obtener las mismas [las adjudicaciones]". Admite la juez que las investigaciones no han podido determinar "con exactitud" la cantidad defraudada, pero afirma que L¨®pez-Santacruz y su familia recibieron "cuando menos 351.027,72 euros". El dato procede de la investigaci¨®n policial de su patrimonio, certificada luego por un informe pericial que descubri¨® en las cuentas bancarias del ex director, su esposa y su madre hasta 950.000 euros sin justificar. En los extractos llamaba la atenci¨®n la concentraci¨®n de ingresos de origen no explicado: hasta 13 en un mismo d¨ªa, que superaban casi 32.700 euros. Este fraccionamiento se debe, seg¨²n los investigadores, a que las transferencias menores a 3.000 euros no obligaban a la entidad bancaria a declararlas a Hacienda.
Por estas operaciones est¨¢ tambi¨¦n imputada su esposa Laura Hern¨¢ndez por los delitos de falsificaci¨®n de documento con estafa y receptaci¨®n (aprovecharse de un dinero de procedencia il¨ªcita). Los ingresos figuraban en cuentas a nombre de su esposa y tambi¨¦n de su madre. En las cuentas de esta se descubrieron 382.000 euros de ingresos injustificados,por lo que fue imputada, aunque luego se sobresey¨® la causa debido a su avanzada edad.
Adem¨¢s de esto, Segismundo L¨®pez-Santacruz deber¨¢ responder del supuesto fraude cometido con el arrendamiento de la vivienda que le proporcion¨® AENA: compr¨® sucesivamente dos pisos en Getxo a nombre de su madre y, alterando el nombre de ¨¦sta para que no fuera reconocida como un familiar, se autoalquil¨® la vivienda. As¨ª, con la renta que le abonaba AENA iba pagando las hipotecas, "utilizando as¨ª dinero p¨²blico en beneficio propio". A ello a?adi¨®, seg¨²n asegura la Audiencia y la juez, el traslado al ente p¨²blico de las facturas de electricidad, tel¨¦fono y una plaza de garaje, sabiendo "que no ten¨ªa derecho" a ello.
La semana pasada, en la celebraci¨®n de la vista previa al juicio, el ex director ofreci¨® el pago de 240.000 euros en plazos a cambio de un acuerdo extrajudicial. A finales de 2004 ya plante¨® el abono de una cifra parecida a las costas del proceso, unos 150.000 euros. Como entonces, AENA lo rechaz¨® porque estima que los perjuicios causados superan con creces el medio mill¨®n de euros.
En su escrito de conclusiones del caso, la defensa de L¨®pez-Santacruz asegura que "decidi¨® en ocasiones" la adjudicaci¨®n a dedo debido a la presi¨®n ejercida desde el Ministerio de Fomento para concluir con rapidez las obras. Y sostiene que "no consta" que haya recibido comisiones de las empresas adjudicatarias ni que el incremento de su patrimonio "provenga de actividades il¨ªcitas".
La indagaci¨®n judicial se ha dirigido tambi¨¦n hacia una constructora, Enrique Otaduy (una de las principales del sector de Euskadi), que entre 1998 y 2000 recibi¨® 31 obras en el aeropuerto por casi 8,5 millones, lo que representaba el 79% de los trabajados contratados en ese periodo en el aer¨®dromo. Pero no se ha conseguido probar nada.
Un jurado popular ser¨¢ el encargado de dictaminar si son culpables el ex director y su esposa, los dos imputados en el caso, que ahora residen en un municipio de Sevilla. M¨¢s de 40 personas prestar¨¢n testimonio en una vista que est¨¢ previsto se prolongue durante las tres pr¨®ximas semanas.
Una denuncia an¨®nima dio la pista para la investigaci¨®n
El caso del aeropuerto de Bilbao tiene su origen en una denuncia an¨®nima enviada a la direcci¨®n de AENA a finales de 2000, en la que se detallaban algunas irregularidades que la investigaci¨®n judicial ha ido confirmando. La auditor¨ªa interna motiv¨® que L¨®pez-Santacruz -quien ocupaba su cargo desde el 20 de enero de 1997- fuera despedido fulminantemente el 28 de febrero de 2001.
El esc¨¢ndalo no trascendi¨® p¨²blicamente hasta un mes despu¨¦s, cuando los hechos fueron trasladados a la Fiscal¨ªa del Tribunal Superior vasco, que en junio de 2001 ya apreci¨® delitos de estafa y malversaci¨®n de caudales, y estim¨® que el ya ex director realiz¨® contrataciones "con claro ¨¢nimo de lucrarse". Las irregularidades salpicaron a gran parte del equipo directivo del aeropuerto y seis altos cargos fueron destituidos y sancionados, aunque luego los tribunales decretaron nula la sanci¨®n.
L¨®pez-Santacruz, con plaza de funcionario, volvi¨® a trabajar en noviembre de 2001 para el Ministerio de Fomento, donde contin¨²a porque s¨®lo una condena firme puede suponer su inhabilitaci¨®n, seg¨²n ha aducido el ministerio.
Pero en febrero de 2002 recibi¨® el primer varapalo judicial, cuando un juzgado de lo social consider¨® "procedente" su despido y rechaz¨® el recurso del ex director. En su fallo, el tribunal asegur¨® que L¨®pez-Santacruz cometi¨® cerca de 50 irregularidades en su gesti¨®n y valoraba que la comisi¨®n de las irregularidades por el responsable de controlar las contrataciones hace que sea "m¨¢s grave la infracci¨®n y m¨¢s reprochable la conducta".
Pero la instrucci¨®n ha supuesto que a L¨®pez-Santacruz se le abran otras dos causas: por un delito de alzamiento de bienes debido a la venta de su piso de Getxo y otro de falsificaci¨®n en el documento de compraventa de una vivienda en Pamplona, con el que quer¨ªa reducir la cuant¨ªa de sus ingresos sin justificaci¨®n. En el primero, la juez de Bilbao que investiga la causa principal le exigi¨® una fianza de 481.000 euros hace dos a?os. Pero el imputado no la abon¨® y vendi¨® su piso de Getxo en junio de 2004 por 1,3 millones. Tres d¨ªas despu¨¦s, fue escriturado un chal¨¦ en Sevilla a nombre de sus hijos, donde ahora tiene su residencia. Tambi¨¦n se ha descubierto la existencia de una sociedad, creada el a?o de su despido, que no incluy¨® en su patrimonio.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.