El Banco de Espa?a augura dificultades a la banca si no resta negocio inmobiliario

Tras 11 meses en el cargo, Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, gobernador del Banco de Espa?a, ha elevado el tono de los avisos al sector. Ayer, en el discurso anual, advirti¨® al sector que la desaceleraci¨®n inmobiliaria "podr¨ªa hacer sufrir los m¨¢rgenes de la cuenta de resultados". Por eso, pide a bancos y cajas que se orienten "hacia otras actividades". Ord¨®?ez aconseja que "no se adopten decisiones f¨¢ciles en el corto plazo", pero "con un potencial muy negativo en el medio". La deuda de las familias se situ¨® en el 125% de su renta bruta disponible, 10 puntos m¨¢s que en 2005.

No podr¨¢n decir que no fueron advertidos. Los bancos y cajas de ahorros recibieron ayer un mensaje n¨ªtido: deben ir "limitando la importancia que en sus carteras crediticias ha tenido el sector inmobiliario en los ¨²ltimos a?os, orient¨¢ndose hacia otros ¨¢mbitos de actividades diferentes". Entre cajas y bancos, la situaci¨®n est¨¢ peor para las primeras, ya que seg¨²n los propios c¨¢lculos del supervisor, las entidades de ahorro tienen el 70% de sus cr¨¦ditos relacionados, directa e indirectamente, con el ladrillo. En el caso de los bancos, el porcentaje cae hasta el 48%.

En el discurso pronunciado ante el Consejo de Gobierno del regulador con motivo de la presentaci¨®n del Informe Anual 2006, Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Ord¨®?ez reconoce que el golpe de tim¨®n ser¨¢ complicado. "En el dise?o de estas estrategias" (en referencia a los cambios) "cabe esperar que no se adopten decisiones f¨¢ciles en el corto plazo y con un potencial muy negativo en el medio". En ese sentido, advierte de que "nunca se debe caer en la tentaci¨®n de compensar la desaceleraci¨®n de la demanda con una dismi-nuci¨®n en los est¨¢ndares de calidad en la oferta de la financiaci¨®n".

Dicho con lenguaje m¨¢s sencillo, el supervisor est¨¢ avisando a bancos y cajas de que ante las dificultades que se avecinan no rebajen el nivel de exigencia en el riesgo que asumen de los clientes. Esta actitud es la que genera, al cabo de los meses, fuertes subidas de la morosidad.

Precisamente, de la morosidad lo que dice es que "se mantiene en niveles m¨ªnimos" y que en este momento, "no hay indicios de que vayan a trasladarse dificultades al sector, pese al mayor crecimiento de los activos dudosos" que se experiment¨® en 2006. Las ¨²ltimas estad¨ªsticas publicadas en el sector reflejaban un incremento de la morosidad del 25% anual, aproximadamente, ligeramente por debajo de lo que sube el volumen de cr¨¦ditos. La morosidad est¨¢ en el 0,4% frente al 4% que tiene Estados Unidos. Y recuerda que las hipotecas de alto riesgo de EE UU suponen el 14% del mercado, frente al 1,4% que representan en Espa?a.

Ahora bien, como no pod¨ªa esperarse menos de un supervisor, Ord¨®?ez afirma que "no queda margen adicional para mayores reducciones de la ratio" de morosidad. Su dibujo de 2007 y 2008 es, por tanto, una desaceleraci¨®n del negocio, una reducci¨®n de m¨¢rgenes de la cuenta de resultados, un aumento de los dudosos y la asunci¨®n de nuevos negocios. En ocasiones anteriores, el nuevo campo sugerido era el del cr¨¦dito al consumo y a las peque?as y medianas empresas.

Otro factor de riesgo que menciona el gobernador es el de los hedge funds o fondos de inversi¨®n libre y no regulada. Pese a que dice que bancos y cajas tienen un negocio fundamentalmente minorista, podr¨ªan verse afectados por estos jugadores por el hecho de que piden pr¨¦stamos en mercados internacionales. Ord¨®?ez se refiere a ellos como "agentes no sometidos a un r¨¦gimen de supervisi¨®n prudencial, que todav¨ªa no tienen una experiencia contrastada en la gesti¨®n de riesgos".

Estos hedge funds son desconocidos para el gran p¨²blico, pero podr¨ªan afectarles si llegan los problemas. La raz¨®n, como indica el Banco de Espa?a, es que los fondos de pensiones asumen riesgos de estos instrumentos. "Los consumidores, con unos conocimientos financieros que no han evolucionado con la sofisticaci¨®n del mercado, permanecen anclados en una cultura financiera muy elemental", apunta.

Los hogares espa?oles tienen un patrimonio de 6,1 billones de euros, repartido entre 1,76 billones en activos financieros (acciones, dep¨®sitos y fondos de inversi¨®n), y 4,34 billones en otro tipo de propiedades, la mayor¨ªa inmuebles, seg¨²n las cifras del regulador. Esta cifra creci¨® en 2006 hasta alcanzar el 625% del PIB, aunque a un ritmo menor que en a?os anteriores por la desaceleraci¨®n del precio de la vivienda.

Este factor provoc¨® una moderaci¨®n del incremento del endeudamiento familiar, que en 2006 creci¨® un 19,3% y se situ¨® en 776.138 millones de euros. La deuda de las familias se situ¨® cerca del 125% de su renta bruta disponible, 25 puntos por encima de la zona euro. El Banco de Espa?a advierte de que el alza del endeudamiento "eleva la exposici¨®n del sector ante perturbaciones adversas en el empleo, en el precio de los activos y en los tipos de inter¨¦s".

Abaratar el despido

A lo largo del discurso, el gobernador hizo tambi¨¦n referencia a las rigideces que persisten en el mercado de trabajo. Fern¨¢ndez Ord¨®?ez abog¨® por mejorar "la adecuaci¨®n del sistema de negociaci¨®n colectiva a la diversidad de requerimientos sectoriales" y, sobre todo, por introducir reformas "en los costes asociados a los contratos indefinidos", con lo que sugiri¨® la necesidad de abaratar el coste del despido, en especial en periodos de desaceleraci¨®n de la creaci¨®n de empleo.

El secretario general de Empleo, Antonio Gonz¨¢lez, consider¨® que el abaratamiento del despido es una medida "interesante", pero con la que la "inmensa mayor¨ªa de la gente" no estar¨ªa de acuerdo.