Tom¨¢s el Renovador

Cada vez que alguien le ha preguntado en los ¨²ltimos a?os cu¨¢ndo pensaba pasar a la primera l¨ªnea pol¨ªtica, Tom¨¢s G¨®mez Franco, de 39 a?os y nacido gracias a unos padres emigrantes en Enschede (Holanda), siempre ha respondido que sus aspiraciones se limitaban a ser alcalde de Parla. Algunos dec¨ªan que con la boca peque?a. Quiz¨¢s porque durante a?os ha sido un municipio con fama de pobre y marginal, hasta el punto de que se lleg¨® a acu?ar un dicho despectivo, que al regidor le molesta mucho escuchar: "A mamarla, a Parla".

Nada m¨¢s lejos de los t¨®picos. Desde hace una d¨¦cada, la localidad ha crecido en poblaci¨®n, hasta alcanzar los 105.000 habitantes; en prosperidad, con un parque industrial, y se ha expandido cuidando el urbanismo con modernas apuestas como el tranv¨ªa, inaugurado el pasado 6 de mayo, o la playa, una piscina de agua salada-balneario. Y lo ha hecho de la mano de su regidor, empe?ado en defender los intereses de sus ciudadanos codo con codo. Ellos se lo han agradecido con sus papeletas, que le convirtieron en el regidor m¨¢s votado en los municipios de m¨¢s de 50.000 habitantes de Espa?a en las dos ¨²ltimas elecciones. El 27 de mayo logr¨® el 74,43% de los votos.

G¨®mez es alcalde "las 24 horas", seg¨²n cuentan en su entorno. Y eso para ¨¦l no se traduce en tener despacho en la Casa Consistorial, y salir a dar la mano a los vecinos con intenciones populistas. Al contrario. Lo suyo es la lucha a pie de calle. Como en la Navidad de 2001, cuando pas¨® seis d¨ªas encerrado en la Consejer¨ªa de Sanidad, junto a otras 20 personas, hasta que arranc¨® al entonces consejero, Jos¨¦ Ignacio Ech¨¢niz, una entrevista para pedirle que Parla tuviera hospital. Despu¨¦s vendr¨ªa una masiva manifestaci¨®n con 15.000 personas en la Puerta del Sol, y G¨®mez puso autobuses a disposici¨®n de los vecinos. Hoy Parla alberga ya el edificio del futuro hospital, que funcionar¨¢ en un a?o. Lejos de atribuirse el m¨¦rito, el regidor proclama que fue un ¨¦xito de los vecinos.

Otra de sus haza?as fue dejar sola a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, en julio del a?o pasado, cuando fue a entregar las llaves de 450 pisos, porque no los hab¨ªa construido el Ivima, sino una empresa privada. G¨®mez se neg¨® a hacerse la foto.

Pese a sus responsabilidades como alcalde, ha logrado compaginar el tiempo para el estudio. G¨®mez, licenciado en Ciencias Econ¨®micas y Empresariales por la Universidad Complutense, con la especialidad de Pol¨ªtica Monetaria y Sector P¨²blico, prepara el doctorado sobre gesti¨®n sanitaria, esta vez por la UNED.

Quienes le conocen describen al alcalde de Parla como un hombre inteligente, de gran formaci¨®n pol¨ªtica e intelectual, con una l¨ªnea muy coherente. Es muy educado, con un punto de timidez, y hasta ahora ha mantenido un perfil muy discreto en pol¨ªtica. Tambi¨¦n en su vida privada. Est¨¢ casado, pero su esposa apenas ejerce de consorte oficial, y no tiene hijos. Es muy deportista y, adem¨¢s de la nataci¨®n, se esfuerza con las pesas. Ocasionalmente, practica el baloncesto. Est¨¢ muy concienciado con el cuidado de su salud -hay quien lo describe como "coqueto"- y no fuma, ni bebe. No todo son m¨¦ritos: se le tacha de ser un hombre demasiado ambicioso.

Ayer ya nadie pregunt¨® sobre su futuro pol¨ªtico. G¨®mez dio un paso al frente, apoyado por un heterog¨¦neo grupo de dirigentes socialistas, ante los derroteros que tomaba el Partido Socialista de Madrid (PSM), dirigido por una comisi¨®n gestora en funciones desde el jueves y en espera de celebrar un congreso extraordinario que decida qui¨¦n ser¨¢ su secretario general. Si Simancas fue conocido como el Pacificador, por acallar a las familias del PSM, ¨¦l quiere ser el Renovador.