"El teatro, en general, es un juego inteligente y divertido"

Jaroslaw Bielski (Lodz, Polonia, 1957) dirige la adaptaci¨®n de Alicia en el pa¨ªs de las maravillas llena de juegos de palabras, dobles sentidos y adivinanzas en verso que se representa hoy en San Sebasti¨¢n. Director, actor y profesor, Bielski fund¨® en 1989 en Madrid la Compa?¨ªa de Teatro Nuevo, rebautizada R¨¦plika Teatro.

Pregunta. ?Es sencillo ofrecer algo diferente en t¨ªtulos cl¨¢sicos como Alicia?

Respuesta. Nunca es f¨¢cil sorprender al p¨²blico, aunque a todos nos gusta, porque proponer algo distinto forma parte del juego. Esta vez hemos querido huir de la Alicia de Walt Disney para proponer otra m¨¢s pr¨®xima a los ni?os espa?oles.

P. El p¨²blico infantil es el m¨¢s dif¨ªcil. ?C¨®mo se le conquista?

R. Con algo divertido y que tenga acci¨®n. Por eso hemos escogido la versi¨®n versificada, porque el verso es muy pr¨®ximo al ni?o y tanto las canciones como los juegos verbales que se pueden aplicar son mucho m¨¢s bonitos. Es importante que el lenguaje sea ¨¢gil, que haya un colorido, ritmo y que la obra no sea s¨®lo una ocasi¨®n para re¨ªrse y pasar un rato, sino tambi¨¦n para reflexionar, para pensar. Alicia lo permite.

P. ?Sin dejar de ser un juego?

R. Es un juego, por supuesto, porque el teatro, en general, es un juego inteligente y divertido. De hecho, en muchos idiomas la palabra "actuar" se dice como "jugar". S¨®lo aqu¨ª se dice "interpretar" de una manera un tanto rebuscada. Los que quieren meter a los ni?os el gusanillo del teatro de manera pedag¨®gica, se equivocan; hay que hacerlo a trav¨¦s del juego.

P. Dice que los personajes se expresan "con irritante libertad". ?A qu¨¦ se refiere?

R. A que, como pertenecen a un mundo imaginario, pueden expresarse de forma m¨¢s libre que en la vida real, en la que estamos obligados por algunas normas. A trav¨¦s de animales y seres fant¨¢sticos se puede decir mucho m¨¢s del ser humano que a trav¨¦s de una persona concreta.

P. ?Hay suficientes profesores para tanta escuela teatral?

R. Es un problema grave, porque en Espa?a han surgido much¨ªsimas escuelas y no hay tantos maestros para poder realmente ense?ar. Hay muchas escuelas y escuelitas, algunas que forman y otras que deforman. Hay una confusi¨®n tremenda. En esta profesi¨®n tenemos el problema de que todo el mundo piensa que hacer teatro o ense?arlo es f¨¢cil, porque parte del juego, la improvisaci¨®n.